Khabib Nurmagomédov, el niño que peleaba con osos y se retiró como uno de los mejores de la historia de la UFC

A los 8 años, Khabib Nurmagomédov se entrenaba con osos por pedido de su padre, que quería que se convirtiera en un experto luchador, lo que es una tradición en la región rusa de Daguestán.

Abdulmanap, su padre, también había practicado deportes como judo y sambo como parte de su preparación en el Ejército soviético y siempre incentivó a Khabib para que se convirtiera en un luchador competitivo.

Casi 25 años después, Khabib se retiró invicto del deporte como campeón de los pesos ligeros de la UFC en artes marciales mixtas. En su último triunfo, el luchador conocido como el Águila venció a Justin Gaethje en su tercera defensa del título en el evento UFC 254.

Sin embargo, en el momento más importante de su carrera y cuando luce imbatible, Khabib decidió quitarse los guantes y lanzarlos al cuadrilátero, símbolo que significa el retiro entre los luchadores de artes marciales mixtas.

Esta trascendental decisión se produce por un pedido de su madre, que tras la muerte de Abdulmanap por coronavirus, le pidió a su hijo que no siga en las jaulas de UFC.

“Soy el campeón indiscutible e invicto de la UFC (Ultimate Fighting Championship) con un balance de 13-0 (en la UFC) y con 29-0 en toda mi carrera profesional en las MMA”, declaró después de su victoria en Abu Dhabi.

“Cuando me llamaron para pelear con Justin acepté, pero prometí que sería la última pelea sin mi padre”, confesó Khabib entre lágrimas al término del combate.

“Prometí a mi madre que esta sería mi última pelea. No puedo volver sin mi padre”, apuntó el ruso.

Desde su juventud, Khabib mostró habilidades depuradas y se convirtió en campeón mundial de sambo en 2009. Al mismo tiempo, seguía depurando sus técnicas para las MMA en las que debutó en 2008 con cuatro victorias en un mes.

Khabib sorprendió por su habilidad para los derribos y su rigor físico que lo hicieron indetenible en el octágono. Nadie podía estar a la par de su fuerza y su capacidad técnica para controlar los combates desde la lucha.

En la UFC debutó en 2012 venciendo a Kamal Shalorus por sumisión y desde que llegó a la organización más importante de las MMA tuvo absoluto dominio de sus rivales, ganando 8 peleas por nocaut y 10 por sumisión a lo largo de su carrera.

En 2018, Khabib logró el título del peso ligero tras imponerse frente a Al Iaquinta, pero sería su siguiente rival el que se convertiría en su enemigo más acérrimo, el polémico Conor McGregor.

Los dos luchadores se lanzaron fuertes acusaciones y el punto de inflexión de su relación fue cuando el irlandés atacó el bus en el que se transportaban Khabib y su séquito. McGregor recibió cargos por agresión, pues varios de los luchadores terminaron lesionados por los vidrios rotos del vehículo.

La rivalidad más intensa de la historia de la UFC terminó con una bochornosa pelea en la que el irlandés fue atacado por los compañeros del ruso tras ser derrotado.

Este combate rompió los récords de ‘pay per view’ (pague por ver) en las artes marciales mixtas y venía precedido de una larga disputa entre los dos combatientes, que se iba a resolver en el octágono.

La pelea estelar de la UFC 229 no defraudó y los dos exponentes más importantes de las MMA lucharon intensamente, con victoria para el ruso Nurmagomédov por la vía de la sumisión, cuando se disputaba el cuarto asalto.

Inmediatamente después de la estrangulación, Nurmagomédov saltó del octágono hacia donde estaban los miembros de la esquina del irlandés, lo que desató una escandalosa gresca.

Luego de esta singular situación, que pocas veces ha sucedido en un evento de esta magnitud, dos compañeros de entrenamiento del ruso ingresaron al octágono y atacaron a McGregor, que aún se recuperaba de su duro combate.

“Cualquiera podría haber saltado del octágono de la misma manera. Si nos atacan desde el exterior, todos podríamos saltar de esa manera. Cuando alguien nos provoca puede haber un infierno que apagar”, dijo Vladímir Putin que recibió a Khabib tras lograr el triunfo.

Raramente, Conor fue uno de los primeros en referirse al retiro de su rival y lo hizo con respeto: “Condolencias por tu padre, una vez más. Para ti y para tu familia. Atentamente, los McGregors”, escribió en Twitter en nombre de su familia.

Sobre el futuro de Khabib se anticipa que ahora se dedique a formar nuevos luchadores en su región natal.

“Volveremos a la cima muy pronto”, anunció el luchador ruso en un video publicado por su segundo entrenador, Javier Méndez.

Méndez incluyó este comentario que devela algunas pistas sobre el futuro de Khabib, que seguiría ligado a las MMA como entrenador: “Una despedida para el luchador más grande de todos los tiempos y un inicio de un futuro fantástico entrenador que se unirá a mí para forjar a futuros campeones”.