“Dimayor tergiversa y modifica el reglamento del torneo”: Eduardo Pimentel

En toda una novela se ha convertido el ascenso del fútbol colombiano. La interpretación de una norma que se incluyó en este año ha generado una polémica entre Eduardo Pimentel y la Dimayor, en cabeza de su presidente, José Fernando Perdomo.

Todo empezó luego de la temporada 2016 en la que Deportivo Pereira hizo un gran campeonato pero no pudo lograr su ascenso en las fases finales del torneo lo que llevó a los dueños de los clubes a cuestionar si el sistema era justo y  el mejor de la reclasificación merecía alguna recompensa como sucede en la A, en la que el equipo que más puntos suma en el año tiene un cupo a la Copa Libertadores.

Entonces, la Asamblea general de la Dimayor determinó cambiar el sistema del ascenso con la idea de premiar al equipo que tuviera mejor desempeño a lo largo de los dos campeonatos del año y de esta manera recompensar al club que más puntos sumara a lo largo del año.

Lo que se estableció fue que iba a haber dos campeones de los torneos de cada semestre. Estos equipos se iban a enfrentar en un final de ida y vuelta para determinar el campeón de la B y el primer ascendido. El perdedor de esta serie luego se mediría, también en juegos de ida y vuelta, con el mejor de la reclasificación para determinar el segundo equipo que sube a la A.

Sin embargo se hace la salvedad que si el equipo que pierde la gran final del Torneo Águila es el primero en reclasificación este automáticamente logra su lugar en la primera división.

En el reglamento del campeonato esto quedo definido de la siguiente manera: “En caso que el club que pierda la gran final del Torneo Águila 2017 sea el mismo club que tiene mayor puntuación en la tabla de reclasificación del año, ascenderá directamente para participar en la primera categoría”.

De acuerdo a esto, Leones de Itagüí ya tiene su lugar en la A, teniendo en cuenta que fue el campeón del segundo semestre por lo que está disputando la final del Torneo y es el primero de la reclasificación. El quinto equipo de Antioquia en la primera división junto a Alético Nacional, Independiente Medellín, Envigado y Rionegro Águilas.

Entonces, la polémica surge por cuenta del Boyacá Chicó, que fue el campeón del primer semestre. De acuerdo al presidente del club, Eduardo Pimentel, ellos también tienen su ascenso asegurado pues en caso de que pierdan con Leones el siguiente duelo sobraría.

Según su interpretación “en ningún aparte del reglamente, se establece o dispone que se deba disputar un repechaje contra el segundo de la reclasificación” por lo que ellos también tendrían su ascenso asegurado.

El presidente del club llegó al punto de amenazar con no presentarse a estos partidos, sin embargo en una misiva dirigida a la Dimayor y a la opinión pública se echó para atrás y confirmó que iba a disputar los juegos que sean programados oficialmente.

Sin embargo reclama por su “ascenso directo” y deja claro que de no ser atendida su solicitud estarían dispuestos a acudir “a todas las instancias legales nacionales e internacionales (tribunales, comisiones, FIFA y TAS) con el fin de defender nuestros derechos adquiridos como campeones del primer Torneo de 2’17.”

En un comunicado publicado el pasado 25 de noviembre, la Dimayor esclareció cómo se iba a definir la cuestión y dejo claro que el derecho del mejor en la reclasificación se le cedía al segundo en esta tabla.

“Si el mismo equipo que gane la Gran Final del Torneo Águila 2017 es el mismo club que obtuvo la mejor posición en la Tabla de Reclasificación, el derecho a disputar el repechaje con el club que perdió la Gran Final, se traslada al club que haya ocupado el Segundo puesto en la Tabla de Reclasificación”, aclara el ente que dirige el fútbol profesional en Colombia.

De acuerdo a esto si Leones llega a ser campeón, Chicó deberá enfrentarse con el segundo de la reclasificación que es el Cúcuta Deportivo, equipo que no ha parado de entrenar y está a la espera de la definición de esta final.

Para Pimentel, este comunicado violó el debido proceso y el principio de legalidad pues el único órgano oficial que puede establecer las reglas del campeonato es la “Asamblea de Clubes”. En un trino desde su cuenta personal de Twitter llegó a preguntar si este era un caso de prevaricato.

Ahora lo único que queda es esperar cuál es el ganador de la final entre Chicó y Leones y si el resultado es favorable para los antioqueños esperar para conocer cuáles son las posibles acciones del club boyacense ante la justicia deportiva.

El primer partido de la final de la B entre Leones y Chicó terminó con empate 0 a 0 en el Estadio La Independencia. La vuelta será el próximo miércoles 6 de diciembre en el Estadio Metropolitano de Itagüí. 

El 12 de diciembre habrá una Asamblea extraordinaria de la Dimayor en la que es muy posible que se trate el tema y en la que podrían presentarse acalorados enfrentamientos a causa de esta confusa polémica.