DEPORTES

NBA pospone juegos de playoffs tras boicot de equipos por caso Jacob Blake

Jugadores de los Milwaukee Bucks fueron los primeros en negarse a jugar este miércoles en protesta contra la brutalidad policial y el caso del afroamericano Jacob Blake.

26 de agosto de 2020
Los Milwaukee Bucks no salieron hoy a jugar su partido en la burbuja de la NBA en Orlando. | Foto: Kevin C. Cox / AP

Este miércoles fue suspendida la jornada de playoffs de la NBA luego de que jugadores de Milwaukee Bucks y otros equipos con partidos programados para este 26 de agosto, como Toronto Raptors y Los Angeles Lakers, se negaran a jugar en protesta por el asesinato del afroamericano Jacob Blake, en un capítulo más del apoyo del baloncesto estadounidense a las protestas contra la violencia policial y el racismo, causas agrupadas bajo el lema Black Lives Matter.

La NBA y la Asociación de Jugadores "anunciaron que a la luz de la decisión de los Milwaukee Bucks de no pisar la cancha hoy para el quinto partido contra los Orlando Magic, los tres partidos de hoy (...) han sido pospuestos", dijo la liga en un comunicado.

Además del partido entre los Bucks de Giannis Antetokounmpo y los Orlando Magic, también se aplazaron los partidos de primera ronda de playoffs entre los Houston Rockets y los Oklahoma City Thunder y entre Los Angeles Lakers y los Portland Trail Blazers.

"El quinto partido de cada serie será reprogramado", se limitó a agregar la NBA, sin precisar si estas negativas a jugar tendrán alguna consecuencia para los equipos.

Los jugadores de los Magic, que van en desventaja 3-1 en la serie contra los Bucks, querían jugar el partido, según Shams Charania, del medio digital "The Athletic".

La indignación se desencadenó el lunes en Disney World, sede única del final de temporada de la NBA, con la difusión del video de un nuevo abuso policial contra un hombre afroestadounidense.

Blake fue perseguido por dos policías de Kenosha (Wisconsin) que lo balearon a quemarropa cuando entraba a su auto ante la mirada de sus tres hijos.

"Exigimos cambio. Estamos hartos de esto", escribió en Twitter LeBron James, la estrella de Los Angeles Lakers, tras el plantón de los Bucks.

Bajo el clima de indignación nacional por el crimen hace tres meses del también afroestadounidense George Floyd por un policía blanco, los jugadores pactaron con la NBA que el final de temporada en la sede "burbuja" de Disney World se dedicara a la reivindicación de la igualdad racial y a exigir el fin de la brutalidad policial contra la población negra.

En las últimas horas, algunos jugadores, como Pascal Siakam, señalaron que están frustrados con la falta de resultados que perciben de sus gestos diarios de protesta en Disney World.

Jugadores de la NBA convocaron a una reunión en la noche del miércoles en Disney World "para determinar los próximos pasos", avanzó Charania.

El movimiento Black Lives Matter en la NBA

Tras cuatro meses de suspensión por el coronavirus, la NBA reinició su temporada el pasado 30 de julio con un potente mensaje contra el racismo por parte de sus jugadores y entrenadores, que desde entonces se han arrodillado varias veces durante el himno estadounidense al inicio de cada partido.

En protestas hasta ahora insólitas en la NBA, estrellas como LeBron James, Kahwi Leonard y más, han formado una sola fila en la que se mezclan compañeros y rivales.

La idea de las protestas es apoyar el movimiento Black Lives Matter mientras continuaba la temporada, pero han surgido críticas de otros jugadores que se negaron a viajar a Orlando y retomar los juegos, en medio de la oleada de manifestaciones en varias ciudades de EE. UU.

Como parte de las protestas, los jugadores también han portado camisetas negras con el lema "Black Lives Matter" (La vida de las personas negras importa), mensaje grabado en el centro de las tres canchas del complejo deportivo de Disney World donde se juega a puerta cerrada hasta las finales de octubre.

La liga y los jugadores se comprometieron a que este final de temporada, a pesar de las condiciones de aislamiento en Disney World, sea un altavoz de las actuales protestas contra el racismo desencadenadas por el crimen del afroamericano George Floyd a manos de un policía blanco tres meses atrás.

El gesto de hincar la rodilla se ha convertido en uno de los símbolos de las masivas manifestaciones por la igualdad racial y el fin de la brutalidad policial que han tenido lugar en Estados Unidos y otros países durante los últimos meses.

Este tipo de protesta fue popularizado en 2016 por el jugador de fútbol americano Colin Kaepernick, quien fue en su momento objeto de duras críticas, entre ellas del presidente Donald Trump, y nunca volvió a ser contratado por ningún equipo de la NFL.

Entre otras acciones, los jugadores también han saltado a la pista cambiando sus nombres de las camisetas por mensajes como "Equality" (Igualdad) o "Justice Now" (Justicia Ahora).

Además, varios jugadores de la NBA han dedicado sus comparecencias de prensa en la burbuja de Orlando a exigir estos arrestos.

Con información de la AFP.