Fenómeno de la Niña: estas son las regiones donde se sentirá más fuerte

Las lluvias que vienen azotando diferentes regiones del país, en las últimas semanas, son el presagio de un nuevo fenómeno de la Niña, que se sentirá durante el último trimestre del 2020.

La segunda temporada de lluvias del año, según confirmó el Ideam, se presentará con valores por encima del promedio para estos meses, especialmente en las regiones Caribe, Andina y Pacífica, debido al enfriamiento continuo de las aguas del océano Pacífico tropical.

Sin dudas, las condiciones meteorológicas presentadas en septiembre pasado fueron una transición hacia un periodo con mayores precipitaciones, que se podría extender hasta finales de este año o incluso a la primera parte del 2021, según los modelos de predicción climática de los centros internacionales.

De hecho, esta situación llevó al Ideam a lanzarle un campanazo de alerta a las autoridades nacionales y territoriales. Les recomendó “activar los planes de prevención y contingencia frente a la probabilidad de presencia de inundaciones, avalanchas, crecientes súbitas y deslizamientos de tierra”, sobre todo para aquellos barrios ubicados en laderas y zonas ribereñas.

Fenómenos como este no se pueden evitar, pero las acciones que se tomen sí pueden hacer la diferencia, sobre todo para los hogares y productores que están en zonas de alto riesgo. De acuerdo con la autoridad meteorológica nacional, el aumento de las lluvias será gradual en los meses que restan del 2020.

En octubre, por ejemplo, las precipitaciones serán de hasta un 50 por ciento más de lo normal en el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina. De igual forma, se recomienda prestar una mayor atención en departamentos como La Guajira, Magdalena, Atlántico, Bolívar y una parte de Cesar, así como Santander, Antioquia, Eje Cafetero, Boyacá, Cundinamarca, Huila, Valle, parte del Cauca y parte del Chocó.

Hacia noviembre se prevén precipitaciones por encima de los promedios históricos en gran parte de las regiones Caribe, Andina y Orinoquía, mientras que en diciembre se sumaría la zona norte de la región Pacífica.

Campo, a estar preparados

Como se ve, buena parte del país estará afectado por el aumento de lluvias en el cuatro trimestre del año. “En el caso de Colombia, ‘La Niña’ favorece que las lluvias sean mucho más intensas y, por tanto se incrementa el caudal de los ríos, hay una mayor probabilidad de deslizamientos de tierra en las zonas de alta montaña y reducción de las temperaturas durante el día”, aseguró Jhon Jairo Valencia, meteorólogo de la Federación Nacional de Cultivadores de Cereales, Leguminosas y Soya (Fenalce).

No obstante, esta situación también tiene a los productores del campo en alerta, pues hay diferentes sectores que tienen cosechas en este periodo y puede perderlas.

De hecho, el derrumbe en una vía de Antioquia llevó a algunos campesinos a tener que botar una leche recoletada, desperdiciando miles de litros de este líquido. La razón es que no hay cómo sacarlo, con lo cual desecharlo es la única salida que les queda.

Según Jorge Bedoya, presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), los productores ya están tomando las medidas de prevención y mitigación de cara a este fenómeno natural. “Las consecuencias mayores, como está sucediendo en Antioquia puede presentarse en otros lugares”, dijo.

Y añadió que “por eso insistimos en el tema de las carreteras, pues hoy en día, entrado en esta posibilidad de la Niña, es muy difícil que se arreglen las vías, pero es oportuno llamar la atención de esa necesidad de atender una deuda histórica del Estado colombiano”.

Bedoya indicó que en lo que resta del año habrá cosechas de arroz y papa en algunas zonas de producción, pero también algunos cultivos permanentes, como el café, el aguacate, la caña panelera y la leche.

Una historia dura

Esto llama la atención, pues una ‘Niña’ de alto impacto puede ser de devastador para el sector agropecuario, que, entre otras, ha sido determinante en esto meses de pandemia. Gracias a los campesinos y toda la cadena, los hogares colombianos tuvieron garantizado el abastecimiento en todas las regiones.

Si las lluvias llegan con una potencia mayor a la esperada, el país podría repetir capítulos de la historia que han sido desfavorables para la población, el sector privado y el empleo. Durante los últimos 25 años, Colombia ha sido afectada cuatro veces por el fenómeno de ‘La Niña’: entre julio de 1998 y marzo del 2001, de agosto de 2007 a junio del 2008.

El más fuerte ocurrió entre junio del 2010 y mayo del 2011. Según cuentas del Gobierno, su paso por el país ocasionó daños de un 2 por ciento del PIB. En tanto, Fenalce recuerda que solo en inundaciones, quedaron bajo el agua 3,5 millones de hectáreas, de las cuales 693.000 fueron pastos de ganadería, 416.000 hectáreas de áreas agrícolas, 46.000 de cultivos transitorios y 10.000 hectáreas de cultivos permanentes.

El último fenómeno reportado fue entre junio del 2011 y marzo del 2012, con una duración de ocho meses.