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Por el desabastecimiento generado en China, alimentos como café, ropa, insumos de construcción y tecnología tienen más pedido. | Foto: ALEJANDRO ACOSTA

NEGOCIOS

Oportunidades sí hay... en medio de la crisis del covid-19

En medio de la crisis provocada por el covid-19 en algunos sectores productivos, se pueden encontrar maneras creativas de hacer negocios en sectores tradicionales y en los de la nueva economía. ¿Cuáles son?

21 de marzo de 2020

Cada crisis trae su oportunidad. La pandemia tiene al mundo en vilo, a la economía en cuarentena y a los trabajadores al borde de un ataque de nervios, pero no será la excepción.

Hasta ahora, esta tragedia se ha ensañado con algunos sectores como el turismo, el transporte aéreo, el entretenimiento y la movilidad. Pero otros han logrado reponerse del shock y con innovación y resiliencia empiezan a mitigar los impactos negativos. Sin duda, industrias como la farmacéutica, alimentos, comercio, producción y distribución de bienes y servicios básicos e incluso la de comercio electrónico y entretenimiento en el hogar llegan a suplir las necesidades de un consumidor cada vez más nervioso.

No en vano, las acciones de empresas globales de entretenimiento doméstico, como Netflix, Apple y Amazon, o las que ofrecen soluciones de trabajo remoto, como Slack y Microsoft, siguen creciendo en la bolsa, mientras que la mayoría de valores caen. Este jueves, en medio de la debacle de los valores en bolsa por el coronavirus, la acción de Netflix crecía 5,25 por ciento; la de Slack –especializada en soluciones de trabajo remoto– subía 16,6, y la de Amazon, 2,78. La desarrolladora de juegos para celulares Zynga creció ese día 2,58, y el servicio de videoconferencias Zoom Video Communications se valorizaba 4,26 por ciento. Nada mal para un día en que las bolsas colapsaron.

En Colombia también algunas compañías han empezado a identificar oportunidades en medio del caos. Tras el lento ritmo con el que China se recupera de la epidemia que enfrenta desde enero, algunas de las principales firmas industriales de Estados Unidos buscan cambiar de proveedores y empiezan a mirar hacia América Latina.

El ministro de Comercio, José Manuel Restrepo, explica que en las últimas semanas ha crecido el número de empresarios colombianos que reciben llamadas de compradores de Estados Unidos que necesitan variados productos: desde prendas de vestir y partes para vehículos hasta alimentos.

JOSÉ MANUEL RESTREPO. Ministro de Comercio

Todo indica que, debido a que China tuvo que parar por varias semanas su actividad productiva, cayeron los inventarios de muchos artículos. Es decir, se interrumpieron las cadenas de valor. Ante este desabastecimiento o menor flujo de mercancías, varias industrias han decidido cambiar su estrategia y diversificar el riesgo al ampliar la lista de proveedores.

Y para muchas compañías de Estados Unidos Colombia es un buen proveedor, dice la directora de la Cámara Colombo Americana, María Claudia Lacouture. Menciona que entre las industrias de Estados Unidos interesadas se encuentran la de construcción, textiles, tecnología, derivados de acero, partes para automóviles y semiconductores, entre otras. Pero cree que los empresarios nacionales no deben limitarse a esos sectores, sino que necesitan desempolvar su tarjetero y retomar la lista de clientes que en el mundo buscan productos.

CAROLINA DURÁN. Secretaria de Desarrollo de Bogotá

Lacouture, exministra de Comercio, asegura que los colombianos deben aprovechar las ventajas de la tecnología y poner en marcha acciones de política que generen ruedas de negocios virtuales para exportar más. Un buen ejemplo de este tipo de iniciativas es la macrorrueda de negocios virtuales que comenzó esta semana en el país, organizada por ProColombia y el Ministerio de Comercio. Durante dos semanas permitirá que cerca de 2.200 exportadores colombianos de 23 departamentos tengan 13.000 citas de negocios. Son más de 800 compradores –58 países– de productos como agroalimentos, metalmecánica, químicos, industrias 4.0 y sistemas de moda.

MARÍA CLAUDIA LACOUTURE. Directora de AmCham

Capital de oportunidades

En Bogotá varios sectores han identificado posibilidades. No se trata de oportunismo ni especulación, sino de estar atentos al comportamiento y las necesidades del mercado. Entre los grupos que visualizan nuevas oportunidades están los fabricantes de calzado del barrio Restrepo, que pueden sustituir las importaciones de China. También, los fabricantes de vitaminas y suplementos alimenticios, y las firmas especializadas en teletrabajo y formación en línea.

Carolina Durán, secretaria de Desarrollo Económico de Bogotá y experta en emprendimiento, está segura de que las start-ups están entre las más resilientes de la capital. En especial, las que permiten hacer cosas a distancia como trabajar, educar, recibir atención médica, comprar, entretener y, en general, desarrollar actividades relacionadas con temas tecnológicos y digitales. “El emprendedor es resiliente por naturaleza y ve las oportunidades aun en los escenarios más difíciles y adversos. Son creativos y ágiles”, afirma.

El caso de Rappi ilustra bien cómo innovan. Esta firma de mensajería dispuso de domicilios gratuitos para empresas que se acogieron al trabajo en casa por medio de Rappi Prime. También desarrolló una plataforma para que la Gobernación de Cundinamarca y el Distrito proporcionen datos de utilidad para la comunidad en medio de la pandemia.

Algo similar hizo Chiper para la Alcaldía de Bogotá al desarrollar una aplicación que permite conocer en tiempo real casos de desabastecimiento de más de 2.000 tiendas de barrio.

La oferta es muy variada. Mediante la aplicación de inteligencia artificial, 1DOC3 ofrece un sitio exclusivo para que las personas puedan validar los síntomas e identificar el riesgo de tener el coronavirus, lo que evita consultas al sistema de salud que puedan saturarlo. Solo en los últimos días las asesorías médicas virtuales en 1DOC3 han crecido un 459 por ciento. Allí se puede consultar desde 4.900 pesos y chatear con un médico por 9.900 pesos la sesión.

Por esto, la Alcaldía Mayor, en alianza con Invest in Bogotá, lanzó un programa para buscar emprendimientos que ofrezcan servicios para facilitar la vida de las personas en medio de la emergencia. Ya han salido algunas iniciativas interesantes.

Es el caso de una aplicación que agrupa más de 700 gimnasios con una única suscripción, a través de Fitpal Home. Esta permite a los usuarios acceder por videollamadas a actividades físicas, clases digitales de meditación y talleres de nutrición desde sus casas.

Otra plataforma desarrollada por Maestrik se enfoca en encontrar profesores por internet para reforzar o enseñar más de 320 temas. Coursera y Ubits abrieron sus cursos nacionales e internacionales en línea, mientras que Arukay y Menso ofrecen formación en código para menores de 6 años.

También desarrollaron la app Veterinario Online para quienes buscan asesoría en salud para sus mascotas, por sistema de videollamada, las 24 horas del día, sin salir de casa.

La secretaria de Desarrollo cree que este también puede ser un buen momento de reflexión para que las empresas y sectores se transformen digitalmente. Y tanto el Distrito como el Gobierno nacional han dispuesto líneas de apoyo y fomento.

Muchos líderes llaman hoy para convertir la crisis de la pandemia en una bendición. Y muchos empresarios y emprendedores exitosos pasan cada día de pensar en cuál es el problema a trabajar en cómo resolverlo.