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Turquía sorprende en la Eurocopa 2024; Austria decepciona y se marcha a casa
Fue un cotejo muy disputado.
Este martes 2 de julio se llevó a cabo el último partido de los octavos de final de la Eurocopa 2024 que se lleva a cabo en Alemania. En este compromiso se tuvieron que enfrentar la selección de Turquía y la escuadra de Austria.
El duelo, que fue muy reñido durante los 90 minutos, terminó finalizando 2 goles a 1 a favor del equipo turco. Los tantos de la selección ganadora los anotó al minuto 1 y al 59 Merih Demiral. Para Austria descontó Michael Gregoritsch al 66.
En el Red Bull Arena de Leipzig, comenzó el partido fulgurante. Menos de 55 segundos transcurridos y el conjunto turco ya tenía un córner a favor, que lanzó Arda Güler con la zurda a banda cambiada y cerca estuvo de ser gol olímpico.
Christoph Baumgartner sacó bajo palos, el balón tropezó en su compañero Stefan Posch y el arquero Patrick Pentz salvó el gol sobre la misma línea de portería. Sin embargo, Demiral estaba en el área pequeña y remató para el 0-1.
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En el minuto 5, en un córner rebotado por Romano Schmid ocurrió algo similar a la jugada del 0-1; la pelota se paseó por el área pequeña, aunque en este caso sin que nadie la tocara ni para el remate ni para el despeje.
Entraron al campo Michael Gregoritsch y Alexander Prass, por Romano Schmid y Phillipp Mwene respectivamente, y eso le cambió la cara en ataque de Austria. El propio Gregoritsch envió fuera un disparo dentro del área, después de que Marko Arnautovic hubiera apurado la línea de fondo hasta centrar. No obstante, el balón había rebasado la raya y estaba todo anulado.
Las intenciones siguieron y, en el minuto 55, Gregoritsch conectó con Arnautović en otro desmarque; el capitán austriaco definió con una vaselina que se salió del campo, si bien el fuera de juego había invalidado la acción. La respuesta un minuto después fue un eslalon de Ferdi Kadioglu y que él mismo culminó con un potente derechazo, que tropezó en un adversario.
Todo ello precedió al 0-2, obra de Demiral con un remate de cabeza inapelable. Los centroeuropeos contestaron de manera rápida con el 1-2, igualmente en un córner; lo lanzó Marcel Sabitzer, prolongó Posch de cabeza en el primer palo y Gregoritsch apareció en soledad para anotar en el segundo palo.
A partir de ese momento, la selección de Austria se volcó en ataque. Pero ni Florian Grillitsch ni Arnautović encontraron el disparo final que significara el empate. En el banquillo de enfrente, el entrenador italiano Vincenzo Montella intentó frenar un poco el ritmo del partido con varios cambios, incluyendo la retirada de Güler.
Pero la insistencia austriaca continuó, por mediación de Sabitzer con centros y más centros al área. Baumgartner cabeceó uno de ellos en el 85′, pero se fue por encima del larguero; y como un déjà vu, tras una ocasión de Turquía fallada por Baris Alper Yilmaz, Baumgartner tuvo en su cabeza lo que habría supuesto el 2-2 y forzar la prórroga en Leipzig.
En el enésimo balón bombeado a la desesperada hacia el área de Günok, con tiempo ya cumplido de los cuatro minutos que había agregado el árbitro, Baumgartner se elevó más que los zagueros rivales y su cabezazo picado fue desviado a córner de manera magistral por el portero turco. Ahí murieron las esperanzas de los de Rangnick y se despidieron del torneo.
*Con información de Europa Press.