Ciclismo
¿Qué son los monumentos en el ciclismo, cuántos colombianos los han ganado y por qué la Milan-San Remo es la primera en correrse?
En la historia de estas competencias, solo un colombiano ha ganado una de estas cinco carreras.
La temporada ciclística en el mundo está en marcha y luego de la París-Niza y de la Tirreno Adriático, competencias por etapas, se viene el primer monumento: la Milán-San Remo.
Estas clásicas son de suma importancia dentro del mundo de las bielas y a nivel competitivo son unas de las carreras más deseadas por los pedalistas, pues en total son cinco y tienen un gran peso histórico dentro del ciclismo mundial, lo que le da un plus a quienes consigan cruzar primero la meta.
¿Por qué se llaman monumentos?
Se les llama así a las cinco carreras clásicas más longevas y con mayor prestigio dentro del calendario. Su historia es tan antigua que fueron creadas antes de la Primera Guerra Mundial y cada una de ellas tiene algo que las caracteriza y diferencia de las demás.
La primera en aparecer en el almanaque de los pedalistas es la Milán-San Remo, la cual se corre en territorio italiano; le sigue el tour de Flandes, que se disputa en Bélgica; luego aparece la París-Roubaix, que se desarrolla en suelo francés; en su orden, sigue la Lieja-Bastoña-Lieja, también en Bélgica, y por último se disputa el Giro de Lombardía, en Italia.
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Estos monumentos se disputan a lo largo del año, pero con la particularidad que las cuatro primeras clásicas se corren durante la primavera europea, mientras que la última carrera se disputa duran el otoño.
Una de las características de estas carreras es que su recorrido es mayor a los 200 kilómetros y presenta varios puertos de montaña en el trayecto, lo que las convierte en carreras aptas para pedalistas de cualquier perfil como escaladores o embaladores.
¿En qué se diferencian los cinco monumentos del ciclismo?
- Milán-San Remo: es la carrera más larga con recorridos que casi siempre rondan los 300 kilómetros. Le llaman la Classicissima o la Primavera y durante el trayecto hay diferentes picos y pasos por montañas que hacen muy reñida la competencia; sin embargo, suele ser una etapa que, por lo general, ganan los velocistas.
- Tour de Flandes: tiene un recorrido que se caracteriza por ofrecer ascensos cortos, pero de gran desnivel sobre terreno de adoquines; se caracterizan los pasos por Koppenberg, el Kapelmuur y el Paterberg, que debido al terreno hacen de esta carrera una de las más exigentes. Es el monumento más joven de todos y tiene un recorrido de 250 kilómetros.
- París-Roubaix: en el ámbito ciclístico se le conoce como el Infierno del Norte o la Clásica de las Clásicas y es el único monumento que se corre en suelo francés. Tiene casi 30 pasos sobre pavé o adoquines que acumulan 50 kilómetros de recorrido sobre este terreno, a lo que se le suma que, casi siempre, está acompañada por mal tiempo, lo que la convierte en uno de los monumentos más duros para los corredores.
- Lieja-Bastoña-Lieja: los pedalistas le dicen “La Decana”, ya que es el más antiguo de los cinco monumentos. Su recorrido es de 260 kilómetros y tiene varios puntos de más del 10 % de inclinación en los últimos 100 kilómetros.
- Giro de Lombardía: se le conoce como la Clásica de las hojas muertas y ofrece un recorrido entre los 240 o 250 kilómetros; de estos cinco monumentos es el que más variaciones ha presentado en su trazado. De estas carreras es la que ofrece un perfil más apropiado para los escaladores, ya que tiene importantes y extensos ascensos de montaña como el puerto de la Madonna del Ghisallo. Esta carrera tiene un significado especial para Colombia, porque en 2016 el bogotano Esteban Chaves se impuso en un embalaje final en el que superó al italiano Diego Rosa y a Rigoberto Urán, lo que lo llevó a ser el único no europeo en ganar esta clásica y en el único colombiano en conseguir uno de los cinco monumentos.
Milán-San Remo, ¿cuándo se corre?
El mundo del ciclismo sigue calentando motores de cara a lo que serán las tres grandes del año (Tour de Francia, Giro de Italia y Vuelta a España), competencias para las que las grandes figuras del deporte de las bielas han comenzado su preparación. Lo más reciente en este campo tiene que ver con la Tirreno-Adriático y la París-Niza, competencias por etapas que se disputaron la semana pasada y que dejaron como campeones a los eslovenos Primož Roglič y Tadej Pogačar, respectivamente.
Ahora, los aficionados al ciclismo podrán conectarse con las emociones de la Milán-San Remo, el primero de los cinco monumentos de la temporada que entrará en acción. La competencia, que se caracteriza por ser una de las más exigentes del calendario y por ofrecer un recorrido de más de 200 kilómetros, se disputará este 18 de marzo.
Se espera que a la cita italiana asistan los mejores pedalistas del planeta como Tadej Pogačar, Wout van Aert, Mathieu Van der Poel, Arnaud De Lie, Mads Pedersen, Jasper Philipsen, Arnaud Démare, Mark Cavendish, Magnus Cort Nielsen y Julián Alaphilippe; por ahora, no se sabe qué colombianos harán parte de la competencia.