Brookfield Asset Management adquirió Isagén. | Foto: Guillermo Torres

NEGOCIOS

Este es el nuevo dueño de Isagén

El fondo de inversión Brookfield Asset Management tiene inversiones en infraestructura y energía por más de 200.000 millones de dólares y enfrenta investigaciones en Brasil por el posible pago de sobornos.

13 de enero de 2016

Con unas cortas palabras, en la que destacó la fuerza laboral altamente calificada con la que cuentan, hizo su presentación Carlos David Castro, representante del fondo de inversión canadiense Brookfield Asset Management, al término de la venta de Isagén en la Bolsa de Valores de Colombia.

El directivo destacó el compromiso con la empresa que acaban de adquirir, que es vista como la joya de la corona porque responde por cerca del 20 por ciento de la energía que demanda el país. Por eso ahora todos los interrogantes recaen sobre quién es el nuevo comprador y su experiencia en el sector. Hay que decir que Brookfield tiene activos por más de 200.000 millones de dólares en Estados Unidos, Canadá, Europa y Brasil. En este último país tiene investigaciones por el presunto pago de sobornos en negociaciones del sector inmobiliario, según informaciones del diario The Wall Street Journal.

Este fondo de inversiones tiene una historia de más de 100 años ya que fue fundado en 1899 en Canadá con el objetivo de hacer inversiones en sectores estratégicos. En el sector energético cuenta con más de 570 unidades de generación hidroeléctrica, con una capacidad de más de 7.000 megavatios. Por eso adquirir Isagén era estratégico para su expansión si se tiene en cuenta que esta generadora cuenta con siete centrales eléctricas y unas capacidad instalada de 3.032 megavatios, es decir, casi la mitad de los que maneja su nuevo dueño.

El fondo canadiense también tiene inversiones en bienes raíces, energías renovables y proyectos de infraestructura. A Colombia ya había ingresado cuando adquirió en diciembre de 2011 por 416 millones de dólares a la Empresa de Energía de Boyacá (EBSA). Estos recursos se destinaron a financiar parte de los gastos del presupuesto general de la nación en 2012.

Ahora con la compra de Isagén entra pisando duro en el sector eléctrico que afronta actualmente un momento muy complejo por el fenómeno de El Niño que está bajando las aguas de los embalses de las hidroeléctricas y por los problemas de las termoeléctricas.

Este negocio le generó una gran polémica ya que fue el único proponente que participó en la operación y que ofertó lo mismo que había señalado el gobierno, es decir, 6,49 billones de pesos. Ni un peso más. Sin embargo, no es la única operación que ha causado controversias. En Brasil fue investigada a mediados del 2012 por el pago de sobornos con el fin de obtener permisos de construcción, hechos que han sido negados por la compañía canadiense. Según el diario The Wall Street Journal, la firma atribuyó estas denuncias a la exdirectora financiera de la filial de Brasil, Daniela González, que fue despedida en 2010.

Según información de La F.M., Silvio Antonio Marques, fiscal de Justicia del Patrimonio Público y Social de Sao Paulo (Brasil), el fondo de inversión era propietario de centros comerciales en esta ciudad y para conseguir los permisos de construcción pagó sobornos a funcionarios de la alcaldía. También mencionó otro caso donde habría pagado otros cuatro millones de reales. Marques no descartó que puedan terminar presos directivos de Brookfield en Brasil por este caso de corrupción.

La compañía canadiense también habría afrontado investigaciones por parte de la Comisión de Bolsa y Valores del Departamento de Justicia de Estados Unidos al parecer por posible violación de la ley de Prácticas Corruptas en el extranjero.