Técnico del Rayo Vallecano explicó cómo se debe tratar a una estrella del nivel de Falcao García

Estar en puestos de Europa League en su debut como técnico de primera división española no es gratis. Andoni Iraola ha tenido que pasar momentos difíciles tras su retiro como jugador, situaciones que lo llevaron a tener el temple que se le ve al mando del Rayo Vallecano.

Iraola habló en The Coaches Voices y relató un poco sobre lo que ha sido su camino hasta asumir la dirección técnica del cuadro madrileño. “Yo solo había experimentado como futbolista el vestuario del Athletic Club. Más de 15 años en el equipo y en la misma ciudad. Siempre he dicho que estoy encantado de que fuera así, pero sí tenía un poco esa inquietud de vivir otra experiencia profesional y personal, de relacionarme con gente de otros países”, comentó el nacido en Usúrbil, España.

“Esa opción llegó desde el New York City a mediados de 2015 (...) El primer año llegué a mitad de temporada. Digamos que más bien fue un período de adaptación, pero la segunda temporada la jugué entera, con Patrick Vieira de entrenador”, añadió sobre ese paso por la MLS.

“Patrick me dio una nueva perspectiva del fútbol, porque él venía de la escuela del Manchester. Esa nueva perspectiva también tuvo otra consecuencia: me llevó a pensar en el camino de ser entrenador”, aseguró.

Iraola acepta que “el New York City y la ciudad terminaron convirtiéndose en la antesala de todo lo que vino después. El punto de partida hacia un nuevo camino”.

”El primer paso de ese nuevo sendero fue volver a casa, a San Sebastián, en el País Vasco. Ahí empecé a sacarme todos los cursos de entrenador, compaginando los estudios con las prácticas”, agregó el hoy técnico del Rayo, comentando que empezó como asistente en el Antiguoko, su primer equipo cuando apenas daba los primeros pasos como jugador.

Iraola continúa diciendo que “el paso a un equipo élite llegó sin ningún proceso de transición. Ander Murillo, que había sido compañero en el Athletic, era el director deportivo del AEK Larnaca, y un día me llamó por teléfono” para ofrecer la dirección del equipo con el que disputó la fase de grupos de la Europa League y conquistó un título de Supercopa.

“Chipre me vino bien para probarme. Ver qué cosas que pensaba como jugador podían funcionar, pero también cuáles no estaban tan claras. En fin, tomar decisiones y equivocarte. Esa es la única forma de ponerte a prueba”, reconoce el español en The Coaches Voices.

Después de ese paso por otro país, Iraola regresó a su tierra natal para dirigir en segunda división. “La experiencia en el Mirandés no fue sencilla, pero sí muy gratificante, en el sentido de que me tocó dirigir un grupo con mucha hambre, con ganas de ser jugadores profesionales y que me hicieron muy fácil mi trabajo”, completó.

El 6 de agosto de 2020 asumió la dirección técnica del Rayo, equipo al que llevó de vuelta a primera división. “Una suerte que también tuve cuando llegué al Rayo Vallecano. Una de las principales razones para firmar fue su estadio. Cuando jugaba para el Athletic, me encantaba jugar ahí”, afirmó Iraola.

Falcao, la máxima figura que ha dirigido

A pesar de lograr todo muy rápido, Iraola reconoce que “más allá de lo conseguido y de la ilusión que nos hace competir ante los mejores, no olvidamos que lo primero de todo es el trabajo”.

“Ese es el espíritu que acompaña a los aficionados del Rayo, y que se ha trasladado también a los jugadores. Una mentalidad a la que se ha sumado un jugador de la talla de Radamel Falcao”, asegura el director, reconociendo que el colombiano es el jugador de más renombre que le ha tocado dirigir.

Iraola recuerda que “mucha gente me preguntó a su llegada cómo iba a gestionar tener una estrella como él en el equipo, si a este tipo de jugadores hay que darles un trato diferente”. La respuesta fue clara: “Al jugador, por muy grande que pueda ser, como es Radamel, tienes que contarle la verdad siempre”.

“Ser lo más honesto posible con él. Como entrenador, tienes que tomar decisiones, y esas decisiones no siempre van a contentar a todo el mundo. Radamel, en este caso, es un futbolista que lo facilita todo”, elogia el exjugador de 39 años, solo cuatro más de los que tiene el ‘Tigre’.

Falcao “no exige ningún trato preferencial. Ni cuando juega, ni cuando no lo hace. Su experiencia le hace ser consciente de que al final el éxito colectivo te lleva al éxito individual. Así que trabajar con él está siendo una gran experiencia para mí”.