ENTRETENIMIENTO

Hollywood enfrenta una ola de despidos: el auge de plataformas y el coronavirus los puso en jaque

La pandemia ha acelerado cambios en el consumo del entretenimiento y, como consecuencia, los grandes conglomerados del cine y la televisión se replantean sus ideas de negocio. En el camino, cientos de personas han perdido su empleo.

26 de noviembre de 2020
Los grandes conglomerados del cine y la televisión se replantean sus ideas de negocio. En el camino, cientos de personas pierden su empleo.

Hace 10 años era claro que los ciudadanos del mundo seguían consumiendo la programación de los canales de televisión de una manera masiva. Pero hoy, los hábitos de consumo se han vuelto cada vez más personalizados.

De hecho, salvo que haya un evento deportivo, la idea de tener a muchas personas conectadas a un mismo canal, a una misma programación y a una misma hora, es más una idea del pasado que del presente.

Este cambio en el consumo del entretenimiento, aunque latente hace varios años, se ha acelerado con la pandemia del coronavirus.

Con los cines y teatros cerrados, las plataformas de streaming han tomado más fuerza que nunca, pues no solo permiten consumir contenido desde la comodidad del hogar, sino que ofrecen títulos bajo demanda, es decir, cada usuario puede decidir qué ver sin atenerse a la programación de un canal de televisión o a la película que hay en cartelera.

Así como la crisis sanitaria ha acelerado el cambio en el comportamiento del consumidor, también ha tenido un efecto negativo en los empleos de la industria tradicional del entretenimiento. Hollywood es prueba de ello.

La meca del cine ha sufrido una pérdida masiva de empleo en los últimos meses. Por un lado, la productora de cine y televisión Warner Bros se ha visto sacudida por dos rondas de despidos y una reestructuración, que ha estado marcada por la salida de veteranos de la industria.

NBCUniversal ha reconfigurado la estructura de sus operaciones de producción y distribución de contenido televisivo, lo que ha provocado cientos de recortes de personal.

El estudio Lionsgate también anunció que despedirá al 15 % del personal en su división de películas, a medida que la compañía se adapta a los cambios masivos en el negocio del cine.

Discovery Inc., Sony Pictures, ViacomCBS y AMC Networks también dejaron ir a un número considerable de empleados en 2020.

Aunque los despidos son difíciles para cualquier empresa, esta ronda de recortes entre las grandes productoras de la industria del cine y la televisión reflejan una transición y un cambio trascendental en sus modelos de negocio.

Según varios analistas, este es un cambio doloroso pero necesario. “Hemos dicho que en algún momento los estudios tendrían que repensar sus modelos de negocio, y ahora realmente lo están haciendo”, dijo Michael Nathanson, analista de medios de MoffettNathanson, a la revista Variety. “Creo que estas empresas deberían haber planeado este giro antes”.

Esta ola de despidos se produce mientras los principales conglomerados rediseñan sus operaciones para lanzar plataformas de streaming pagas y gratuitas diseñadas para llegar a audiencias globales.

Para las productoras que durante mucho tiempo han priorizado los estrenos en cines, este cambio puede no ser fácil. Pero algunos de los principales estudios se están reorganizando para priorizar esta nueva forma de consumo, incluidos Walt Disney, con su Disney+.

Ahora los conglomerados y productoras necesitan un tipo de experiencia y enfoque en programación, marketing, distribución y ventas diferente al tradicional.

“Estamos pasando a la era de la personalización, donde el consumidor es el centro del modelo comercial. Este cambio está afectando a todos los niveles de empleados y se ve agravada por la percepción de que una vez que alcanzas una cierta cantidad de años de experiencia, es más difícil encontrar la próxima oportunidad”, dijo Jay Tucker, director ejecutivo en UCLA, a Variety.

Así, los ejecutivos con experiencia en marketing y distribución se han visto muy afectados en la mayoría de los estudios porque estas disciplinas están cambiando radicalmente en la época del streaming, pues el arte de hacer que los consumidores paguen una suscripción mensual es diferente a hacer una película que las personas verán en el cine en un fin de semana.

Con este panorama, los estudios, productoras y conglomerados están acelerando sus procesos y haciendo una reestructuración para evitar que se repita la historia de BlockBuster o Betatonio, quedar obsoletos en este mundo cambiante.