Las más virtuosas del tenis se enfrentarán en Bogotá

La primera imagen que se llevó María Sharapova a su llegada a Bogotá fue el alto tráfico de la capital. Así lo comprobó en su tránsito del aeropuerto a las instalaciones del periódico El Tiempo, donde un enjambre de periodistas la esperaban en una sala junto a la serbia Ana Ivanovic, también exnúmero uno de la WTA y al igual que la rusa una de las mujeres más bellas del circuito internacional. 

“Por esa razón empezamos a tocarlas a ellas; bueno, no a tocarlas a ellas, empezamos a tocar las puertas de ellas”, precisó en su intervención con algunas risas de por medio Jan Fontalvo, representante de Producciones Grand Slam, quien no dudó en agradecer el apoyo de Max Eisenbud, el agente de María desde que esta a sus 17 años consiguió su primer Grand Slam en Wimbledon y saltó a la fama mundial. 

“Creo que tienes más oportunidades de estar en el top ten que tal vez años atrás cuando yo empecé. Es normal que el tenis crezca y cambie (el ranking) cada año en diferentes direcciones”, afirmó Sharapova frente a la pregunta sobre los cambios constantes en el escalafón de las mujeres, a diferencia de la competencia masculina, algo a lo que ya había respondido unos meses atrás en una entrevista para CNN.

En ese momento agregó: “si se le compara con el de los varones (es una dura comparación definitivamente), yo diría que la calidad del tenis, si has visto mis partidos quizá hace cuatro o cinco años yo entraba en el torneo y llegaba un par de días antes para tratar las primeras rondas como mis días de práctica. Ahora eso no ocurre”.

Desde aquel encuentro de 2004 ante la doble ganadora del abierto británico, Serena Williams, la organización de los cuatro torneos mayores del circuito internacional de tenis se acostumbró a las eufóricas celebraciones de María, quien luego de dejar su raqueta a un lado saltaba y corría hacia el puesto en las graderías donde se ubicaba su padre Yuri Sharapov.

"El tenis es lo más importante de mi vida, es la profesión que me ha dado todo, la razón por la que estoy aquí hoy, y por lo que espero que mañana junto con Ana, nos miren más allá de como mujeres, como tenistas profesionales, que es lo que somos y por lo que esperamos ser respetadas", dijo Sharapova, vestida más ejecutiva con su abrigo negro y una camisa de rayas, mientras Ivanovic lucía una chaqueta deportiva.  

"Mi determinación y objetivo siempre fue ser la número uno del mundo, y esa determinación fue la que me llevó a estar en lo más alto, y también es el motivo por el que estoy hoy acá, y por el que soy profesional, en eso siempre estoy enfocada", afirmó por su parte Ana Ivanovic.

Ambas jugarán este viernes a las 6:30 p.m. un partido de exhibición en el coliseo El Campín.