BARES
Bares y discotecas: después de 20.000 quiebras en 2020, podría haber nuevos cierres en este año
Asobares dice que una de las mayores afectaciones fue el desempleo, con 100.000 desocupados.
El temor asalta de nuevo a los empresarios de bares, restaurantes y sitios, que otra vez se sienten contra la pared, debido a las medidas restrictivas adoptadas en varias ciudades del territorio colombiano.
Más de 20 mil establecimientos en Colombia cerraron el año pasado, dejando a más de 100.000 personas sin ocupación ni empleo, indicó el gremio de bares (Asobares).
Según las declaraciones de Camilo Ospina, presidente del gremio, este sector ya está fuertemente golpeado, y, aunque intenta resistir al efecto de las medidas de bioseguridad, las nuevas condiciones implementadas en algunas regiones (debido a la segunda ola de la pandemia) llevarán seguramente a nuevos cierres.
Hasta el momento, han subsistido con dificultades. Solo están abiertos hoy el 50 % de los establecimientos que han solicitado y recibido la autorización de las pruebas piloto para bares y restaurantes con consumo de licor, solo pueden operar con un aforo de 35 % y esto ha llevado a que mantengan solo el 40 % promedio de su nómina.
En marzo próximo, cuando se presente el informe de renovación de registro mercantil de los negocios, se conocerá con certeza el impacto, pero desde ya, tras lo ocurrido en el 2020, un 29 % de locales no renovaron sus votos para seguir siendo parte del tejido empresarial. Así, se vislumbra un panorama gris. Por ejemplo, las medidas de toque de queda dejan cada fin de semana pérdidas que sobrepasan los 5.000 millones de pesos.
Medidas diferenciales en los municipios
Asobares se refirió al decreto 039 del 14 de enero, con el que el Gobierno nacional extendió la medida de aislamiento selectivo. Des este resaltó que se exceptuaron los establecimientos gastronómicos (incluye gastrobares y restaurantes), del pico y cédula. No obstante, el gremio hizo un llamado a las administraciones locales, a hacer un uso responsable de las medidas restrictivas en los municipios, so pena de no ayudar a que se fomente la informalidad en el expendio de licores, hecho que pone en peligro a la ciudadanía.
El sector de bares y discotecas venía en franco dinamismo, aportando al crecimiento de la economía colombiana. En el 2019, sus resultados mostraron una pujanza visible, al sumar ventas superiores a los 9 billones de pesos.
Después de la fuerte crisis, en los primeros meses de la pandemia y el confinamiento de la población colombiana, empezaron una reapertura que logró reactivar muchos negocios y salvarlos de la quiebra. No obstante, ahora vuelve la incertidumbre, con medidas como la Ley seca, que apunta a impedir el consumo de alcohol, pero a veces estimula la compra de bebidas embriagantes en sitios no autorizados.