EMPLEO
Zoom y WeWork pronostican lo que será el trabajo en el futuro
En un conversatorio, voceros de las dos compañías dieron a conocer su percepción sobre lo que pasará con la forma en la que trabajan los ciudadanos del mundo y cómo las empresas deben adaptarse a ello.
El trabajo remoto. Unos lo critican, se declaran cansados de pasar de la sala al cuarto de estudio donde está el computador. Otros se asustan al pensar que tendrán que volver a utilizar una hora en ataviarse para ir a la oficina y otro tanto en las vías, según la distancia de la casa al trabajo.
Sea cual sea la idea que se tenga del trabajo en casa, es una realidad que, aunque ya existía, se metió con fuerza en la pandemia y el coronavirus dejó algo claro que sí es posible. Antes de la emergencia sanitaria, esta modalidad de trabajo era considerada poco efectiva y productiva.
Hoy esa visión ha cambiado y muchas compañías han experimentado los beneficios de trabajar desde cualquier lugar, tanto así que ya varias tomaron la decisión de implementar de forma indefinida esta modalidad.
Pero más allá de los retos que tendrá el establecer el trabajo remoto en el mundo, esta situación ha traído consigo una gran pregunta ¿qué pasará con las oficinas y los espacios físicos para trabajar?
Muchos aseguran que la oficina del futuro será internet. De hecho, hoy se sabe de un gran número de compañías en las que sus colaboradores no se conocen físicamente, ya que todo lo han hecho de manera virtual.
Sin embargo, hay otros que consideran y que ya están viendo cómo un modelo híbrido entre lo virtual y lo físico se empezará a consolidar en el mundo laboral.
Durante el conversatorio ‘Powering the future of work’, en el que participaron Claudio Hidalgo, head de WeWork en Latam, y David Díaz, head de Zoom para la región, afirmaron que estos espacios, tal y como los conocemos hoy, están llamados a transformarse.
Ambos voceros concordaron que el mayor cambio que generó el coronavirus fue que las personas se dieron cuenta de que no quera necesario estar en un mismo lugar “marcando tarjeta” a diario para ser productivos y cumplir con sus obligaciones laborales.
“La oficina tradicional, como la conocemos, nació hace más de 300 años con la revolución industrial y es increíble que tan solo en pandemia y después de tanto tiempo nos estemos cuestionando sobre cómo estamos trabajando”, afirmó Hidalgo.
Díaz, por su parte, aseguró que la pandemia aceleró las transformaciones que se venían dando a nivel mundial en materia laboral y que cambió la concepción de que la oficina fuera un lujo para convertirse en un lugar de paso.
“Antes la oficina era como una especie de lujo. Hoy con internet y con herramientas como Zoom las personas, especialmente en la región, se dieron cuenta que pueden trabajar desde un parque, un café, un espacio de coworking, la casa. Así, trabajar de forma remota es fundamental hoy para todo tipo de personas”, señaló Díaz.
Adicional, los expertos señalaron que el hecho de haber experimentado de primera mano los beneficios de trabajar remotamente´- como aprovechar más el tiempo libre y ser más productivos - impulsará a las compañías a implementar modelos flexibles de trabajo, pues sus colaboradores buscarán mantener algunos de ellos.
En ese sentido, afirmaron que el futuro del trabajo será en una modalidad híbrida en la que las compañías brinden a sus trabajadores la oportunidad de trabajar desde cualquier lugar y tener un espacio en sus oficinas para que, en el momento que lo deseen o como planifique, este pueda ir y cumplir con sus actividades desde allá.
“Sin duda no volveremos a lo de antes, pero tampoco podemos negar esa necesidad de compartir en un espacio con los compañeros de trabajo. Es por eso que creemos que el futuro será híbrido en el que las empresas tendrán que ofrecer a sus colaboradores espacios físicos en donde puedan ir a trabajar y herramientas tecnológicas que les permita hacerlo desde el lugar que ellos elijan”, señaló el head de Zoom para Latinoamérica.
Y la tendencia ya se está consolidando. Varias empresas en el mundo han anunciado que además de implementar el trabajo remoto “para siempre” brindarán a sus trabajadores beneficios como accesos a coworking cercanos a su ubicación o a las oficinas de la compañía que se adaptarán para la nueva realidad.
Uno de los principales cambios, según Hidalgo, es que así como antes el trabajar remoto era considerado como un beneficio, hoy lo es tener un espacio en el que de vez en cuando la fuerza laboral pueda ocupar para cumplir con sus tareas.
De hecho, en el caso de WeWork se ha empezado a notar un especial interés de las compañías por adquirir planes para que sus colaboradores puedan trabajar en cualquiera de los edificios de la compañía y acceder a los beneficios que brindan estos espacios. “Como una especie de bonificación”.
“Muchos pensaron que en principio estas medidas se tomaban para sobrellevar la pandemia. Pero lo cierto es que una vez se supere la emergencia será muy difícil eliminar los nuevos hábitos que hemos adoptado y el solo hecho de descubrir que se puede trabajar en un lugar diferente sin marcar tarjeta y sin estar en la oficina como antes, hace que las empresas se tengan que ajustarse a esa nueva realidad buscando alternativas como las que ofrece hoy WeWork para lograrlo”, aseveró.
En esa línea, WeWork ha detectado varias tendencias de lo que sería el trabajo remoto en el futuro. La primera es el ‘Skeleton Staffin’, que consiste en rotar a los equipos que entran físicamente reduciendo el aforo. Otra es la descentralización de las oficinas, que consiste en distribuir la fuerza de trabajo a través de diferentes centros satélites, lo que les permite viajar de manera segura y fácil a pie o en bicicleta. Finalmente, señalaron ofrecer opciones para trabajar desde casa o de manera remota apoyándose de espacios de trabajo colaborativo.
Al cierre del conversatorio, los dos voceros señalaron que entre los retos que debe enfrentar la consolidación del trabajo remoto o híbrido será la capacidad de liderazgo de las compañías para implementar esta modalidad, así como la capacidad para adaptar sus políticas internas a la nueva realidad.
Por otro lado, consideran clave la regulación para la cual hicieron un llamado a los gobiernos de la región a poner sobre la mesa la discusión sobre las reglas de juego que se deberán cumplir con esta nueva forma de laborar.
Y finalmente señalaron la importancia de la tecnología y de mejorar la conectividad en especial en las zonas rurales de los diferentes países de la región, lo cual será clave si se quiere llevar a la fuerza laboral a adaptarse rápida y eficazmente a una nueva normalidad en el trabajo.