PROYECCIONES

Optimismo moderado en lo económico para 2020

El decano de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Antioquia, Sergio Restrepo, explica que a pesar de que se mantendrá la recuperación, hay que tener cuidado en el frente fiscal y un sector externo con grandes incógnitas.

13 de diciembre de 2019

Si el gobierno nacional no empieza a adoptar medidas para aumentar rápidamente las reservas petroleras del país, incluida la fracturación hidráulica, las perspectivas fiscales podrían ser el gran dolor de cabeza a mediano plazo. Así lo asegura Sergio Restrepo, decano de la facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Antioquia.

Restrepo asegura que hoy los ingresos del país tienen una gran dependencia del petróleo y del sector minero, por esa razón las perspectivas fiscales pueden convertirse en una gran preocupación si no se trabaja en este frente. Sin embargo, se considera relativamente optimista frente al desempeño de la economía el próximo año.

SEMANA. ¿Cómo cierra la economía en 2019?

Sergio Restrepo. La economía cierra con una dinámica positiva el 2019, en el tercer trimestre el crecimiento del PIB fue del 3,3 por ciento anual según cifras del Dane.  Significa en lo corrido del año un crecimiento del 3,1 por ciento. Impulsado por la demanda interna, más que por la externa, pues el consumo (bienes durables y semidurables) de los hogares que creció 4,9 por ciento y la inversión total (obras civiles y maquinaria y equipo) se aceleró respecto al segundo trimestre de 2018.

SEMANA. ¿Qué tanto impactará la protesta social el desempeño de la economía en este ano?

S.R. Bueno, realmente las pérdidas han sido importantes en especial para el comercio y el transporte público, pero hay que sumarle los daños por los actos de vandalismo, esto en ciudades como Bogotá. Pero en ciudades como Medellín el comercio no se ha visto afectado, marginalmente el transporte y el vandalismo ha estado ausente. El efecto del paro es muy difícil de calcular con exactitud, no obstante cálculos preliminares de los mismos gremios afectados tasan en unos 400 millones de dólares la pérdidas por las jornadas de protestas principalmente en Bogotá, si esto tiene un efecto apreciable se verá con más claridad en el cuarto trimestre. No obstante, esta es una cifra que no alcanza a afectar dramáticamente la dinámica económica de todo un país. El efecto, aún imprevisible, podría venir de los acuerdos a los que llegue el Gobierno con los representantes de la mesa nacional de dialogo.

SEMANA. ¿Cómo ve las perspectivas económicas para 2020?

S.R. Para 2020 las perspectivas son halagüeñas, pero el optimismo no puede ser desbordado,  nosotros tenemos una perspectiva de crecimiento del 3,4 por ciento del PIB para 2020.
SEMANA. ¿Cuál cree que serán los motores de la economía  del próximo año?

S.R. Creemos que el desempeño económico seguirá impulsado por la dinámica de la demanda interna, en partícula el consumo de los hogares y la inversión de las empresas. 

SEMANA. ¿Qué temas le preocupan para 2020 que pudiera impactar el desempeño económico?

S.R. Es preocupante el tema minero-energético, los ingresos del gobierno nacional central dependen mucho del petróleo, si rápidamente no se empiezan a implementar medidas para aumentar las reservas petroleras del país, como la fracturación hidráulica, las perspectivas fiscales pueden ser una gran preocupación, eso pese a que existe un marco fiscal de mediano plazo que el gobierno juiciosamente se empeña en cumplir, pero que puede ser insostenible en un escenario de bajas reservas petroleras.

El frente externo seguirá siendo de alta incertidumbre mientras el Gobierno del presidente Donald Trump no llegue a un acuerdo concreto con China, algo que puede verse afectado pues será año electoral en Estados Unidos. Pero los analistas esperan una desaceleración de Estados Unidos y Europa el próximo ano.

La volatilidad del dólar es preocupante, una tasa representativa de mercado demasiado alta beneficia solo a unos pocos agentes de la economía, pero en el largo plazo presiona la inflación al alza. 

La inmigración hacia el país puede ser un factor positivo siempre que sea convierta en empleo formal, pero lastimosamente el desempleo actualmente no responde en la medida en que crece el PIB y las causas aún son debate de discusión.

SEMANA. ¿Son optimistas, moderadamente optimistas o pesimistas con la perspectiva?

S.R. Somos moderadamente optimistas.