Analistas esperan que para el 2021, los mercados sonrían para empresas de tratamientos y vacunas contra la covid-19, así como biotecnológicas como Moderna o Regeneron. | Foto: iStock

MERCADOS

Nueva cepa de coronavirus: Wall Street cae por temores mundiales

Las principales bolsas en EE. UU. sienten el temor que proviene desde el Reino Unido por la nueva cepa de covid-19. ¿Qué se puede esperar para 2021?

21 de diciembre de 2020

La Bolsa de Nueva York registra pérdidas este lunes poco después de su apertura, con un mercado preocupado por una cepa más contagiosa del coronavirus en Reino Unido e ignorando el acuerdo en el Congreso estadounidense sobre un nuevo plan de ayuda económica.

A esta hora, el Dow Jones pierde 0,54 % y el Nasdaq de tecnológicas 1,47 %. Por su parte, el S&P 500 registra una caída de 1,28 %

El viernes, el índice principal Dow Jones cerró en 30.179,05 puntos con caída del 0,41 %, y el tecnológico Nasdaq perdió 0,07 % a 12.755,64 unidades. El S&P 500 cerró en baja de 0,35 % a 3.709,41 puntos.

Nueva cepa

La aparición en el Reino Unido de una nueva cepa del coronavirus, presentada como más contagiosa que las otras, generó una fuerte preocupación en Europa. Pero nada parece indicar que esta variante provoque síntomas más graves de la enfermedad o que sea resistente a las vacunas, subrayan los expertos.

Los virus, como seres vivos que son, están dotados de material genético (ADN o ARN), que puede estar sujeto a modificaciones cuando se replican (mutaciones) en las células en las que se propagan o por intercambios entre virus (recombinaciones). En general, esto no suele acarrear consecuencias, pero las mutaciones también pueden darle al virus una ventaja o desventaja para su supervivencia.

“Existen seguramente miles de variantes”, recordó Emma Hodcroft, epidemióloga en la Universidad de Berna.

“Lo más importante es intentar saber si esta variante tiene propiedades con un impacto en la salud de los humanos, en los diagnósticos y en las vacunas”, apuntó Julian Hiscox, profesor de infectología en la Universidad de Liverpool, citado por Science Media Centre.

Un año turbulento

“El año de todos los extremos” en Wall Street, resume de manera concisa Quincy Krosby, jefa de estrategia de mercado de Prudential Financial.

Desde el pánico que irrumpió en la bolsa con la llegada del virus a Estados Unidos hasta la esperanza de una salida con la aparición de las vacunas, ofrecemos aquí un recorrido por los grandes momentos del año bursátil, que se movió al ritmo de la crisis sanitaria y económica.

Después de un enero y febrero bastante tranquilos, Wall Street colapsó en marzo, asustado por la propagación del coronavirus y sus consecuencias para la mayor potencia del mundo.

El Dow Jones experimentó la peor sesión de su historia el 16 de marzo (-13 %) después de la Gran Depresión de 1929 y el crack de octubre de 1987.

Esta caída hizo que Wall Street se convirtiera, a mediados de marzo, en “mercado bajista”, término en la jerga bursátil que caracteriza una caída de más del 20 % respecto al último récord.

La perspectiva de una parálisis de la economía estadounidense y el temor a una crisis de liquidez enfriaron a los inversores.

Si las empresas no pueden reunir el dinero para sobrevivir y quiebran o despiden, la tasa de desempleo se dispara”, dice Krosby.

Sin embargo, la comunidad empresarial rápidamente recuperó la sonrisa ante la política monetaria de la Reserva Federal, que continuó bajando sus tasas y lanzó un amplio programa de compra de activos. La rápida intervención del Gobierno, que votó a finales de marzo un gigantesco plan de estímulo de 2,2 billones de dólares, también llevó tranquilidad a los mercados.

La recuperación de Wall Street se confirmó en la primavera boreal y se aceleró en el verano cuando la economía reabrió y el mercado recuperó en agosto niveles cercanos a los previos a la pandemia.

Impulsores de este crecimiento, los gigantes tecnológicos experimentaron un ascenso fulgurante: entre abril y septiembre, los títulos de Alphabet (empresa matriz de Google), Facebook, Amazon, Microsoft y Apple se dispararon, esta última con un aumento de más del 80 % en ese periodo.

El atractivo de estos grupos obedece –según Krosby– a que “son empresas de renombre, las mejores en sus categorías y la demanda de sus productos y servicios es fuerte”.

Otros nombres, hasta entonces menos conocidos por el gran público, entraron a través de la brecha abierta por la pandemia, incluida la plataforma de videoconferencias Zoom, que floreció con la generalización del teletrabajo.

Las marcas de productos de limpieza (Procter & Gamble, Clorox) o productos alimenticios (Hershey, Hormel) también obtuvieron buenos resultados.

Los pequeños operadores invirtieron mucho en el mercado de valores durante el confinamiento, contribuyendo a un aumento de acciones populares, como la de Tesla.

Pero la pandemia continuó su trabajo destructivo, el costo humano aumentó y la recesión se instaló a finales de julio en Estados Unidos.

En el mercado de valores, los sectores más afectados debido a las restricciones por el virus fueron las líneas de cruceros, grandes petroleras, aerolíneas, casinos y hoteles.

Tendencias 2021

El lanzamiento de la campaña de vacunación en Estados Unidos deja entrever mejores días para la economía estadounidense y promete un brillante futuro al sector de la salud en la Bolsa.

Líderes en el desarrollo de tratamientos y vacunas contra la covid-19, biotecnológicas como Moderna o Regeneron deben seguir progresando.

Los grandes grupos informáticos deben, por su parte, obtener beneficios de la demanda creciente por tecnologías como la informática a distancia (la nube), la inteligencia artificial o la 5G.

El medioambiente, prioridad de la nueva administración Biden, seguramente también interesará a numerosos inversores.