Los reparos de los futbolistas al protocolo propuesto por la Dimayor

Al igual que otras actividades, esta semana el fútbol profesional colombiano cumplió dos meses suspendido a causa de la emergencia del coronavirus en el país.

Pese a no conocerse casos concretos en equipos, la situación actual en Colombia no permite la reanudación de los campeonatos, como sí ha ocurrido ya en Alemania, donde el pasado fin de semana se jugó una nueva fecha de la Bundesliga.

Para avanzar en ese sentido, la Dimayor y la Federación Colombiana de Fútbol entregaron al Gobierno nacional la propuesta de un protocolo que planean aplicar para garantizar la salud de jugadores y miembros de cada uno de los equipos.

Aunque no se conocen detalles, el plan incluye la aplicación de 50.000 pruebas de covid-19 e instrucciones específicas para los médicos de los clubes, que serían los encargados de hacer cumplir las medidas.

Ante esto, la Asociación Colombiana de Futbolistas Profesionales (Acolfutpro) convocó a varios expertos en infectología, epidemiología, salud pública y microbiología, que evaluaron el protocolo de la Dimayor y, de la mano con jugadores, publicaron un documento con sus apreciaciones y “algunos aspectos son susceptibles de mejorar”.

Son 12 los puntos analizados por Acolfutpro, entre los que resalta, en primer lugar, la petición de una prueba de anticuerpos IgM “que debe ser tomada al momento del inicio de la agrupación de los equipos para los entrenamientos.

“Como aspecto importante se quiere aclarar que el rendimiento de estas pruebas rápidas es extremadamente variable y muchas de las pruebas actualmente circulantes en el país no son confiables. Por esa razón, este grupo de expertos hemos realizado un análisis de la evidencia disponible y pondrá a disposición de Acolfutpro y de los entes interesados, el listado de pruebas recomendadas con sus especificaciones técnicas”, agregó el gremio.

Los futbolistas, además, piden incluir “la responsabilidad en el marco legal y jurídico de la covid–19 como enfermedad laboral” y llaman la atención por la falta de recomendaciones sobre el manejo de la situación en caso de un brote y el seguimiento de un deportista cuando se sospecha sobre infección por covid-19.