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José Mourinho desilusiona a sus fans: firmó con nuevo equipo que nadie se esperaba
El portugués ya definió su futuro para la próxima temporada.
José Mourinho le dice adiós a las ‘grandes ligas’ del fútbol europeo. Después de un paso por la Roma, que coronó con la conquista de la recién nacida Conference League, el portugués ha optado por aceptar una oferta del fútbol turco.
De acuerdo al periodista Fabrizio Romano, que estuvo siguiendo cada segundo de la negociación, ‘Mou’ ya firmó su contrato para convertirse en nuevo entrenador del Fenerbahce.
Las negociaciones formales se entablaron en horas de la mañana de este viernes y aceleraron sin parar hasta el estrechón de manos que confirmó el nuevo rumbo de uno de los técnicos más respetados en el ‘viejo continente’.
“Después de un acuerdo verbal por la mañana, el acuerdo se selló hasta junio de 2026: contrato de dos años para el Special One”, escribió Romano en su cuenta de X (antigua Twitter), dando humo blanco para el ‘gigante’ de Turquía, que no estaba en las cuentas de los principales medios europeos como posible destino de Mourinho.
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🚨🟡🔵 José Mourinho has just signed the contract as new Fenerbahçe head coach, here we go!
— Fabrizio Romano (@FabrizioRomano) May 31, 2024
After verbal agreement in the morning, deal sealed until June 2026 — two year contract for the Special One. pic.twitter.com/DKIEVbG7P1
La noticia toma por sorpresa a los millones de seguidores que tiene el portugués alrededor del mundo. La esperanza era que pudiera tomar las riendas de otro ‘gigante’ de Europa o incluso se planteara la posibilidad de volver al Chelsea, que se quedó sin técnico hace poco por la destitución de Mauricio Pochettino, sin embargo, el agua corrió hacia otro lado.
Esta será la primera vez que Mourinho no dirigirá en alguna de las cinco grandes ligas desde que salió del Porto en 2004. Pasaron veinte años en total para que el estratega luso eligiera a un equipo de menos renombre en comparación con Real Madrid, Inter o Manchester United, último grande que tuvo bajo sus órdenes.
A pesar de que no tendrá los focos del planeta encima, ser jefe del Fenerbahce es un trabajo de gran presión para Mourinho. De hecho, este año el equipo turco hizo una impresionante campaña de 99 puntos en la liga local y alcanzó los cuartos de final de la Conference League, pero no fue suficiente para que İsmail Kartal mantuviera su cargo como entrenador.
A Kartal lo condenaron por haber perdido el título en la última fecha. Fenerbahce necesitaba que Galatasaray perdiera para subirse al primer lugar, pero el conjunto donde actúa el colombiano Dávinson Sánchez consiguió el resultado en condición de visitante y grito campeón en un cerrado mano a mano con uno de sus máximos rivales históricos.
La tarea para Mourinho es construir un equipo fuerte que pueda recuperar el trono del fútbol turco. Tras la conquista de Galatasaray en la temporada 2023/24, la diferencia entre ambos se alargó a cinco títulos: el vigente campeón llegó a 24 ligas en su historia, mientras que Fenerbahce se quedó atrás con 19.
Durante los meses que duró sin trabajo, Mourinho sonó para dirigir a James Rodríguez en São Paulo e incluso fue captado viendo un partido entre Fulham y Liverpool por la Premier League, hecho que disparó todos los rumores como posible reemplazo de Jürgen Klopp.
Al final, el portugués se mantuvo en su idea de tener tranquilidad y escapar del estrés que significa dirigir a los clubes más grandes. “¿Crees que si estuviera en un gran club de la Premier League y estuviéramos sexto, séptimo, octavo en la tabla, todavía tendría trabajo? Lo que estoy diciendo es que la gente debería mirarme como miran a los demás. Lo importante para mí es si el club tiene objetivos y poder decir que estoy dispuesto a luchar por ellos”, explicó en una entrevista con The Telegraph.
Esa sensación se basa en lo que pasó en su reciente paso por Italia. “Cuando fui a la Roma, nadie soñaba con una final de Copa de Europa y lo hicimos. No es posible ir a un club casi descendido y el objetivo es ganar la Champions. Es bueno, pero no es justo”, finalizó.