Giro de Italia: de esta forma se vigilará la presencia de covid-19

La detección de la covid-19 estará a la orden del día en el Giro, cuya 103.ª edición comienza el sábado en Sicilia. Serán tres antigénicos antes de la carrera y uno más durante cada una de las jornadas de descanso.

El conjunto de corredores fue sometido el miércoles y el jueves a los test antigénicos, que permiten un resultado muy rápido en pocos minutos, conforme a la reglamentación italiana que aprobó este tipo de pruebas. Un resultado positivo lleva después a un test clásico, que necesita un plazo más largo.

El método será repetido en las dos jornadas de descanso de la prueba, programadas para el 12 y el 19 de octubre.

Aunque la muestra de los test antigénicos es tomada de la nariz, como en los test RT-PCR, no necesita análisis en laboratorio, lo que autoriza un plazo de resultado mucho más corto.

Este sábado comienza el Giro de Italia, con veteranos como Vincenzo Nibali y Geraint Thomas, ambos con un Tour de Francia en su palmarés, como candidatos a vestir de rosa el 25 de octubre en Milán.

Pero el abanico se puede extender al menos a cinco corredores con serias opciones a la victoria final. Junto a Nibali (35 años) y Thomas (34 años), el danés Jakob Fuglsang (35 años), el holandés Steven Kruijswijk (33 años) y el británico Simon Yates, de 28 años, aspiran a lo máximo.

Contrario al último Tour de Francia, donde brilló la nueva generación encarnada en el sorprendente vencedor, el esloveno Tadej Pogačar (22 años), el Giro ofrece su oportunidad a los “treintañeros”.

Por eliminación también, ya que el prodigio belga Remco Evenepoel (20 años) es la gran baja después de su caída a mediados de agosto en el Giro de Lombardía.

Nibali, dos veces ganador del Giro (2013 y 2016), se postula para una tercera victoria que le situaría al nivel del mítico Felice Gimondi.

Además, el ‘Tiburón de Mesina’ correrá en esta ocasión en casa, al menos en las cuatro primeras etapas por la isla mediterránea de Sicilia.

Con información de la AFP.