“Quería golpearlo”: la insólita anécdota de André Onana con Dávinson Sánchez en el Ajax

Dávinson Sánchez le guarda un cariño especial a su paso por el Ajax de Ámsterdam, donde empezó a abrirse camino en Europa tras deslumbrar a Sudamérica en la Copa Libertadores que consiguió con la camiseta de Atlético Nacional. Aunque el defensor apenas duró dos años en el conjunto neerlandés, son gratos los recuerdos que dejó entre varios de sus compañeros, como el portero André Onana.

“Antes de la temporada 2016-17 hablé con el nuevo entrenador, Peter Bosz, y me dijo que era demasiado joven. Me dijo: ´Mira todos los mejores clubes de Europa y dime cuál tiene un portero de 20 años´”, relata el camerunés en una sincera charla con The Players Tribune.

El arquero contó los detalles de su camino hasta ser el portero titular del Ajax. “Después de eso, estaba tan descontento que traté de buscar un club para llevarme a préstamo, pero nadie estaba interesado. Unos meses más tarde, después de que Jasper Cillessen se fuera, el entrenador finalmente me dijo: ´Está bien. Tienes un mes para impresionarme. Durante tres partidos, eres mi número 1´″, recordó.

“Estaba tan nervioso y al final perdimos el primer juego 2-1 ante Willem II. Aún así, tenía dos juegos más para impresionar. Justo en el inicio del siguiente partido ante Go Ahead Eagles, Dávinson Sánchez regaló un penalti”, agrega Onana.

El portero recuerda que en ese momento “pude ver que mi oportunidad se me escapaba. Y estaba furioso con Sánchez. Me perdí. Quería golpearlo en medio del partido”.

“¡¿Por qué has hecho eso?! Amigo, nunca tendré otra oportunidad. ¡Me van a matar!”, dijo el camerunés al colombiano, aunque después salvó el penalti. “Gracias a esos tres juegos me convertí en el titular durante cinco temporadas. Gané trofeos, me convertí en uno de los mejores porteros de Europa”, añadió.

Onana llegó a ser uno de los jugadores más codiciados en el viejo continente tras la temporada 2018/19 en la que el Ajax llegó a semifinales de Champions League con el equipo comandado por Frenkie de Jong y Mathijs de Ligt. Desafortunadamente, el camerunés fue sancionado por ingerir sustancias prohibidas, error involuntario por tomarse un medicamento de su esposa.

“La sanción significaba que no podía ir a los partidos, no podía entrenar con el equipo, no podía asistir a la celebración por el título al final de la temporada, aunque había jugado el 60 % del campeonato. Me sentía aislado”, relata el guardameta. “Lo entiendo. La ley es la ley, ¿verdad? Si te jodes, pagas el precio. Y pagué”, lanzó.

El camerunés apunta que “la gente a mi alrededor cambió. La gente que reía dejó de reír, dejó de sonreír. Algunas personas desaparecieron por completo. Había personas que esperaba que se comunicaran conmigo y que no lo hicieron. Aprendí de eso. Empecé a ver el mundo con más claridad”.

“En el verano, cuando el Tribunal de Arbitraje Deportivo redujo la prohibición de 12 meses a nueve, ¡celebré como si hubiera ganado la Liga de Campeones!”, cuenta el portero que en noviembre pudo volver a las canchas con el Ajax.

“Aprendí que los buenos jugadores no siempre consiguen lo que quieren, pero los mejores, los mejores jugadores, siempre logran aparecer en los momentos más importantes. ¿Por qué? Porque ningún obstáculo les impedirá estar ahí. Todo el mundo recibe golpes. Todo el mundo cae. Lo que aprendí este año más que nada es que no se trata de eso. Se trata de cómo te levantas”, remarcó.

Onana termina contrato con el conjunto neerlandés en junio del próximo año y no tiene pensado renovar, razón por la cual ha empezado a sonar para equipos como Arsenal, Inter y Barcelona que estuvieron pendientes durante la sanción que le impidió defender los tres palos en el Ámsterdam Arena.