CICLISMO
Nairo Quintana: el escándalo que permitiría su participación en el Giro de Italia
El ciclista colombiano revive sus esperanzas de participar en la ronda italiana, que era el gran objetivo de su temporada.
Nairo Quintana recibió un duro golpe cuando se conoció que el Giro de Italia no iba a invitar al equipo Arkéa Samsik para la edición de la carrera en este 2021, en la que aspiraba competir y repetir su título conseguido en el año 2015.
“Me hubiera gustado participar en el Giro si nuestro equipo hubiera sido invitado, pero respeto la decisión de los organizadores; me enfocaré en otras grandes carreras, incluido, por supuesto, el Tour de Francia”, dijo Nairo en un comunicado.
La historia podría haber dado un giro importante a favor del boyacense debido a que el equipo Vini Zabuk podría perder su invitación para la carrera después de dos casos de dopaje en menos de un año.
El ciclista italiano Matteo De Bonis, del equipo italiano de segunda división, dio positivo por EPO y corre el riesgo de ser suspendido, anunció este martes la Unión Ciclista Internacional (UCI).
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De Bonis (25 años), un anónimo del pelotón cuya última carrera se remonta a mediados de septiembre, fue controlado fuera de competición el 16 de febrero pasado.
El italiano, que fue suspendido a título provisional, es el segundo corredor de su formación en encontrarse en esta situación, tras su compatriota Matteo Spreafico, positivo en dos ocasiones, en octubre de 2020 en el Giro.
El equipo Vini Zabu, que depende de invitaciones para participar en las pruebas del calendario WorldTour, fue invitado para el próximo Giro de Italia (8 al 30 de mayo).
Pero, con dos casos positivos en doce meses, se arriesga a una suspensión de una duración de 15 a 45 días, siguiendo el reglamento antidopaje.
“La UCI llevará el caso a la comisión disciplinaria, que tomará una decisión”, precisó la federación internacional.
En caso de un fallo contra el conjunto italiano, el equipo de Nairo podría aspirar a ocupar su lugar en el pelotón de la ronda itálica. El terreno de esta carrera se adapta mucho mejor al colombiano que como plan B debió establecer como principal meta en la temporada el Tour de Francia.
“Estamos a la espera de que nos den el sí, esperamos poderlo tener porque es una carrera que me ha gustado mucho. La he hecho dos veces, una vez fui primero, la otra vez segundo, es una carrera bastante favorable para mí”, había señalado Nairo sobre una posible invitación.
Antes de la decisión se rumoraba que el equipo Bardiani y el Vini Zabu ya tenían invitación asegurada, lo que dejaba al Androni y al Arkéa como los aspirantes principales al último, pero el elegido fue el Eolo Kometa, un equipo Pro-Continental que llevaba siete años de creado y fue el que se quedó con uno de los últimos cupos a la prueba.
Nairo también tenía planeado estar en la prueba de ciclismo de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, una competencia en la que no ha estado y tiene mucha ilusión de incursionar.
El ciclista cerró su participación en la Vuelta a Cataluña culminando en la posición 14 de la clasificación general y estuvo lejos del objetivo de pelear por el podio, pero culminar el recorrido ya fue una ganancia teniendo en cuenta la enfermedad con la que la afrontó.
El colombiano debió disputar la prueba con una gripa producto del intenso frío en el Tirreno Adriático y no pudo rendir al máximo por sus problemas de salud. Sin embargo, le alcanzó para terminar entre los 15 mejores.
El boyacense recibió un reconocimiento por su esfuerzo tras el cierre de la última etapa y se llevó una ovación de un grupo de colombianos y seguidores que agradecieron su aparición con el coro: “¡Nairo! ¡Nairo!”.
