¿Por qué Luis Suárez no controla sus impulsos?

Esta Copa del Mundo 2014 ha estado llena de sorpresas. Desde las protestas en las calles de Brasil contra los gastos del gobierno para los preparativos, la temprana eliminación del anterior campeón del mundo y la destacada participación de la Selección colombiana.

Pero la que ha causado más polémica en los últimos días es la dura sanción al delantero Luis Suárez quien, durante el partido contra Italia el pasado 25 de junio, habría mordido en el hombro al defensa Giorgio Chiellini. El uruguayo ya es famoso por esta conducta; incluso un hincha noruego ganó casi US$1.000 luego de apostar que Suárez mordería a un jugador italiano.

Juan Carlos Rojas, médico psiquiatra y expresidente de la Sociedad Colombiana de Psiquiatría, asegura que el futbolista tiene dificultades para controlar sus impulsos y que esto se ve reforzado por la posición en la que juega, en la que cierto grado de agresividad es necesario.

Otro factor que puede influir en este comportamiento, explica el médico, es el ascenso rápido a la fama y la carencia de la madurez mental para afrontarlo.

Por otro lado, el apoyo de compañeros y directivos puede contribuir a que Suárez no considere necesario reprimir su conducta. El ascenso rápido a la fama y la falta de madurez mental pueden hacer que Suárez no sea capaz de contener emociones como la ira o la frustración.

Es la tercera vez que el jugador comete este mismo tipo de imprudencia. La primera fue cuando jugaba en el Ajax de Holanda en el 2010, cuando mordió en el hombro a Otman Bakkal, del PSV Eindhoven. En esa ocasión, fue suspendido por siete fechas:

Cuando jugaba para el Liverpool el año pasado, fue suspendido por 10 juegos tras morder en el brazo a Branislov Ivanovic del Chelsea:

Ahora, uno de los cinco mejores jugadores del mundo fue suspendido por la FIFA durante nueve fechas y se le prohibió entrar a los estadios en cualquier partido del Mundial por cuatro meses:

Rojas recuerda que, además de estos eventos, el delantero ha sido suspendido y multado por otras conductas reprobables, como los comentarios racistas contra Patrick Evra durante un partido contra el Manchester United. “Te pego, porque eres negro”, le habría dicho.

El psiquiatra asegura que morder a otros, frecuente en los niños, persiste en Suárez por dificultades en las etapas de la infancia en las que se presenta esta conducta, ya que no puede contenerse incluso ante millones de espectadores y con todas las cámaras sobre él.

Rojas coincide con Eva Kimonis, profesora de la Escuela de Psicología de la Universidad de Nueva Gales del Sur, en Australia, quien le dijo a Reuters que, por lo que se ve en el video, "Suárez desquitó su frustración y su enojo en Chiellini porque le bloqueó el acceso a la pelota, mordiéndolo de forma reactiva e impulsiva".

Todas las opiniones han confluido en que la conducta de Suárez requiere algún tipo de intervención ya que es un comportamiento que data de largo tiempo y le ha significado sanciones y multas. Una de las opciones de tratamiento para Suárez sería la terapia cognitiva conductual, que “puede ser efectiva para ayudar a la persona a identificar mejor los momentos en los que está en un estado de ira o frustración”, explicó Kimonis.

Sin embargo, no ayuda que sus compañeros y directivas no solo toleren estas acciones sino que, en cierta forma, las minimicen.

Por ejemplo, el presidente uruguayo, José Mujica, apoyó a su compatriota cuando dijo: “Yo no vi que haya mordido a nadie ¡Pero se pegan cada patada y cada hachazo! No lo elegimos para filósofo, ni para mecánico, ni para que tenga buenos modales; es un excelente jugador", y agregó que claramente hay una campaña en su contra porque "no le perdonan los defectos que tiene".

Por otro lado, el capitán uruguayo, Diego Lugano, y el entrenador de la selección, Óscar Tabárez, hablaron a favor del delantero. "Este es un Mundial de Fútbol, no de moralidad barata", dijo Tabárez en una conferencia de prensa y agregó que al jugador se le persigue por hechos anteriores.

Y el deportista de 27 años también parece restarle importancia a la situación. Aunque admitió que sí tuvo contacto con el italiano, solo dijo que "son cosas que pasan en el área".