Rescate en las alturas: Médico salvó a turista que sufrió infarto en medio de fuertes turbulencias

Momentos de pánico se vivieron en pleno vuelo cuando un hombre empezó a sentirse mal. La emergencia en las alturas tuvo lugar mientras que ese viernes 9 de diciembre se medían en las canchas los equipos de Países Bajos y Argentina, siendo este último el que se llevó la victoria en penales.

Un médico, literalmente, “se puso la 10″, al conseguir estabilizar al viajero chileno quien, en pleno vuelo de Buenos Aires a la ciudad de Posadas se desestabilizó, mientras el desconcierto “reinaba” entre los demás pasajeros.

El especialista, quien portaba una camiseta de la albiceleste con el número 10, acudió al llamado de cabina.

Angustia a 10.000 pies de altura

“Un médico, por favor” fue el llamado que encendió las alarmas, cuando la aeronave atravesaba turbulencias. Lejos de esperar a que el avión aterrizara de emergencia, el médico comunicó que podía ayudar y, de inmediato, se dispuso a dar asistencia.

Al paciente, de unos 65 años, se le aplicó suero a la vez que se logró estabilizarlo, a pesar de estar a 10.000 pies de altura. Una vez se evitó que el cuadro del chileno se complicara, los demás pasajeros no dudaron en aplaudir el galeno (quien reserva su identidad porque, según él, “cualquier colega haría lo mismo”), recogió Primera Edición.

“Despegamos con lluvia y después sufrimos turbulencias, todos los pasajeros estaban muy nerviosos y al borde del pánico. Una persona corrió para pedir ayuda porque este hombre estaba descompensado y, lo peor, fue el protocolo, que requiere que nadie se saque el cinturón hasta que se estabilice la aeronave (...) Eso generó aún más angustia porque no podíamos asistirlo”, dijo el médico, según lo recopilado por ese mismo medio.

“Momentos de mucha angustia”

“Fueron momentos de mucha angustia porque sabíamos que un pasajero estaba con algún problema, pero no podíamos hacer nada porque las turbulencias eran muy severas. Hubo escenas de pánico y mucha angustia”, agregó. De acuerdo con su relato, el piloto aseguró que estaba dispuesto a hacer un aterrizaje de emergencia en Resistencia o Rosario.

No obstante, esa medida no fue necesaria, ya que se retomó el control de la situación a tiempo, a pesar de los contratiempos y la zozobra del momento. “Gracias a que el avión contaba con todas las herramientas, procedí a hacerle una vía porque el paciente saturaba al 78 %. Se le dio oxígeno y lo medicamos con unas drogas específicas para estos cuadros de infarto y paulatinamente fue remitiendo el dolor de pecho y estabilizándose”, añadió el especialista a Primera Edición.

La emergencia tuvo lugar en un trayecto de Aerolíneas Argentinas, de la que el experto sanitario resaltó el compromiso y manejo que ese personal tuvo frente a la inesperada situación. Según él, ellos lograron mantener la calma “en todo momento” y le colaboraron con los implementos de los que disponían para ese caso. “Todo estaba muy completo”, comentó.

Luego de aquel viaje diferente, el galeno se dispuso a retomar sus actividades cotidianas que incluían recibir turno en una unidad intensiva en la ciudad de Posadas. Su actuar no tardó en llegar a oídos de familiares y allegados: “Mis amigos y conocidos se enteraron por las redes de lo sucedido y empezaron a llamarme, pero solo hice algo para lo que estoy entrenado”, concluyó.