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Abren investigación contra EasyFly y otras empresas por presunto mal manejo en el transporte de mascotas
En total, para las tres investigaciones administrativas adelantadas por la Superintendencia de Transporte podrían imponerse multas de hasta 2.753 salarios mínimos mensuales vigentes.
Las denuncias que se han conocido en los últimos meses sobre la supuesta mala gestión por parte de empresas de transporte a la hora de llevar mascotas han generado indignación en el país y por esto la Superintendencia de Transporte tomó cartas en el asunto.
La entidad de control adelantó indagaciones preliminares que llevaron a investigaciones e imputaciones de cargos contra cuatro empresas y una persona natural, que pueden terminar en sanciones, según informó en un comunicado.
Las empresas que están en la lupa de estas investigaciones son la aerolínea Eeasyfly SA, la agencia de viajes Bestravel Service LTDA, la sociedad Aerocafeteros Cargo S.A.S., la sociedad Velotax LTDA, y una persona natural, “por presuntamente no prestar un servicio de calidad e idoneidad”.
La Superintendencia señaló que “de ser encontradas responsables, las posibles sanciones para las tres investigaciones administrativas adelantadas por la Superintendencia podrían rondar, en conjunto, los 2.753 salarios mínimos mensuales vigentes”.
La investigación se produce luego de conocer varias denuncias por parte de ciudadanos cuyas mascotas murieron durante un viaje.
Este fue el caso de Homero y París, un perro de raza american bully y una bulldog francés, que murieron por el presunto mal cuidado por parte de dos compañías: EasyFly y Aerocafeteros, respectivamente.
El caso de Homero ocurrió a principios de este año en un vuelo de Puerto Asís a Cali y el relato de María Fernanda Echeverry, su dueña, conmovió a cientos de usuarios en redes sociales
La joven contó en Vicky en Semana que su perro, Homero, murió al interior de una bodega de un avión operado por la aerolínea EasyFly, que obligó a María Fernanda a llevar a su mascota al interior de un guacal en la bodega, impidiéndole viajar con el animal en cabina, como ella tenía previsto.
“El perro nunca tuvo que haber viajado ahí, yo les insistí muchas veces que el perro debía viajar conmigo en cabina”, cuenta la mujer, cuyo caso ya escaló hasta el Grupo Especial contra el Maltrato Animal (Gelma) de la Fiscalía, que anunció que ya adelanta una “investigación por posible delito”.
La joven le dijo a SEMANA que los empleados de la aerolínea “nunca” le dieron una explicación detallada de por qué el perro debía viajar en bodega. “Me dieron un no rotundo, les pedí que estuviera en un lugar fijo donde no se fuera a voltear y pudiera respirar, y no pasó. Estaba debajo de todas las maletas, yo lo vi”.
“Corrí a verlo para recibirlo y me encuentro con una escena impactante: Homero estaba debajo de todas las maletas sin vida, no lo ubicaron como debían y no le dieron el espacio suficiente para poder respirar, en ese instante supe que mi bebé no había sido fijado adecuadamente y puesto en un lugar donde pudiera llegar a salvo”, señaló la joven en su denuncia.
Por su parte, Leidy Yulieth Restrepo, la dueña de París, la otra perrita que murió tras ser transportada por la empresa Aerocafeteros, contó en su momento a SEMANA que su mascota viajó desde Medellín hacia Cali y la compañía se retrasó varias horas de viaje por problemas en la vía, pero cuando llegó al aeropuerto se encontró con una “situación desagradable y dolorosa”.
“La compañía nunca me llamó a decirme que París había llegado. Yo estuve allí antes de que ellos me llamaran, y vi mucha gente alrededor de un perro, poniéndole agua y reanimándolo”, relata la mujer. En ese momento se percató de que era su mascota: “Cuando me acerqué no tenía respiración, estaba perdida e ida. No había personal capacitado”, denunció.
Por estos casos y un hecho relacionado con dos perros transportados por vía terrestre, presuntamente en costales, desde Pereira hasta Ibagué, el superintendente de Transporte, Camilo Pabón Almanza, señaló que “las mascotas son una parte indispensable en la vida de muchas personas. Por eso, en la SuperTransporte, dentro de nuestras competencias, velaremos para que lleguen sanas y salvas al lugar de destino cuando viajen en transporte aéreo, terrestre o fluvial”.
“Los cargos imputados a las empresas tienen que ver con sus obligaciones de proveer información clara, veraz, suficiente, oportuna, verificable, comprensible, precisa e idónea sobre el servicio ofrecido a los usuarios, conforme lo señala el artículo 23 del Estatuto del Consumidor – Ley 1480 de 2011″, se lee en el comunicado de la Superintendencia de Transporte.