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Dibu Martínez celebrando junto a Leandro Paredes en la ronda de penales de la final del Mundial Qatar 2022. REUTERS/Paul Childs | Foto: REUTERS

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“Se cag... todo”: Dibu Martínez, inclemente ante jugador de Francia en la ronda de penales en la final del Mundial

El arquero de Argentina confesó a la fanaticada de Mar de Plata la estrategia que utilizó para conseguir el título.

23 de diciembre de 2022

Además de Lionel Messi, uno de los campeones del Mundial que más se ha robado la atención es Emiliano ‘Dibu’ Martínez, pero no solo por sus atajadas durante el certamen, sino por sus gestos obscenos una vez la albiceleste venció a Francia y por burlarse de Kylian Mbappé mientras celebraba con la hinchada en Argentina.

Este 22 de diciembre, Dibu volvió a referirse a la ronda de penales en la final, en la que atajó un disparo e intimidó a uno de sus rivales para que errara el otro. Lo hizo durante el homenaje en Mar de Plata, de donde es oriundo, ante miles de aficionados.

De acuerdo con él, que arrojara el balón lejos del punto penal cuando Aurélien Tchouaméni se acercaba a disparar, no fue gratuito. Todo estuvo planeado. “Cuando atajo el primer tiro sabía que el otro chico iba a estar muy nervioso. La traté de jugar mentalmente, tirando la pelota lejos, hablándole y la tiró fuera. Se cagó todo”, confesó a la multitud.

Acerca de la final del máximo certamen del balompié, añadió: “Fue increíble porque veníamos 70 minutos controlando el partido. Creo que fue uno de los partidos que mejor jugamos. Ellos se agrandaron y tuvieron chance de ganarlo, pero hasta que la pelota no entre, no hay que festejar”.

Pese a que su estrategia no es nueva, pues desde la Copa América demostró su eficacia intimidando a los rivales, continúa suscitando polémica: para algunos lo que Dibu hace es antideportivo. Sin embargo, a él lo tiene sin cuidado, lo dejó en evidencia ante su gente.

“Tener la tercera estrella y ser el primer marplatense en lograrlo no solo es un orgullo para mí, sino para todos los chicos, los arqueritos, que tengan el sueño de lograr la cuarta. Esto es algo hermoso, que a un arquero le hagan este reconocimiento, porque esto casi siempre se lo dan a los delanteros”, comentó.

El guardameta del Aston Villa también se refirió a los éxitos en su carrera deportiva los dos últimos años, luego de haber estado lejos del radar de los técnicos de la selección Argentina.

“Me fui a los 17 años a Inglaterra y cuando empecé en la selección mi sueño fue traerle un título a mi ciudad. Le di la Copa América (en Brasil-2021), ganamos la Recopa en Wembley a los campeones de Europa (Finalissima ante Italia) y les ganamos a los últimos campeones del mundo (Rusia-2018) en Qatar”, comentó.

El análisis psicológico de Dibu

Un experto noruego en psicología del fútbol, Geir Jordet, realizó un análisis del guardameta de la albiceleste y llegó a una conclusión: es el Maquiavelo del balompié. El primer gesto de Martínez analizado por Jordet fue el recibimiento que le hizo a Hugo Lloris, cancerbero de Francia, luego del lanzamiento de moneda realizado por el árbitro para establecer quién comenzaba atajando.

“Martínez caminó rápidamente hacia el área penal, esperando a que llegara Lloris, como si estuviera dando la bienvenida a un visitante a su propia casa: ¡Estás en mi casa ahora!”, comentó en Twitter Jordet.

Pero en el plan del Dibu no solo entraron los jugadores dirigidos por el entrenador francés Didier Deschamps, sino el juez central del compromiso, Szymon Marciniak, a quien también “se ganó” desde los cobros de penales. Incluso, hizo que lo obedeciera, cuando debió ser lo contrario.

“Al comienzo del tiroteo, las interrupciones de Martínez son silenciosas y sutiles. Esto es probablemente para conocer al árbitro y sentir dónde se dibuja la línea. Con Mbappé, insta al árbitro a revisar la colocación del balón. El árbitro amablemente obedece y responde con un ‘pulgar hacia arriba’”, explicó inicialmente el analista danés.

Luego comentó: “Con Coman, Martínez está presionando un poco más, lo que obliga al árbitro a intervenir cortésmente. Nuevamente, hace que el árbitro verifique la ubicación de la pelota y obtiene una respuesta obediente. Ahora, Martínez sabe que domina el área penal y que puede ponerse a trabajar por completo”.