Economía
Dólar revirtió la tendencia y se cotizó más caro al cierre de este 9 de agosto: quedó en $4.070
La moneda americana fluctuó a la baja este viernes.
El dólar terminó la jornada de este viernes en un precio con baja volatilidad. Durante todo el día mantuvo un comportamiento a la baja, perjudicando el bolsillo de los consumidores colombianos de productos importados o que se negocian en esta moneda.
Para hoy 9 de agosto, la divisa cerró en la Bolsa de Valores en un precio de $4.070, lo que significó una reducción de $30 frente a la tasa representativa del mercado (TRM) definida por la Superfinanciera para la jornada actual, que es de $4.100.
Respecto al movimiento de la divisa desde el primer minuto de cotización, la variación fue de $26, teniendo en cuenta que el precio de apertura durante esta mañana fue de $4.044.
Frente a la volatilidad de la moneda, esta registra movimientos considerablemente bajos. El precio máximo que ha alcanzado durante la jornada es de $4.089, mientras que el precio más bajo registrado al cierre es de $4.036. El promedio cotizado se encuentra en $4.064.
Tendencias
En cuanto a las negociaciones, hoy la moneda tuvo un volumen transaccional de 1,533 millones. El volumen promedio, por su parte, se ubicó en 590,38 millones.
El índice del dólar, que es un indicador que evalúa el comportamiento de la divisa y lo coteja con otras 6 monedas, hoy registra una variación de 0,06% y se ubica sobre las 102,960 unidades.
¿Cómo se mueven los mercados este 9 de agosto?
Las bolsas europeas cerraron el viernes en verde tras una sesión tranquila que pone fin a una semana muy volátil por el temor a una recesión en Estados Unidos.
París subió 0,31%, Londres 0,28%, Fráncfort 0,24%, Milán 0,13% y Madrid 0,76%.
La bolsa de Nueva York cedía ligeramente en la apertura el viernes, sin poder continuar la recuperación del jueves al final de la semana más volátil del año.
El Dow Jones perdía 0,24%, el tecnológico Nasdaq bajaba un marginal 0,06% y el S&P 500 0,04% en los primeros intercambios.
El Producto Interno Bruto (PIB) de Rusia creció un 4% interanual en el segundo trimestre del año, en un contexto de repunte de la inflación en una economía accionada por los pedidos militares, según datos oficiales divulgados el viernes.
Ese crecimiento fue inferior al del primer trimestre (+5,4%), pero sigue siendo significativo y permite a Rusia jactarse de haber sorteado las sanciones que le impusieron las potencias occidentales después del inicio de su intervención militar en Ucrania en febrero de 2022.
El sector militar se ha convertido desde entonces en el principal motor de la economía rusa.
El crecimiento, que se sustenta en el fuerte aumento de los pedidos militares para apoyar la operación en Ucrania y en las abultadas primas abonadas a los soldados y a sus familias, sirve de combustible a una espiral inflacionaria que preocupa a las autoridades.
El aumento de precios interanual alcanzó el 9,3% en julio, su nivel más alto desde febrero de 2023 y muy por encima de la meta oficial del 4%, según la agencia nacional de estadísticas Rosstat.
También pesa en la economía la escasez de mano de obra provocada por el envío al frente de cientos de miles de rusos o la partida al extranjero de numerosos ciudadanos para evitar la movilización militar anunciada en octubre de 2022.
El Banco Central de Rusia elevó en julio de 6,5% a 7% su previsión inflacionaria de 2024 y subió de 16% a 18% su tasa de referencia para controlar el aumento de precios. El FMI prevé un crecimiento del PIB ruso de 3,2% en 2024.