ECONOMÍA
Crisis económica de 2020: diferencias y similitudes con 2008 y la Gran Depresión
La economía mundial, afectada por la covid-19, se ha comparado con la Gran Depresión de los años 30, causada por la caída de las acciones en la bolsa de valores de Nueva York y la crisis de 2008, cuando bonos de vivienda perdieron su valor.
Diversos analistas e instituciones financieras como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, al medir el impacto que la pandemia del coronavirus ha tenido sobre las economías del mundo, coinciden en que el planeta se encuentra en una crisis comparable a las de 2008 y 1929, célebres por provocar recesión, pérdidas de empleos, cierre de empresas y quiebras de prestigiosos bancos.
Aquí las similitudes entre las tres crisis
Giovanni Reyes, investigador y profesor titular de la escuela de administración de la Universidad del Rosario de Colombia, explica que las crisis de 1929 y 2008, al igual que la actual, “son crisis sistémicas que rebasan a un país y las sufre el sistema mundial”.
El académico también encuentra una relación entre los niveles de desempleo de dichas crisis y explica que, sin importar el origen, son las personas del común las que pagan con su trabajo los estragos en el sistema económico.
En diálogo con la Agencia Anadolu, Reyes argumenta que durante las crisis de octubre de 1929, que causó la Gran Depresión de los años 30, y la de 2008, hubo esfuerzos de los gobiernos y los bancos centrales por revisar sus políticas fiscales para intentar encontrar la estabilidad en sus economías. “Se aplicó fuertemente el keynesianismo (gasto presupuestario del Estado en medio de crisis). No fue darle dinero a la gente sin razón, porque se transgredía la ética del trabajo, sino era destinar recursos a obras que generaran un impacto estratégico en el empleo”, sostuvo.
El investigador encuentra en esa reacción histórica una similitud con la política aplicada por las naciones ante el impacto del coronavirus. Menciona, sin embargo, que la respuesta no ha sido homogénea, pues hay países que han destinado más recursos que otros en la atención de la crisis.
“América Latina está más afectada hoy en día de lo que estuvo en 1929, porque está más integrada con los otros mercados”.
Felipe Campos, gerente de estrategias e investigaciones de la fiduciaria y comisionista Grupo Alianza, afirma que la situación de la economía actual no solo está relacionada con el coronavirus, sino que el mundo viene de un ciclo que “es una copia exacta a lo sucedido entre los años 20 y 30”.
“Estamos en un momento en el que los activos financieros y las variables económicas e indicadores de desigualdad están tan complicados como a finales de los 20”, sostuvo Campos en un reciente foro virtual llamado ‘1929 razones para estar alerta y no confiarse, lo peor aún puede estar por venir’.
Campos explicó que las acciones de los mercados de Estados Unidos han mostrado en la última década unas ganancias cercanas al 15 %, superior a la media de los últimos 100 años, que estuvo en torno al 5 %, e idénticos a los de la década previa a la Gran Depresión de los años 30, luego de que las acciones en la bolsa de valores de Nueva York se derrumbaran en 1929.
Detalló que, debido a los ciclos económicos, los mercados retornan a su ganancia media, como sucedió en 2008, después de una “década emocionante en mercados emergentes”, y como ha pasado ahora en 2020, aunque acelerado por la pandemia.
Tendencias
Durante su intervención en el foro virtual, el analista mencionó que, al igual que lo sucedido antes de la crisis de 1929, el año 2020 llegó con un problema de productividad, donde cada persona sumaba muy poco al Producto Interno Bruto pese al dinero que circulaba en la economía.
“Cuando se tienen esos periodos de liquidez enormes, se comienzan a generar episodios de desigualdad porque la plata no le llega a la gente, sino que se queda en los bancos”, detalla Campos.
Para el experto, tanto en 1929 como en 2020 se repite el fenómeno del estancamiento de dinero en bancos. “Se comienza a tener una baja velocidad del dinero (…) Cuando se dice que la crisis se da por el virus, yo no entiendo, porque llevábamos 10 años echando a la economía volquetadas de plata que no circula. La economía iba muy mal”, menciona.
El investigador indica que la recesión de 2020 causará al menos dos años de altas tasas de desempleo y que, si se repite la situación de 1929, se debe recordar que tardó una década en recuperarse.
“Que quede claro que no estoy proyectando ese escenario de 1929 a la crisis de 2020, solo que las similitudes sugieren que solucionar el problema actual será largo y va más allá del virus”, enfatiza Campos.
Diferencias entre las tres crisis
Giovanni Reyes observa una diferencia específica en el origen de la actual respecto a las de 2008 y 1929. Considera que esta coyuntura surge de una situación de “choque en la demanda y la oferta en la economía”, acentuada por la pandemia, mientras que las previas tuvieron su origen en el colapso del sistema financiero.
Para el economista, la crisis actual no ha afectado tanto a los bancos como sí sucedió en 1929 y 2008, cuando algunas entidades financieras se declararon en quiebra. Señala que “la banca no está requiriendo que se le dé un apalancamiento como en 2008”, cuando unos bonos de vivienda perdieron valor por la falta de pago de deudores insolventes.
El académico resalta que la crisis actual, probablemente, tendrá un mayor impacto que la de 1929, debido a los efectos severos generalizados en todo el mundo, mientras que durante la Gran Depresión los países europeos y Estados Unidos fueron los más afectados.
“América Latina está más afectada hoy en día de lo que estuvo en 1929, porque está más integrada con los otros mercados”, manifiesta el economista.
Al referirse a 2008, Reyes destaca que países emergentes fueron favorecidos por el crecimiento acelerado de economías como la de China e India, que demandaban materias primas.
Otras diferencias son mencionadas por Gustavo Flores-Macías, especialista en reforma económica e impuestos en América Latina, quien en una reciente columna en ‘The New York Times‘ afirmó que de la Gran Depresión se aprendió que la inacción gubernamental puede prolongar la caída de las economías, como sucedió en los primeros años luego de la debacle de aquel octubre negro en el último año de la década de los 20.
“De la Gran Depresión aprendimos que estímulos fiscales generalizados y políticas monetarias laxas eran necesarios para poner dinero en los bolsillos de la gente y así reactivar la economía”, opinó Flores-Macías. El especialista aseveró, además, que dichas políticas fiscales “cumplieron un papel fundamental para disminuir los efectos negativos de la recesión global de 2008-2009”.
Las comparaciones entre lo que acontece en el mundo en 2020 con lo sucedido en 2008 y 1929 permiten observar unos efectos similares en el nivel de desempleo, las contracciones de la economía y el aumento de la pobreza.
Las diferencias se encuentran en sus orígenes, hoy vinculados a la pandemia del coronavirus, y que para algunos aceleró y profundizó una recesión a la que ya se aproximaba la estancada economía mundial generadora de grandes desigualdades.