Tetra Pak desarrolla un negocio que va más allá del empaque. Economía circular, su gran apuesta

Los colombianos han sido testigos de la evolución de los empaques para bebidas de leche y la botella de vidrio es la más recordada por los abuelos. Sin embargo, la logística de entrega y conservación que implicaba llegar hasta las casas y hervirla llevó a la industria a optar por nuevos recipientes, como las garrafas y la bolsa de plástico. En 1992, con el arribo de Tetra Pak y su cliente Alpina, ocurrió el gran salto al envase de cartón, abriéndoles las puertas a otras bebidas y a la economía circular, que cada vez toma más fuerza en el país.

Aun cuando las botellas de vidrio, las garrafas y las bolsas plásticas siguen en el mercado, los envases de cartón sobresalen por la protección del producto al evitar el ingreso de luz y oxígeno; además, por su facilidad de almacenamiento y transporte, gracias a la forma rectangular, que permite apilarlos eficientemente, y por su compromiso con la sostenibilidad, al ser ciento por ciento reciclables.

Con estas bondades, Tetra Pak, de origen sueco, empezó su crecimiento en Colombia, con un ritmo de doble dígito y sobresaliendo en su mercado regional, compuesto por Perú, Ecuador, Bolivia y Venezuela. En 2023 vendió 419.093 millones, 19,6 por ciento más que en 2022. Este año esperan crecer 4,55 por ciento en el país, un 5 por ciento en la región y 3,84 por ciento globalmente.

Así lo augura Marcela Velásquez, directora general de Tetra Pak para la región Andina, un puesto que por primera vez ocupa una colombiana. Es egresada de Administración de Empresas de la Universidad de los Andes, lleva 13 años en esta compañía y más de 20 años de experiencia en firmas nacionales e internacionales. Con estas credenciales y “con mucha pasión y mucho amor por lo que uno hace y haciendo las cosas bien”, logró escalar a este cargo regional.

Para Velásquez, la evolución de Tetra Pak va de la mano con el desarrollo e innovación de sus clientes y aliados. Alpina fue el primero y luego Postobón con sus jugos, y así se fueron uniendo grandes marcas en Colombia a la nueva tecnología de procesamiento y de envasado de alimentos, que puede ser vendida a los clientes o rentada. En Colombia, aclara, no hay plantas de producción, los equipos son traídos de Europa y los materiales, de Brasil y México.

Normalmente, lo que se conoce de Tetra Pak es la caja de cartón. No obstante, en el mundo ofrecen diferentes materiales de empaque para lácteos, bebidas y productos de origen vegetal, incluso sólidos, como el queso, alimentos para bebé y mascotas. “Sí hemos tenido un boom de las bebidas vegetales, almendras, avenas, etcétera, que siguen creciendo”, señala Marcela. Agrega que, aun cuando en Colombia ya empieza a diversificarse, como en licores, la mayoría de los empaques son para leches y jugos.

Y, aunque el 70 por ciento del material es cartón, también llevan polímeros y aluminio, que protegen de la humedad y contra el oxígeno y la luz. Por su compromiso de sostenibilidad, “los envases de cartón de fuente vegetal presentan materiales renovables y de origen responsable, como cartón y polímeros de caña de azúcar utilizados para tapas, capas protectoras y revestimientos, certificados a partir de fuentes controladas y gestionadas de manera responsable”.

Añade que Tetra Pak no es solo el material, sino una solución de llenado. “Un cliente nuestro de lácteos, por ejemplo, procesa la leche, la pasteuriza y después la empaca con una máquina nuestra, que es una máquina aséptica. Así, el producto empacado con esta tecnología no requiere conservantes y puede llegar a cualquier parte de Colombia sin necesidad de refrigeración”, explica la directora general.

Pese a los retos como la pandemia por el covid, Velásquez señala que el consumo fuera de casa volvió a crecer, especialmente los productos con tapa que usan los niños para la lonchera, que se reactivaron con la apertura de los colegios, y en esto sirvió la innovación. Sin embargo, la categoría de leche sigue contraída en Colombia. El sector lechero es clave para Tetra Pak por ser Colombia el tercer productor en la región, después de Brasil y México.

A pesar de la contracción de este sector y a la inflación, que han impactado a toda la población nacional, esta multinacional sueca sigue apostándole al país con su inversión. “Nosotros hemos seguido invirtiendo con nuestros clientes, seguimos impulsando la innovación y el lanzamiento de nuevos productos. Todos los planes estratégicos empiezan ahorita en estos meses. Tetra Pak siempre les ha apostado a Colombia y a la región Andina”.

En Colombia, desde Bogotá en su mayoría, 130 personas se encargan de dar vida a esta empresa en el país. Junto con sus clientes y aliados han ido adaptándose a las nuevas realidades y al compromiso con la protección del planeta. De hecho, su gran meta para 2030 es desarrollar “el envase más sostenible del mundo”.

Uno de sus grandes aliados en Colombia en economía circular es Proplanet, compañía recicladora que apoya el proceso de aprovechamiento de los envases Tetra Pak.

El año pasado, 15.000 recicladores directos y 18.300 indirectos reunieron 5.200 toneladas de envases y este año esperan llegar a 6.400 toneladas, un incremento del 20 por ciento. El año pasado también aumentaron 20 por ciento frente a 2022. “Vamos hacia una tasa alta de reciclaje. Estamos esperando que Proplanet, con su nueva instalación, pueda llegar a 11.000 toneladas de material posconsumo reciclado”.

La pulpa de cartón se usa para cartones de huevos y recipientes de comida. El polialuminio, para láminas de viviendas, materas y tejas; con él también se pueden fabricar partes para motos mediante inyección. “Realmente, todo se transforma en productos nuevos y superútiles. Queremos que la mayor cantidad de material llegue a Proplanet para que se pueda reciclar, entrar en toda la cadena y así apoyar la economía circular”, agregó Velásquez, quien precisó que Tetra Pak invirtió 5.000 millones de pesos en Proplanet.

Bajo su compromiso verde, Tetra Pak continúa apostando por el país y la región, pese a los vaivenes políticos y económicos. Factores como el dólar, la inflación y la incertidumbre causada por los nuevos Gobiernos han sido sorteados apoyándose en lecciones aprendidas tanto en el ámbito local como global. La compañía se reinventa constantemente a través de la innovación en sus productos a fin de reducir cada vez más su impacto en el planeta.