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Luis Rubiales agacha la cabeza ante la Fifa: dan a conocer su sucesor en España
El directivo fue notificado oficialmente de la sanción por parte de la entidad que rige al fútbol mundial.
La Fifa le puso freno de manos a Luis Rubiales, quien había decidido no dimitir de su cargo como presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), pese a la presión por su polémico beso a la futbolista Jenni Hermoso.
“El presidente de la Comisión Disciplinaria de la Fifa, Jorge Iván Palacio (Colombia), en uso de las facultades otorgadas por el artículo 51 del Código Disciplinario de la Fifa (CDF), ha acordado en el día de hoy la suspensión provisional del Sr. Luis Rubiales de toda actividad relacionada con el fútbol a nivel nacional e internacional”, indicó la entidad que rige al mundo del fútbol.
La sanción será por 90 días, mientras se tramita el procedimiento disciplinario abierto por la Comisión contra Rubiales.
La RFEF confirmó reemplazo de Rubiales
A la información de la Fifa la RFEF respondió con un comunicado, donde confirmaban la notificación.
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“La RFEF comunica que, en la mañana de hoy, ha recibido la notificación de la Comisión Disciplinaria de Fifa de suspensión provisional del Sr. Presidente, Luis Rubiales Béjar, mientras se tramita el expediente disciplinario”, se puede leer en la misiva.
Además, la federación informa que el Vicepresidente adjunto a la Presidencia, Pedro Rocha Junco, asume la presidencia interina durante este periodo.
Rocha, de 69 años, fue jugador de fútbol sala y es vice de la RFEF desde 2018. Según Marca, “hablan de él como de un dirigente de buen talante, dialogante y sin excesiva cuota de protagonismo”.
Por otra parte, el medio destacó que es “cercano a Luis Rubiales, el extremeño ha sido uno de los principales puntos de apoyo del ya expresidente, en especial en la campaña electoral y en sus primeros meses al frente del fútbol español. Empresario desde 1993, es administrador de tres establecimientos de su propiedad”.
Por otra parte, la RFEF acotó en el comunicado que “Luis Rubiales ha manifestado que se defenderá legalmente en los órganos competentes, confía plenamente en las instancias de la Fifa y reitera que, de esta manera, se le da la oportunidad de comenzar su defensa para que prevalezca la verdad y se demuestre su completa inocencia”.
Rubiales no puede entablar contacto con Jenni Hermoso
Después de los hechos acontecidos entre el directivo y la futbolista Jenni Hermoso, la Fifa ordenó que el sancionado presidente no se pueda comunicar con la futbolista del Pachuca mexicano y actual campeona del mundo con España.
“Asimismo, el presidente de la Comisión Disciplinaria de la Fifa al objeto de preservar, entre otros factores, los derechos fundamentales de la jugadora de la selección nacional de fútbol Sra. Jennifer Hermoso y el buen orden del procedimiento disciplinario que se encuentre en tramitación ante este órgano disciplinario, ha dictado dos directivas adicionales (artículo 7 CDF) mediante las cuales ordena al Sr. Luis Rubiales que se abstenga, mediante el mismo o terceros, de contactar o intentar contactar con la jugadora profesional de la selección nacional española Sra. Jennifer Hermoso o a su entorno cercano. Igualmente se ordena a la RFEF y a sus oficiales o empleados, de manera directa o a través de terceros, abstenerse de contactar a la jugadora profesional de la selección nacional española Sra. Jennifer Hermoso o a su entorno cercano”, sentenció la Comisión Disciplinaria.
Cabe destacar que la jugadora desmintió en un comunicado la versión de Rubiales, quien había señalado que el beso había sido consensuado.
“Quiero aclarar que tal y como se vio en las imágenes, en ningún momento consentí el beso que me propinó y, por supuesto, en ningún caso busqué alzar al presidente”, señaló Hermoso en el comunicado de FUTPRO, que es la Agencia de Futbolistas Profesionales.
Además, Hermoso expuso que “las palabras del Sr. Luis Rubiales explicando el desafortunado incidente son categóricamente falsas y parte de la cultura manipuladora que él mismo ha generado (...) En ningún momento se produjo la conversación a la que hace referencia y que, ni mucho menos, su beso fue consentido”.