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“No me arrepiento”, René Higuita habla en SEMANA de su nuevo documental, su relación con Escobar, el paso por la cárcel y su inconveniente con César A. Londoño
El camino del escorpión es el documental con la historia completa de uno de los arqueros más icónicos y polémicos de la selección Colombia. A partir del 2 de noviembre en Netflix los seguidores de la estrella deportiva podrán revivir junto a él sus mejores jugadas dentro y fuera del campo.
Durante 1 hora y 30 minutos, Netflix presentará la vida de René Higuita, el icónico portero de la selección Colombia de los años 90. Un documental en el que hablará por primera vez de sus humildes orígenes, su amistad con Pablo Escobar y su encarcelamiento por mediar en la liberación de una niña secuestrada.
SEMANA. Hablemos de esta serie en Netflix. ¿Qué siente de contar su vida en una plataforma tan importante como Netflix?
René Higuita (R.H.).: Me siento feliz con ganas de decir que casi realizado, pero mientras tengamos vida, yo creo que vienen cosas más importantes.
SEMANA. ¿Qué detalles inéditos de su vida vamos a encontrar?
SEMANA. ¿Qué tan importante es contarle a las nuevas generaciones que usted es un guardameta revolucionario en la historia del fútbol?
(R.H.).: Bueno, no solamente en el documental se habla de fútbol. Ya a la edad que uno tiene yo creo que le agradece al fútbol para poder aportar un granito de arena a la sociedad como ser humano.
SEMANA. ¿Cuál es el capítulo más importante de su carrera futbolística que vamos a ver en Netflix?
SEMANA. ¿Cuál es el capítulo más importante de su carrera futbolística que vamos a ver?
(R.H.).: Es que para llegar a lo deportivo hay que pasar primero una cantidad de cosas, desde el barrio y es decirles que todos tienen la posibilidad de llegar, o sea, poner ese pensamiento es lo que se quiere y eso es parte de lo que se va a presentar ahí también en Netflix. Que todos podemos llegar a lograr lo que queremos y que hay que tener las condiciones, que si no se tienen, pues replantearse. Yo quería ser médico, pero no me daba. Yo quería ser un gran veterinario, pero no me daba. Mi Diosito siempre a todos nos da algo y hay que descifrar qué es. Con base a eso ponerle ese cariño y ese amor y empezar a vivir.
SEMANA. El documental también habla de su relación con Pablo Escobar y su paso por la cárcel. ¿Qué podemos destacar de esta etapa para antojar al televidente?
(R.H.).: Es la amistad, que en un momento determinado se habla de una amistad de Pablo. Una amistad que me hizo practicamente la justicia y yo la agarro para dejar ese legado de los amigos, de la amistad que siempre hay que reconocerlo. Cuando uno se equivoca, entonces uno tiene que pagar por sus acciones o buenas o malas. Pero el amigo siempre tiene que estar ahí. En ese momento, Pablo pagó por lo que él había hecho con la vida. Pero nosotros como amigos y cuando el amigo le llega a uno con ese amor, con ese cariño, entonces uno no lo puede negar. Ahora qué voy a negarlo después de que ya me hicieron una amistad. Entonces hoy puede ser la mejor amistad para rescatar y que la amistad no se puede negar. Como seres humanos no lo podemos juzgar, la justicia se encargó de juzgarlo por los actos que no estuvieron bien hechos. Si me equivoqué porque estuve en la intermediación, porque para mí era salvar una vida, pues hombre, lo siento. No retaría a la justicia que lo volvería a hacer, pero si la justicia que es la indicada me dice “René, lo necesitamos para que intermedie”, por supuesto que lo voy a ir. En ese caso la familia me pidió el favor.
SEMANA. ¿Se arrepiente de haberle pegado a César Augusto Londoño?
SEMANA.: ¿Qué calificativo le da a su vida? ¿gloriosa? ¿polémica?
(R.H.).: Pues yo pienso que es una vida a la que estamos expuestos todos los que tenemos un nombre. Todos los que somos personajes públicos, estamos expuestos, a que seamos todo lo que dice la demás gente.