Terrible: jugador de la Fiorentina fue agredido por un hincha, en plena final europea

Este miércoles se jugó una final europea, que dejó como gran vencedor al West Ham de la Conference League. El cuadro inglés venció a la Fiorentina de Italia por 2-1 en el estadio Fortuna Arena de Praga, recinto que vio levantar un nuevo título continental en 58 años para los ‘Hammers’, que tuvieron una temporada muy accidentada.

Los tantos para el West Ham fueron obra de Saïd Benrahma y Jarrod Bowen, al minuto 62 y 90, respectivamente; por su parte, en el elenco italiano marcó Giacomo Bonaventura, en un partido muy parejo y de pequeños detalles, los cuales permitieron que el equipo de David Moyes ganara el pulso.

No solamente el partido se volvió ruidoso en cuestiones deportivas, sino también por el tema de la intolerancia que lastimosamente se ha arraigado. O si no, hay que preguntarle a Cristiano Biraghi, lateral zurdo de la Fiorentina y de la Selección de Italia, quien fue agredido por un fanático que le lanzó un objeto contundente.

El partido se jugaba sin mayores inconvenientes cuando, de repente, sobre los 34 minutos del primer tiempo, Biraghi se dispuso a cobrar un tiro de esquina a favor de la Viola y los fanáticos empezaron a intimidarlo con insultos y lanzándole varios objetos.

La barra radical lanzó hasta un dispositivo electrónico para jugar, así como los vasos de plástico; uno impactó en la cabeza de Biraghi, quien no había sentido el golpe y les gesticulaba a los hinchas, como diciéndoles “muy bien hecho” y aplaudiendo.

Ya de un momento para otro, sintió la herida y empezó a salir sangre de su cabeza. De inmediato, el árbitro central, el español Carlos del Cerro Grande, detuvo momentáneamente el cotejo para que el respectivo cuerpo médico atendiera al jugador.

En los altavoces del estadio se pedía encarecidamente a los hinchas que dejaran de arrojar objetos a los radicales del West Ham, que de todos modos ganó el partido y quedó campeón. El detalle fue que el partido siguió su curso, como si nada hubiese pasado.

El lateral de la Fiorentina tuvo que ser vendado en su cabeza y se le notaba incomodidad por el golpe recibido. A fin de cuentas, jugó todo el partido al servicio de su estratega, Vincenzo Italiano.

El West Ham rompió la sequía de títulos

Para los Hammers, se trató del segundo título europeo, pues obtuvieron en su palmarés la Recopa de 1965 ante el 1860 Múnich de Alemania. Es más, a nivel doméstico, no obtenían un trofeo desde 1980, exactamente hace 43 años, cuando derrotaron al Arsenal por la FA Cup.

Esto le salvó la temporada a un West Ham que celebró no descender en la Premier League; en varias fechas, estuvo en la cuerda floja e incluso se especuló que se iban a tomar medidas drásticas sobre su DT.

Lo cierto fue que en la recta final, indudablemente, el equipo londinense obtuvo resultados importantes y al fin se consolidó un poco más cerca de la mitad de la tabla, pues terminó en la decimocuarta casilla con 40 puntos, a 6 de la zona de descenso, la que integró el Leicester City, Leeds United y el Southampton.

En cuanto a la Fiore, cerró su temporada al ser subcampeón de la Conference League, además de instalarse en la octava casilla de su liga, la Serie A, con un registro de 56 puntos (a siete de la Juventus, que clasificó a la misma competición).

No había sido la primera final que dejó un panorama negativo para la Viola, que cayó en el último partido de la Coppa Italia, por 2 a 1, frente al Inter de Milán.