ECONOMÍA
“El robo a Ecopetrol puede alcanzar los 360.000 millones de pesos”: presidente Petro
El mandatario pidió investigar si hubo personas al interior de la compañía que participaron en hechos delictivos.
El presidente Gustavo Petro se refirió este miércoles 26 de julio nuevamente a la investigación que adelantan varias entidades sobre un caso de contrabando de petróleo que era extraído de forma ilegal del oleoducto Caño Limón-Coveñas de Ecopetrol.
Las autoridades investigan una compleja operación en la que, con apoyo de la guerrilla del ELN, eran extraídos miles de barriles de petróleo directamente del oleoducto Caño Limón-Coveñas, de Ecopetrol, para ponerlos en un gigantesco buque en alta mar, mezclarlo con operaciones legales, darle esta apariencia y luego venderlos de nuevo a la compañía.
Horas antes, el mandatario señaló que este caso es uno de “los mayores robos al Estado colombiano” y pidió investigar si hubo personas al interior de Ecopetrol que participaron en hechos delictivos.
“Se robaron cerca de 80 millones de dólares en petróleo y los delincuentes eran ‘gente de bien’ de los sectores más pudientes del país. Debe investigarse si el robo contó con apoyos al interior de Ecopetrol”, dijo el presidente Petro.
La investigación
Luego de un arduo trabajo con interceptaciones telefónicas, fotografías satelitales, entre otros elementos materiales probatorios, se logró la incautación de bienes de por lo menos 17 empresarios colombianos.
Las compañías de estos empresarios están involucradas en una investigación transnacional, la cual en Colombia incluye dos procesos. Uno criminal y el otro de extinción de dominio, notificado el 18 de mayo pasado.
La incautación de barcos, un lujoso edificio en Cartagena, carros de lujo, megalotes, casas de veraneo y demás bienes, que ocurrió en cinco departamentos de Colombia, está avaluada en más de $ 1,3 billones.
Así mismo, continúa el proceso de acusación contra los empresarios por los delitos de concierto para delinquir, apoderamiento de hidrocarburos y falsedad en documento privado. Esto se da luego de una larga investigación de hombres de la Dijín que desenmascararon una gigantesca operación criminal con petróleo que era hurtado desde los mismos oleoductos.
El proceso de investigación empezó con las misteriosas entradas y salidas de buques petroleros con bandera panameña, que se cargaban en puertos de la costa Caribe y tenían como destino Singapur, Ámsterdam y otros lugares en Asia y Europa.
Las agencias de inteligencia reportaron al país una carga equivalente a un millón de barriles de petróleo colombiano por mes, que costaban cerca de USD 10 millones, pero no figuraban en los registros de exportaciones.
En ese sentido, según los cálculos de los investigadores, que analizaron la operación continuada de hurto de petróleo, se trataba de más 20 camiones cisterna, con capacidad para 12.000 galones, que se cargaban con petróleo venezolano en Maracaibo, Cabimas y La Raya en el estado Zulia (Venezuela).
Posteriormente se llevaba hacia Colombia y se mezclaba con el que se obtenía ilegalmente del oleoducto Caño Limón-Coveñas, perjudicando de esta manera las finanzas de Ecopetrol, que aparece como víctima dentro del proceso con Cenit, y Swiss Terminal Barranquilla S.A.S.
Así las cosas, se utilizó el nombre de varias empresas legales, con reconocimiento en el sector de transporte, almacenamiento y exportación del crudo, para evitar sospechas.
Entre las empresas que aparecen en el expediente está Gunvor Colombia S.A.S., una sucursal de la multinacional Gunvor Group con matriz en Ámsterdam, que se dedica a los negocios de energía y al comercio, transporte y depósito de productos petrolíferos.
La sede de la compañía en Bogotá registra activos por $ 381.000 millones y su representante es el empresario Jaime Alejandro Hoyos Juliao, quien posee una participación en una casa de veraneo en Anapoima (Cundinamarca), comprada en octubre de 2021 por $ 801 millones, que también fue incautada.
La investigación con la cual se está judicializando a los protagonistas de este megarrobo señala que Gunvor Colombia comercializó internacionalmente el crudo de la investigación, luego de haberlo recibido a Niman Commerce S.A.S., su proveedor.
Esta última compañía aparece representada por Hernando Silva Bickenbach, miembro de una prestigiosa familia colombiana y catalogado como uno de los principales dinamizadores de la compra, venta y recepción de hidrocarburos bajo investigación.
Según la investigación, esta empresa tiene un gran músculo financiero, por lo que, por medio de Niman Commerce S.A.S., puede ser el principal comprador de hidrocarburos provenientes de organizaciones sin autorización para su comercialización.