Crisis del carbón: ¿el mundo está dejando de consumir este mineral?

La caída del precio del carbón en los mercados del mundo es uno de los factores que tienen al negocio en picada. A esto se suma la extracción en los depósitos, que terminan subiendo los costos de la producción, además del gran progreso que están teniendo las energías renovables.

Muestra de esto es la política de descarbonización que se está promoviendo a nivel mundial y que ha tenido ecos en Colombia: en la Cumbre Climática mundial, el presidente Iván Duque dijo que para 2030 el país logrará reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en un 51 %.

Según datos del Ideam de 2019, Colombia emite 237 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2) anualmente. Esta cifra equivale al 0,47 % de las toneladas que se emiten a nivel mundial. Esto ha generado niveles elevados de CO2 en la atmósfera y ha influido directamente en el aumento de la temperatura de la Tierra.

Por estas razones, el mercado ha perdido su apetito de inversión de países de Europa y del continente americano, según el analista, Nicolás Arboleda. En una entrevista con “Portafolio”, Arboleda comentó que otra de las razones tienen que ver con los contratos de aporte minero de las empresas carboneras en los departamentos de Cesar y La Guajira. Esto porque en dichas regiones se debe actuar bajo condiciones diferentes.

“Esto implica que el ‘government take’ pueda ser alto para estas compañías extractivas a gran escala y, con precios de carbón a la baja, resultan en operaciones que podrían ser económicamente inviables”, resaltó Arboleda.

El año 2020 cerró para la industria carbonera con más de 54 millones de toneladas exportadas (la cifra más baja en toda la historia de la operación), y con una proyección de 62 millones de toneladas, cifra que llevó al sector a hacer un llamado.

La líder empresarial agregó que en ese proceso es esencial contar con una mayor seguridad jurídica y un compromiso más activo del Gobierno en el desarrollo de la operación minera y así evitar los bloqueos que terminan afectando los ingresos por regalías para el país.

Ante dicha situación el presidente de Drummond, José Linares, manifestó que “la crisis actual de la operación fue causada por la pandemia (emergencia sanitaria por la covid-19), a lo que se sumó un ciclo prolongado de precios bajos en el mercado internacional del carbón. Logramos sobrellevar la situación y emerger de 2020 nuevamente con 29,7 millones de toneladas de carbón exportadas”.

El mensaje que dejan las empresas mineras con presencia en Colombia, los analistas y el gremio del sector, es que es necesario tener las reglas del juego claras, pues debido a la inseguridad jurídica las empresas se han visto afectadas.

”Los fallos judiciales han presionado la actividad, demorando las ampliaciones o haciendo inviable la fórmula operativa desconociendo el modelo minero aprobado inicialmente”, recalcó el presidente de la ACM, para Portafolio.

Ante esta misma línea, el socio de Dentons Cárdenas & Cárdenas, Hernán Rodríguez, mencionó que el Ministerio de Minas y Energía debería apoyar a las empresas productoras de carbón térmico con un alivio en momentos de precios bajos.

No obstante, ante el desalentador panorama, en Asia el apetito por el mineral no ha disminuido. China, India, Indonesia, Vietnam o Filipinas están en proceso de construir nuevas centrales termoeléctricas. Además, los optimistas aseguran que, si bien la preocupación por el vertimiento de gases de efecto invernadero a la atmósfera es una constante, la tecnología de filtros viene mejorando. Y aunque todavía no se ha alcanzado el ideal, se pronostica que no está lejos el momento en el cual las emisiones de dióxido de carbono se reduzcan a un mínimo.

Para otros, la industria del carbón no está llegando a su fin, simplemente está cambiando de geografía y, para muchos, esto es motivo para que el país trate de ser más competitivo.