Economía

Reforma tributaria y presupuesto desfinanciado: “Golpe bajo a la economía y a los colombianos”, el duro pronunciamiento de Fenalco

Para Jaime Alberto Cabal, presidente de este gremio, si el Congreso aprueba el presupuesto, implícitamente estará aprobando un proyecto desfinanciado, lo que no se había visto antes en la historia reciente del país. El Gobierno debe controlar el desbordado gasto en burocracia, el despilfarro de recursos, y preocuparse por la recuperación de los billones perdidos por la corrupción, dijo.

Redacción Semana
10 de septiembre de 2024
Jaime Alberto Cabal
Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, se mostró preocupado por la reforma tributaria que presentó el Gobierno. | Foto: Fenalco

Tras la presentación de la reforma tributaria de parte del Ministerio de Hacienda al Congreso para buscar 12 billones de pesos que le permitan cuadrar las cuentas con el Presupuesto General de la Nación, las reacciones no se han hecho esperar.

Fenalco, el gremio que agrupa a los comerciantes del país, se mostró muy preocupado por el anuncio de la reforma tributaria en las condiciones actuales de la economía, que todavía no levanta cabeza y no muestra una tendencia de crecimiento sostenida.

Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, calificó como “un golpe bajo a la economía y a los colombianos” el anuncio de una nueva reforma tributaria en las actuales circunstancias del país y bajo la presión de un presupuesto desfinanciado por 12 billones de pesos, cuyo proyecto —presentado por el Ministerio de Hacienda— registra un incremento en los gastos de funcionamiento para 2025, del 6,8 % y, agregó, en contraste un desplome en la inversión cercana al 17 %, justo cuando se requiere más formación de capital para dinamizar la golpeada economía.

 El ministro Ricardo Bonilla habría asegurado el presupuesto a la UNGRD y solicitado contratos para congresistas.
El ministro Ricardo Bonilla presentó este martes 10 de septiembre la reforma tributaria para cuadrar cuentas con respecto al presupuesto. | Foto: LESLY SANCHEZ-SEMANA

Cabal señaló que el país debe evaluar el alcance de una reforma de esta magnitud, en medio de un momento de desaceleración y estancamiento económico. “Este año el ritmo sigue siendo lento, con un 0,7 % en el primer trimestre y un 2,1 % en el segundo, que no se puede interpretar como un camino de reactivación, pues está mucho más explicado por el incremento de los gastos en burocracia y de la administración pública, cuyo crecimiento fue superior al 13 %”, explicó.

Afirmó que los colombianos no están preparados para una nueva reforma tributaria y dijo que este gobierno le ha venido cerrando las ventanas de oportunidad al contribuyente y “esto, como lo hemos advertido en los últimos dos años, ha afectado notoriamente el ingreso disponible de los hogares, afectando el consumo, el ahorro y la inversión”, agregó.

En su pronunciamiento, el líder gremial reiteró que otra reforma tributaria es inconveniente, “porque tenemos una economía en desaceleración y estancada, que está sufriendo los efectos de las reformas de 2021 y 2022. Hacemos un llamado para que el Congreso de la República tenga en cuenta estas realidades, tome las decisiones a las que haya lugar y no permita semejante agresión a los contribuyentes”, manifestó Cabal.

El Congreso de la República aprueba el presupuesto general, pero, posteriormente, el Ejecutivo debe emitir un decreto de liquidación con un anexo específico sobre el gasto.
En manos del Congreso de la República quedará no solo el futuro de la reforma tributaria sino también el monto del presupuesto, en lo que se anticipa será un pulso con el Gobierno. | Foto: guillermo torres-semana

También advirtió sobre la inconveniencia de que el Congreso de la República apruebe un presupuesto para el año entrante desfinanciado en 12 billones de pesos porque esto les “metería presión” a los congresistas para que aprueben como sea una reforma tributaria.

Cabal señaló que, si el Congreso aprueba el presupuesto, implícitamente estará aprobando un proyecto desfinanciado, lo que no se había visto antes en la historia reciente del país. “Hay que hacer las cosas al derecho y esto es reducir el presupuesto en 12 billones de pesos y dejarlo en 511 billones en equilibrio”, enfatizó.

“Los proyectos del presupuesto desfinanciado y la nueva reforma aumentan la incertidumbre política y el nerviosismo de los mercados. Antes que una nueva reforma tributaria, el Gobierno debe ser serio en el control del desbordado gasto en burocracia y el despilfarro innecesario de recursos, así como y preocuparse por la recuperación de los billones perdidos por la corrupción”, concluyó Cabal Sanclemente.

Ricardo Bonilla, ministro de Hacienda, presentó en la mañana del martes 10 de septiembre, en el Congreso, la reforma tributaria que, según él, busca —por una parte— una serie de estímulos tributarios para contribuir a la reactivación de la economía, y —por otra— identificar ingresos tributarios en áreas donde hoy no existe ese gravamen y debería existir. “No tiene ningún sentido que estemos gravando los distintos juegos de suerte y azar y no gravemos las plataformas. Lo que estamos es nivelando todos los juegos de suerte y azar”, explicó el ministro en uno de los casos que incluye el proyecto.

Los juegos online en Colombia están regulados desde 2017, lo que ha impulsado el surgimiento de nuevas plataformas y tecnologías.
A las plataformas de juegos de suerte y azar en Colombia se les aumentará el IVA. | Foto: iStock

Otro es nivelar la tarifa del IVA de los vehículos híbridos que, dijo, realmente no son de transición energética, “son altamente consumidores de gasolina y sólo estamos dejando con tarifa diferencial los vehículos eléctricos”.

También señaló que se busca identificar los activos improductivos que son los que deben pagar el impuesto al patrimonio y explicó que para eso existe ya una definición de qué es un activo productivo: todo aquel que esté relacionado con la fuente de los ingresos, y agregó que eso hoy tiene un tratamiento preferencial en el país y se mantiene. “Y ese patrimonio productivo no debe generar impuesto al patrimonio. Lo que no es productivo, es improductivo, debe estar pagando impuesto al patrimonio. De tal manera que hacemos que todas las actividades económicas limpien sus activos y construyamos una senda de crecimiento y productividad en Colombia. Hoy está mezclada porque las empresas están combinando activos productivos e improductivos”, advirtió.