ENTREVISTA
Sebastián y Juan Pablo Montoya escribirán una página dorada en el automovilismo
Padre e hijo hablaron con SEMANA previo a la gran carrera del día domingo en las 12 Horas de Sebring.
Este fin de semana, Juan Pablo y Sebastián Montoya vivirán un momento especial al competir juntos por primera vez en una carrera profesional. Atrás quedaron las horas en simulador y todo lo que vivieron cuando Sebas era solo un niño y acompañaba a su padre por el mundo, escribiendo una trayectoria llena de logros.
El domingo será el turno para Sebastián de seguir los caminos dorados que ha realizado su padre en la historia del automovilismo mundial y colombiano. Para hacerlo mucho más llamativo, ambos compartirán equipo en las 12 Horas de Sebring, competencia que se disputará este domingo en el Sebring International Raceway de Florida (Estados Unidos).
Para ambos, lo que ocurrirá en suelo estadounidense será algo inigualable, dado los presentes de cada uno, como lo manifestaron los dos pilotos en diálogo este viernes con SEMANA TV. “La oportunidad de correr juntos es increíble, porque estamos en momentos realmente opuestos de las carreras, es decir, la suya está empezando, la mía acabando”, dijo Juan Pablo.
“Estar juntos en pista es una gran oportunidad, lo hemos disfrutado mucho, hemos aprendido mucho, es una experiencia para él (Sebastián) increíble, y además es una oportunidad para hacer mostrar de manera diferente”, agregó.
Tendencias
En el caso de Sebastián, competir junto a su padre será totalmente diferente a otras competencias en las que se ha destacado. El domingo quedarán atrás las carreras disputadas en otros continentes y será un nuevo reto de figurar en el continente americano, tierra donde su padre ha labrado historia.
“Honestamente es bastante diferente sentir ahora con respecto a otras competencias. Me siento más cómodo aquí, en este carro, es un poco diferente por lo que yo sé el límite de lo que tengo que hacer. No siento nervios porque conozco el carro, es más fácil de manejarlo; la carrera es tan larga, que no se cometen errores”, dijo Sebastián.
Los Montoya ya tienen un plan para afrontar esta extensa carrera de 12 horas, la inteligencia y paciencia serán claves para lograr grandes cosas. “Según como vayamos, vamos decidiendo cómo se desarrolla la carrera. Uno se prepara mentalmente, físicamente, nos hidratamos mucho para la carrera (...) El carro está muy bien, hemos tenido pocos problemas, ya es esperar en la carrera a ver qué pasa”, dijo el piloto que tuvo paso por la Fórmula 1.
“En las pruebas hemos estado segundos y terceros, mi papá en las prácticas ha estado liderando, la idea es completar las vueltas y estar adelante en la primera parte de la carrera”, dijo Sebastián.
Quiere escribir su propia historia
La sombra es algo que no le preocupa a ‘Montoyita’, pues él mismo asegura que la figura de su progenitor lo ha inspirado a perseguir sus sueños como piloto. “Ahora soy el hijo que está corriendo en F3 y su compañero de equipo. No sé cómo pasé de ser el niño chiquito a su compañero, pero le vamos mostrando a la gente que el apellido sigue en alto”, dijo Sebastián en entrevista con SEMANA.
A bordo del LMP2 número 81 del equipo DragonSpeed, padre e hijo buscarán un título que Juan Pablo todavía no tiene en sus vitrinas. El sueco Henrik Hedman completa la tripleta de pilotos que desde este miércoles se encuentra en prácticas, preparando lo que será la clasificación el viernes en horas de la mañana y la carrera, el día sábado desde las 9:10 a. m. hasta las 9:10 p. m. (hora de Colombia).
“Esta carrera son 12 horas con tres pilotos. Entre mi papá y yo hacemos nueve horas, cada uno hace cuatro y media”, explicó el más joven de los Montoya a SEMANA. “Es una carrera internacional de duración, son 12 horas con tres pilotos: un bronce y después nos turnamos mi papá y yo”, añadió.