REMESAS
Educación de los hijos en el exterior está moviendo la salida de remesas. Emigración por estudios fuera del país ha aumentado 35%
Y ahora con el dólar caro se le aprieta la responsabilidad a los padres. Estudio de la fintech Global66.
Colombia tiene en aumento la migración de jóvenes que buscan oportunidades educativas en el exterior. Algunos se van para países en los que la educación es gratuita, pero los padres tienen que meterse la mano al bolsillo para enviarles remesas, principalmente en dólares, pues los principales destinos elegidos por los estudiantes son Canadá, Estados Unidos y Australia.
Si bien en Colombia la entrada de remesas también está creciendo, pues mes a mes se acerca a los mil millones de dólares (en abril la cifra del Banco de la República fue de 929,3 millones de dólares); la de envío de remesas no se queda atrás.
Una de las principales razones para la salida de dinero desde Colombia hacia el exterior es la educación, que representa el 12 % del total, según datos del informe presentado por la fintech Global66.
Se trataría de dos millones de dólares en remesas que han salido del país con fines educativos, mientras que el total de recursos enviados al exterior, en los tres primeros meses del año, es de 18 millones de dólares, según el análisis de la fintech.
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Los otros fines del envío de dinero hacia otros países, desde Colombia, son las transacciones relacionadas con negocios o pago para envío de mercancía.
Estudiantes en el exterior, en aumento
En el informe de Global66 se citan las cifras del Ministerio de Educación, según las cuales, el número de estudiantes colombianos que han emigrado al exterior para continuar sus estudios, ha aumentado en un 35 % en los últimos cinco años.
Y no es para menos. Cada vez es más frecuente que a los jóvenes, cuando están en proceso de formación universitaria en el país, se les exija un segundo idioma. De esa manera, este fin sería uno de los que mueven a los padres a enviarlos al exterior. Pero también se van en busca de mejores oportunidades, luego de realizar su pregrado, pues los salarios que encuentran en el mercado laboral colombiano no les dan para vivir y enfrentar las nuevas realidades de su vida, ya como profesionales en ejercicio.
El riesgo es que los jóvenes se queden en los países que eligen como destino educativo, pues eso haría que cada vez haya menos juventud en esta nación.
Regiones con más emigrantes educativos
Según las conclusiones del estudio sobre envío de remesas con fines educativos, Bogotá, Medellín y Barranquilla son las principales ciudades que priorizan el envío de las sumas de dinero para la educación. El fenómeno de migración educativo, según el informe, es impulsado por programas educativos de alta calidad que atraen a los jóvenes colombianos, quienes, no obstante, requieren el apoyo de sus padres para la manutención en el extranjero. Al menos, al inicio, pues muchos optan por conseguir empleo en el país de destino, aunque sea en puestos muy distintos a los de su formación básica.
Santiago Mejía, Country Manager de Global66 Colombia, afirma que “las remesas son claves para la economía de las familias del país y el futuro de los jóvenes. El envío de este dinero representa una oportunidad de salir adelante, obtener títulos profesionales, y ser ciudadanos globales”, como lo exige ahora la competitividad.
Gasto promedio
Sea cual sea el destino educativo del joven, las remesas suelen enviarse en dólares, como moneda de intercambio, lo que hace que el aumento en el precio de la divisa que se ha registrado en los últimos días en Colombia, apriete el bolsillo de las familias.
Un estudiante que haya escogido como destino educativo a un país como Canadá puede llegar a gastar entre 600 y 1.000 dólares al mes, según LAE International Education, citado por la fintech Global66. Además, existen muchos países en los que no es fácil que los jóvenes obtengan permisos para trabajar, cuando se supone que van por estudios, con visa estudiantil.
Así las cosas, las remesas están poniendo su grano de arena para mover el dinero, tanto de allá para acá, como al contrario.