Atención: MinTransporte confirma que peajes sí subirán en enero de 2024. Así será el cobro

Tal como estaba previsto, enero llegará con el alza en el precio de los peajes. El Ministerio de Transporte destapó de nuevo el decreto, en el que se señala que el primer mes del año arrancará el incremento, teniendo en cuenta que se acumularon dos, uno por 2023 y el de 2024.

El atrasado se debe a la medida de congelamiento aplicada por el ministerio, para tratar de evitar que se presionara más la alta inflación que reinó en los inicios del año.

El segundo es el habitual, el que debe hacerse por norma en el inicio de cada año.

Hay que recordar que las reglas establecidas indican que estos aumentos se hacen con la inflación del año anterior. Es decir, el aumento de 2023 sería con el IPC de 2022, que fue de los más altos de los últimos tiempos: más del 13 % (13,12 %).

El argumento expuesto por el Ministerio de Transporte, en el borrador del decreto, “los índices macroeconómicos de los últimos meses han indicado una estabilidad inflacionaria en el costo de vida de la canasta familiar”.

Por esa razón, agregaron que “se hace necesario que el Ministerio de Transporte establezca las disposiciones para el incremento gradual” anunciado este mismo año, que finalmente no se pudo dar, pues si se juntaban, implicaría un costo muy alto para los usuarios de las carreteras, principalmente del transporte de carga, segmento que transporta mercancías de un lado a otro, por lo cual cualquier alza tiene un efecto dominó sobre todos los productos, en particular los de la canasta familiar.

En el borrador de decreto, el ministerio recordó que tiene la competencia permanente para establecer las tarifas de peaje a vehículos que transiten por el territorio nacional por las estaciones de peaje a cargo del Instituto Nacional de Vías (Invías) y de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI).

Los recursos que se recaudan con los peajes son los que permiten a los concesionarios financiar nuevas obras de conectividad terrestre, por lo cual, en el caso de las empresas que hacen inversiones con recursos privados o a través de las alianzas público-privadas (plata del sector público sumada con la de los particulares), es imprescindible el cobro y alza en el precio de los peajes.

¿Cómo será el cobro?

Uno de los mecanismos que utilizará el ministerio, según el borrador del decreto, para que el golpe no sea tan duro (si se hubiera aplicado de una sola vez, los dos años juntos, el aumento sería cercano al 23 %) es que se entrega la instrucción para que el incremento gradual se aplique “a más tardar el 31 de diciembre del año 2024″, fecha en la cual la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) finalizará la normalización del esquema tarifario estimado para ese momento, según las condiciones contractuales de cada caso, dice el borrador.

Con la venia de MinHacienda

En el escenario en el cual el Ministerio de Hacienda es el rector de la política económica, y el vigilante de que se impulse el crecimiento y se enderece el barco para que los colombianos no tengan tanto impacto en el bolsillo, como para que lleguen a frenar más el consumo, esa cartera será un órgano consultivo, al igual que el Dane, antes de la expedición de las resoluciones de incremento gradual de las tarifas de peaje, según dice el borrador.

La disyuntiva con el hecho de haber congelado el cobro del peaje al inicio de este año es la necesidad de recuperar los recursos que se dejaron de cobrar, toda vez que en medio están contratos suscritos con concesionarios que pusieron recursos para financiar la construcción de vías en el país.

Ahora, los colombianos tendrán que afrontar esta y otras alzas al inicio del próximo año, en medio de una economía desacelerada y con la incertidumbre de lo que podrá venir en materia de precios, pues, hay que recordar que en el primer mes de 2024 también vendrá un nuevo incremento en el costo del galón de gasolina y está en capilla el aumento del diésel, combustible al que no le han aplicado ni un solo incremento, pese al hueco en el fondo de estabilización de precios de los combustibles, precisamente, para tratar de evitar el impacto que pueda tener en la inflación.