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SEMANA destapa la millonaria cifra que Atlético Nacional le pagaba a la barra Los del Sur
El presidente Mauricio Navarro confirmó que pagaban a la barra exigencias económicas.
La gota que rebosó la copa entre la tensa relación de la actual dirigencia de Atlético Nacional y la barra de Los del Sur (LDS) fue la decisión tomada por el club paisa y que fue comunicada a los líderes de la misma: suspender los beneficios económicos con la barra.
“Para nosotros, todos los aficionados son igual de importantes y por ello creemos firmemente que nadie debe tener privilegios sobre otros”, precisaron después en un comunicado oficial.
La protesta de dicha barra que inició por redes sociales terminó en disturbios en la tribuna sur del estadio Atanasio Girardot, con policías y seguidores del equipo verde lesionados, la suspensión del partido, la negativa de la Alcaldía de prestar el escenario al club antioqueño y pérdidas económicas para el club que ascienden a los 500 millones de pesos.
Por fecha, un club como Nacional debe pagar de arriendo el 4 % de la taquilla al Inder de Medellín y la administración municipal. Se calcula que para el juego con América de Cali, el recaudo sería de 1.800 millones. También deben pagar el impuesto municipal del 6 %, más la ley del deporte, que es el 10 % de la misma taquilla. Logística de aseo, vallas, Cruz Roja, pago de operadores logísticos, administración del estadio, refrigerios por cerca de 100 millones.
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Todo eso sin contar la plata que se deba pagar posiblemente por los daños a la infraestructura del estadio y las sanciones económicas que puedan acarrear.
Sin embargo, el gasto que más llama la atención fue el que desencadenó la batalla campal. Según conoció SEMANA, Atlético Nacional le pagó cerca de 1.200 millones durante 2022 a la barra LDS, representados en boletas, apoyo para las salidas y tifos, refrigerios y logística de la tribuna sur, apoyo para cuidar a los hinchas visitantes, plata por celebraciones de aniversario y mucho más.
“No sabemos si es una campaña o un negocio. Lo llaman derechos adquiridos a sus exigencias, 500 boletas, el pago de la logística, cuando el equipo salía al campo eso lo pagaba el club. Cuando viniera hinchada vigilaban que no hicieran desmanes en el estadio o vías aledañas y el pago era extra”, confirmó a SEMANA Mauricio Navarro, presidente de Nacional, y agregó:
“Más de mil millones le cuesta a Nacional, pero ese valor se puede multiplicar si hay buenas participaciones con boletas y otros beneficios”, puntualizó.
¿Negocio o amor por el equipo?
Lo consultado por esta casa periodística coincide con la versión entregada por el periodista Juan Felipe Cadavid, director de El Carrusel Caracol, quien contó lo que decidió cortar la institución con esta barra llamada LDS.
1. Se le quitaron 500 boletas promedio gratis que se le daban a esta barra. 15.000 en el año.
2. El pago por seguridad a la tribuna sur donde se ubica la barra.
3. Pago de seguridad que exigían para no meterse con hinchas de otros equipos.
4. Un apoyo para armar la fiesta.
5. No tendrán voz ni voto en contrataciones de jugadores, técnicos ni nada que tenga que ver con la contratación.
¿Qué dice Felipe Muñoz, líder de LDS?
“El presidente de Nacional miente, invadiendo los terrenos de la calumnia y es muy grave para un dirigente de fútbol que tiene que mostrar compostura y ejemplo en sus declaraciones. Debe mostrarle credibilidad al país”, indica el líder de LDS a SEMANA.
“Todo este asunto de los beneficios es muy amañado por parte de ellos. Qué casualidad que justo en el momento en que más reproches hay por su gestión bastante mala –y no lo digo yo, sino los resultados– es necesario aclarar lo siguiente: LDS y Nacional lo que hemos tenido son unos convenios firmados hace muchos años de los que tienen conocimiento dirigentes y alcaldes de la ciudad”, puntualiza.
¿En qué consiste ese convenio?
“Uno de ellos consistía en que los muchachos llevaran la logística en la tribuna, 500 personas encargadas de contener que se metan a la cancha, un trabajo pedagógico en los barrios, un trabajo territorial, de contención y fortalecimiento de un mensaje de convivencia y esto daba todo un estímulo a la dinámica laboral de la barra. Nacional rompe con esto a 48 horas de un partido tan importante y se rehúsa a dialogar ante las citaciones de las autoridades como la Alcaldía de Medellín. Rompió el pacto social tácito que tenía corresponsabilidad, no unos beneficios”, comentó Felipe Muñoz a SEMANA.
Muñoz dijo que tenían un contrato en el que ellos estaban supeditados a los parámetros de los abogados de Nacional y que cumplía con las exigencias.