Las llamativas imágenes de Emmanuel Macron celebrando la victoria de Francia y otros momentos de la final

Fue un encuentro lleno de emociones. Y ello se reflejó en los líderes políticos de los países que se disputaban la final del Mundial en Rusia: Francia y Croacia.

El presidente francés, Emmanuel Macron, estalló de alegría cuando Les Bleus se llevaron el triunfo en un 4-2 frente a los croatas y derrochó sonrisas y muestras de cariño a su equipo.

_{FOTO: GETTY IMAGES - BBC}

Macron bajó al terreno de juego para la entrega de la Copa Mundial y no pareció importarle mucho la lluvia que cayó sobre el estadio Luzhniki de Moscú.

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Cuando pasó con la Copa el delantero Kylian Mbappé, una de las figuras más destacadas de este torneo, Macron no dudó en abrazarle.

E incluso besarle.

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Su competidora en el terreno de juego, la presidenta de Croacia, Kolinda Grabar-Kitarovic, tampoco ocultó sus emociones.

Desde el palco, se le pudo ver nerviosa y extremadamente atenta a los movimientos de sus jugadores, celebrando cada avance.

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Pese a que no consiguieron la copa, la derrota no le borró la sonrisa.

Uno de los momentos más emotivos ocurrió durante la entrega de las medallas, cuando Kolinda Grabar-Kitarovic se abrazó con Luka Modric, nombrado el mejor jugador de este Mundial.

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Además de las celebraciones y del juego, también se pudo ver una escena inesperada este último día de Rusia 2018: la protesta del grupo punk Pussy Riot, que acaparó durante unos segundos la atención del mundo entero para protestarcontra el Kremlin.

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Tres jóvenes mujeres y un hombre irrumpieron en la segunda parte del partido y corrieron unos 50 metros por el campo.

Incluso llegaron a saludar a alguno de los deportistas, si bien algunos de ellos no se lo tomaron a bien, dada la tensión del momento.

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Las autoridades rusas les detuvieron y el juego se resumió a los pocos minutos para acabar dando la victoria a los galos.

Francia acabó alzando su segunda Copa del Mundo en un ambiente festivo, 20 años después de ganar su primera estrella.

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La alegría de los franceses llegó a los emblemáticos Campos Elíseos de París.

Allí, una gran marea de gente alzó la bandera nacional para celebrar el triunfo de su selección.

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