Gasolina, ACPM y tiquetes aéreos subirían en todo el país por la reforma tributaria; gas también sufriría las consecuencias

El país aún no se recupera en su totalidad del coletazo causado por el reciente paro de transportadores, aunque el gobierno y el comité lograron llegar a un acuerdo, las modificaciones de los costos para los insumos básicos siguen la palestra de la nación.

La reciente reforma tributaria radica por el Ministerio de Hacienda buscaría aumentar los costos de los insumos, impactaría directamente a los sectores comerciales dedicados al transporte aéreo y terrestre pero, además, podría causar una crisis para el turismo del país.

Dentro de la polémica reforma se destaca el artículo 21, el cual modificaría el artículo 222 de la Ley 1819 de 2006, el cual señala: ”El impuesto nacional al carbono tendrá una tarifa específica considerando el factor de emisión de gases de efecto invernadero (GEI) para cada combustible determinado”. La modificación generaría que el impuesto al carbono de la gasolina pasará de $ 186.37 a $ 658.9 por galón ($ 472.5 más).

Esto, en términos de oferta y demanda, generaría que la gasolina que utilizan la mayoría de colombianos pasará los 16.000 pesos por galón.

En la propuesta de la reforma tributaria se modificarían los valores de la tarifa de las unidades combustibles. El ACPM tendría un valor de 210.63 por galón y el gas natural por metro cúbico llegaría a los 39.70. Estos valores no fueron ajustados en el 2023, por tal razón serían el objeto principal de la propuesta y de esta manera reajustar el presupuesto del país.

De aprobarse esta reforma, el costo de funcionamiento subiría de una manera exponencial y llevaría a varias empresas del sector a realizar modificaciones en sus propuestas de negocios, para apalear los efectos negativos de las nuevas cargas tributarias.

Esta propuesta plantea el aumento del 4 % en la factura del gas natural, esto afectaría directamente a los más de 11 millones de usuarios en la nación, generando mayores costos de vida a las familias del país y a los sectores comerciales que dependan de este recurso.

Ahora, el controversial combustible JetA1, que causo un inicio de crisis en el sistema aérea del país, también tendría un remesón drástico. El galón del insumo pasaría de los 254.22 pesos y llegaría a los 658.9. Esto llevaría a las compañías a aumentar los tiquetes aéreos en todo el territorio, llevando el debate entre costo y beneficio a panoramas inesperados.

Si esto no fuera suficiente, la propuesta llevaría a modificar estos valores cada año, generando un crisis en los costos de producción. La iniciativa, sin dudas, tendría que ser analizada por los sectores económicos del país para que puedan revisar puntos medios de concertación, pero las propuestas de campaña del Gobierno Petro, una vez más, se caerían por su propio peso.

Esta propuesta llega a menos de una semana de los acuerdos alcanzados con los sectores mayoritarios de transporte de carga en el país, lo que podría generar una reacción en cadena en el país y llevar a diferentes empresas a pensar en las mismas vías de hecho.

El gobierno actual ha indicado que debe generar mayores ingresos para la Estado, con el fin de no afectar los presupuestos del el año venidero, pero hasta ahora las propuestas no logran causar una respuesta positiva por parte de sus electores y los sectores de oposición.

Las respuestas a esta nueva iniciativa no se han hecho esperar. Sin duda, el tema será prioritario en la agenda pública del país, y más en la búsqueda de nuevas alternativas económicas que permitan dar cumplimiento al plan de acción del gobierno de turno.