Entrevista
Ricardo Roa, presidente de Ecopetrol, defiende su gestión, en medio de las preocupantes pérdidas, y asegura que la petrolera “no se va a acabar”
Ricardo Roa, presidente de la petrolera, defiende su gestión, resalta el incremento en la producción y el transporte de crudos y otros productos. Aunque reconoce que el proyecto con la Oxy en el Permian era favorable, no había ambiente en el Gobierno para que aprobaran un endeudamiento de este nivel para comprar fracking.
SEMANA: ¿Qué les dice a las críticas que llovieron esta semana al presentar el balance de Ecopetrol?
RICARDO ROA: Lo primero mostrar que como hemos venido indicando prácticamente durante el año y tres meses que llevo al frente de la compañía, nos mantenemos en unos desempeños de los parámetros operativos muy altos, siempre al alza. Y estamos registrando una producción de 758.000 barriles promedio día en el primer semestre, eso es un incremento importantísimo. Esta cifra no se tenía hacía ocho años en Ecopetrol. Eso quiere decir que estamos produciendo y poniendo al mercado casi 5 millones de barriles más este primer semestre del año que lo que hacíamos respecto del año anterior. Y la meta eran 730.000. Estamos prácticamente casi 5,5 millones de barriles en el semestre por encima de la meta para este año.
También es un buen indicador el volumen de transporte que por los poliductos y oleoductos del país estamos transportando. Estamos por encima de los 1.130 millones de barriles día, entre crudos y productos, y en las refinerías es una carga histórica. Nunca habíamos tenido 428.000 barriles día cargados en las refinerías. Esto es dándole una mayor autonomía al país en la producción de gasolina e importando mucho menos.
Esto muestra que en Ecopetrol no hemos detenido la actividad ni la hemos parado, sino que seguimos trabajando y produciendo al ritmo que las condiciones nos lo permiten.
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SEMANA: ¿Y en exploración?
R.R.: El otro tema es la actividad exploratoria. Son 600 millones de dólares este año que tenemos pensado invertir. Ya vamos en 200, en prácticamente 10 pozos que queremos perforar. Vamos en 4 y en el resto del año vamos a perforar 6 más para alcanzar esa meta de casi 600 millones de dólares que tenemos dentro del plan de inversiones. Mostrando que seguimos produciendo y buscando más petróleo y gas.
SEMANA: ¿Por qué vienen cayendo las utilidades y los ingresos trimestre a trimestre? ¿Qué se está reflejando ahí? ¿Qué pasa con la tasa de cambio?
R.R.: El primer semestre de este año, comparado con el del año anterior, el impacto es grandísimo, 95% de la TRM son 675 pesos por dólar menos que estamos teniendo, que impactan la utilidad neta en 3,3 billones. Eso no es una cifra menor. 95% de afectación en la relación con el año anterior, tasa de cambio. Y el otro 5% son los mismos efectos que hemos venido anunciando: la inflación, los costos en el primer trimestre afectados por el fenómeno de El Niño, mayor precio del gas, mayor precio de la energía. Esto ha impactado. Y obviamente el incremento en los impuestos de la actividad petrolera en el país, pues hace tener una menor utilidad, un menor Ebitda. Pero pues en el caso de la nación, el 88% de eso que no sea Ebitda se va en impuestos y entonces compensa la diferencia en utilidad.
SEMANA: Lo que se escucha es que el gobierno Petro va a acabar con Ecopetrol, que está destruyendo la gallina de los huevos de oro. ¿Qué les dice a esos críticos?
R.R.: En 2022 y 2023 la Nación recibió casi 100 billones de pesos de transferencias. Las transferencias que le hace Ecopetrol a la nación son, primero en impuestos, es el volumen más grande de transferencias, luego en regalías y tercero en dividendos. Si uno coge las transferencias que le ha hecho Ecopetrol a la Nación entre 2022 y 2023, pues eso suma 100 billones. Para este año estamos esperando que sea una cifra no menor a los 38 o 39 billones de pesos, 21 en impuestos, unos 10 en regalías y cerca de 8 billones en utilidades netas. Esa es la gran muestra de que Ecopetrol sigue trabajando y sigue produciendo y entregándole riqueza a la nación y a todos sus accionistas.
SEMANA: Hablando del presidente Petro, la entrega de resultados coincidió con todo el tema de CrownRock y de lo que se conoció como el proyecto Oslo. ¿El presidente Petro intervino para que Ecopetrol desistiera de entrar a ese proyecto, que tendría grandes beneficios?
R.R.: Esa fue una ventana de oportunidad que se abrió desde el año pasado cuando Oxy anunció la compra del 100% de los activos que en la cuenca del Permian tenía el operador CrownRock, eso por un monto cercano a los 12.200 millones de dólares.
Desde ahí, en el marco del acuerdo que Ecopetrol tiene suscrito con Oxy desde el año 2019, se le abrió la oportunidad a Ecopetrol de evaluar la posibilidad de tener hasta el 49% de esa participación en esa sociedad. Y allí empezamos a evaluar, se hicieron múltiples reuniones. En marzo teníamos un plazo para anunciarle porque tenía que salir Oxy a saber si nosotros iríamos en el negocio o no, para poder buscar su apalancamiento financiero para la transacción. En marzo le hicimos anuncio de que íbamos a evaluar y entramos en conversaciones con Oxy para evaluar la posibilidad de adquisición. Ahí podríamos adquirir del 0 al 49% de participación en este negocio. Se evaluó, contratamos bancas de inversión, asesores, los equipos internos de trabajo, allá en el Permian, aquí en Colombia, y posterior a eso se llevó la decisión a muchas instancias de maduración. El negocio siempre se vio con unos números excelentes, desde todo punto de vista.
Desde lo técnico, desde lo económico, desde lo tecnológico, desde lo ambiental, desde la incorporación de reservas y producción, un activo limpio, todos esos beneficios y atributos fueron estudiados y analizados en todas las instancias. Pero mediaba entre la decisión y la necesidad que tenía Ecopetrol de ir a obtener la aprobación del endeudamiento público del 100% del monto. Había que ir a la financiación del 100% de los bancos para lo cual era necesario consultar al Ministerio de Hacienda y Crédito Público, y ahí fue donde quizás se presentó la situación en la que sensibilizamos, socializamos con el gobierno y dijeron, con la situación actual que está la empresa, no va a ser posible que les aprobemos un nivel de endeudamiento de 3.700 millones de dólares, más la deuda que ya tiene la nación. Entonces, ahí hubo una alerta. También esta situación la advirtió una de las calificadoras de riesgo por el nivel de endeudamiento. La deuda de Ecopetrol al corte de junio es de 27.700 millones de dólares, estamos hablando de prácticamente 115 billones de pesos, es un nivel de deuda Ebitda muy alto, que además nos estaba poniendo en el tope, que hemos definido como política, para no arriesgar el grado de inversión. Por esas dos cosas es que se tomó la decisión de no avanzar en la negociación.
SEMANA: Permítame que le insista, ¿pero el presidente Petro, no intervino?
R.R.: Primero, Para nadie es secreto que el presidente tiene una postura muy clara frente a la exploración y explotación de recursos no convencionales, como es el caso de esta explotación de los recursos en el Permian. Segundo, también, se ha establecido el plan de inversiones del año 2024, que anunciamos el año pasado, cerca de 5.600 a 6.600 millones de dólares para este año, y que en el trianual implica unos 20.000 millones de dólares. En ese plan hay una apuesta, primero, a mantener y a privilegiar el negocio tradicional. Casi el 60% de los recursos de ese plan de inversión van destinados al negocio tradicional. En sus tres segmentos, ahí hay como 62% de esos recursos, y 38% van destinados a proyectos de transición energética, dentro de los que está con una participación importante la actividad exploratoria del gas natural en el offshore.
SEMANA: Lo que hay en el ambiente es que la junta directiva tomó la decisión de hacer el negocio y el presidente intervino y no dejó hacer el negocio. ¿Eso es verdad o no es verdad?
R.R.: Es buena pregunta para aclarar. Como lo mencioné, hay una gran cantidad de instancias internas donde se evalúa. Después de que el proyecto tiene el visto bueno de estas instancias, va y hace una recomendación de llevarlo al comité de nuevos negocios de la junta directiva. Ahí se hizo la recomendación de llevarlo a la junta, pero condicionado a que se sondeara si había ambiente para obtener la aprobación de ir al endeudamiento público. Y ahí fue cuando ya llegamos a la junta y yo lo consulté con el ministro y el ministro me dijo: “Yo no encuentro ambiente para que el presidente nos vaya a aprobar un endeudamiento de este nivel y para comprar fracking”. Esa fue la respuesta y con fundamento en ella es que había un riesgo que, si nosotros hubiéramos aprobado la transacción, pero si hubiera caído, por ejemplo, por no obtener esa aprobación, estaríamos expuestos a tener una penalización cercana a los 270 millones de dólares. Y eso era un riesgo altísimo que no queríamos ninguno asumir.
SEMANA: ¿Qué dijo la junta cuando se llega a esa decisión que era contraria a la de la misma junta?
R.R.: La junta no ha sesionado en pleno. El comité de inversión que recomendó llevar a la junta es un poco menor de composición y demás, pero siempre en todos los análisis que se hicieron al interior de la junta hubo puntos de vista de todos. Tenemos ambientalistas, una psicóloga especialista en el tema social y relaciones, economistas e ingenieros. Había todos puntos de vista, pero nunca fueron desconocidos los buenos números del proyecto, eso nunca se cuestionó. Aquí quedamos expuestos, fue justamente a una condición que no estaba en nuestras manos definir y era la posibilidad de ir al endeudamiento. Si no hubiéramos visto los atributos del proyecto, seguramente no habría llegado hasta la última instancia, que es la decisión de la junta. Hay dos elementos: habíamos podido llegar al límite de deuda Ebitda de 2,5% y eso fue una advertencia que hizo una de las calificadoras de riesgo y pondría a la compañía digamos en un riesgo de estar perdiendo el grado de inversión. Y el otro era justamente la necesidad de acudir a esa aprobación de Hacienda, que de no tenerla y habiendo ya comprometido la decisión del proyecto, habíamos tenido que incurrir en la penalidad.
SEMANA: ¿Qué pasó con Juan José Echavarría, miembro de la junta? ¿Es cierto que renunció?
R.R.: Hasta ahora no he recibido como Ecopetrol una decisión de esas. Lógicamente el doctor Juan José fue uno de los que, en su expertise de economista, de conocedor de negocios, vio siempre números muy favorables para Ecopetrol. Pero insisto, hay esas condiciones que hicieron que no se llevara la decisión a cabo. Seguramente, algunos dejaron sus constancias del análisis del proyecto, de cómo tenía muchas bondades, pero también lógicamente tenemos que analizar la política que actualmente estamos desarrollando, como también los riesgos desde lo financiero.
SEMANA: Algunos han alertado y dicen que se rompió el gobierno corporativo y no se está respetando eso, que siempre se respetó. Eso va a ser muy malo para Ecopetrol. A esas críticas, ¿qué les dice?
R.R.: Estamos en un proceso de adaptación o de conocimiento mutuo, de interacción mutua entre una junta nueva que es diversa, que es multidisciplinaria, que es crítica, que hace análisis a profundidad. En ese buen entendimiento yo creo que el gobierno corporativo es lo que más hemos procurado todos conservar y proteger. Al punto de haber permitido que un proyecto de esta envergadura llegara a estas instancias. Este no era cualquier proyecto. Era un proyecto del mismo tamaño económico de lo que fue la adquisición del 51,4% que tenía la nación en ISA. Estamos hablando de 3.700 millones de dólares. Es prácticamente la mitad de lo que costó Reficar y es dos veces lo que pagó Brookfield por Isagen. No es un proyecto de menores cuantías. Y es un proyecto que nos ponía en unos límites de endeudamiento bastante rigurosos.
SEMANA: La presidenta de la Oxy dijo que sí había intervenido el presidente Petro en esta decisión. ¿Por qué cree que ella dijo eso?
R.R.: En las conversaciones con Oxy íbamos bastante bien adelantados, pero ya se llegó el momento en que había que tomar una decisión y anunciársela a ellos. Quizás sí fue incómodo por parte de ellos que justamente el día anterior a que se venciera el plazo para pudieran hacer su emisión de bonos y su apalancamiento financiero, con el que había que gestionar el proyecto, pues se les hubiera informado que el negocio no avanzaba más, porque no había habido una confirmación absoluta de que el negocio iba. Siempre se avisó que estábamos en evaluación y supeditados a una aprobación que debiera venir del alto gobierno, que era a nuestro endeudamiento público.
SEMANA: ¿Cómo queda la relación con la Oxy? Y se lo pregunto porque tengo entendido que el contrato que está vigente, el del 2019, termina el año entrante.
R.R.: No es que termine. Ahí se entra en una etapa de negociación que ya estamos adelantando para continuar. Lógicamente hay que revisar más que todo el plan de inversión, cualquier expectativa de producción y de mejora de la producción está asociada a un plan agresivo de inversión, a meterle más taladros, a meterle más recursos. Está también supeditado a unas negociaciones de una posibilidad de comercializar nosotros algo de esos productos que se generan del gas y los propios crudos. Hay unos elementos allí, unas primas, unos márgenes que se están revisando. Pero la relación con la Oxy no queda mal.
Ellos tenían la expectativa de que nosotros entráramos, no tanto porque nos necesitaran, sino porque para ellos es importante tener un socio, un aliado como el que tienen en nosotros desde 2019. Pero, de hecho, tenemos más proyectos, como una explotación y exploración muy importantes en el pozo Komodo 1, en el offshore, donde hay una expectativa grandísima por unos hallazgos y unas reservas muy grandes.
SEMANA: El expresidente de la Junta, Luis Guillermo Echeverri dijo que ni en pandemia Ecopetrol cayó tan bajo. Y puntualmente señaló que Petro le viene haciendo un daño terrible a Ecopetrol. ¿Qué le dice a él?
R.R.: Que a él le llegó el turno de haber hecho muchas cosas como las que ahora dice que pudiéramos hacer, ahora que nos deje a los que estamos tratando de seguir cuidando la empresa, de seguirla poniendo productiva, de seguir garantizándole al país y a los usuarios el suministro de combustibles, de los energéticos que requiere el país. Aquí hay una claridad que hay que hacer es que en ningún momento se ha hecho que vamos a volver cero la extracción petrolera. Estamos entendiendo que los recursos para la transición energética, que va, están centrados en la explotación adecuada, optimizada, estos recursos centrados en los hidrocarburos, y por eso estamos mostrando estos muy buenos parámetros operativos que quizás llevan ocho o siete años sin tenerse.
Eso le diría a él y a todos los críticos que dicen que estamos destruyendo. Ya mencioné las cifras de cuál es la generación de riqueza y de valor que estamos entregando desde Ecopetrol a la nación. Sí hay una situación muy compleja que heredamos, y es la acumulación de saldos del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles que nos dejó el gobierno anterior en una suma cercana en los últimos tres años a 80 billones de pesos, son cuatro reformas tributarias, y el gobierno ha venido honrando ese pago de esos saldos del FEPEC generándole otra vez a Ecopetrol la liquidez y la posibilidad de acometer sus inversiones y su operación con tranquilidad.
SEMANA: Cuando José Antonio Ocampo también se refiere al tema, habiendo sido ministro de Hacienda del gobierno Petro y dice que fue un error no hacer el negocio, ¿qué piensa?
R.R.: Hay oportunidades. Nosotros tenemos muchas ventanas de oportunidad de hacer negocios. Vuelvo a decir: desde lo técnico, lo económico, lo ambiental, el proyecto no es un mal proyecto, pero nosotros tenemos por ahora unas prioridades muy importantes centradas en aumentar nuestra soberanía en gas, ahí estamos, es una apuesta importante de recursos este, el otro año y el siguiente. Nosotros estamos pensando casi en 1.300 millones de dólares de aquí al 2026 en maduración y desarrollo de esos recursos que se llaman prospectivos y que van siendo contingentes y después se vuelven a reservas 3P, 2P y 1P. En eso estamos metiendo recursos importantes. La prioridad es la transición energética también en la incorporación de proyectos de bajas emisiones, de energías renovables.
Hay una propuesta económica que estamos desarrollando y que estamos implementando y es prioritaria por encima de recursos o de explotación de recursos con yacimientos no convencionales.
SEMANA: Cuando dice Ocampo que fue un error de Petro, ¿a eso puntualmente qué le dice al exministro? ¿Fue un error o no fue un error? ¿Sí o no?
R.R.: No fue un error de Petro, fue una decisión que asumió la junta, entiendo que había riesgos, pero el presidente obviamente tiene su postura frente a esta explotación y exploración de estos recursos que respetamos, validamos y tendremos en cuenta.
SEMANA: ¿Qué les dice a los accionistas minoritarios, quienes después de ver las bondades del proyecto se enteran de que no se cristalizó?
R.R.: Cuenten que seguimos y seguiremos buscando oportunidades de negocio diferentes a la explotación de recursos no convencionales con las cuales seguirles generando unos retornos competitivos durante el año y unos dividendos permanentes como lo han venido haciendo últimamente, también apalancado por la necesidad que ha tenido el accionista mayoritario de que se generen unos dividendos extraordinarios para, entre otras cosas, cubrir esos saldos del FEPC que se han venido generando en los últimos años.
SEMANA: ¿Teme que haya alguna acción de los minoritarios frente a esta decisión de la Administración y de la Junta?
R.R.: No. Creo que los minoritarios están en todo su derecho de seguir teniendo esa oportunidad, de seguir invirtiendo y de que la compañía desarrolle procesos con retornos competitivos y de manera eficiente, pero también les estamos dando muestra a los accionistas minoritarios que estamos compensando con ahorros, con sinergias, con economías muy importantes al año. Yo me tracé este año una meta de ahorros en los procesos internos de Ecopetrol de 3,7 billones de pesos, ya voy en 1,9 billones al corte del primer semestre. Eso es garantizarles, en esa mayor eficiencia, en esa mayor productividad que estamos teniendo, también una generación de retornos para ellos y que se les está entregando muy por encima de la política que es entre el 40 y el 60 de la utilidad neta alcanzada al año.
SEMANA: ¿Qué fue lo que pasó con la elección del presidente de ISA?
R.R.: No puedo dar mucha información porque hasta eso le cobró la Superfinanciera a alguien que salió a dar el anuncio. Pero se tomó la decisión de nombrar una persona presidente de ISA. Fue una votación bastante reñida, eso sí puedo decirlo, pero los detalles, habrá que esperar. Estamos en una fase en la que hay que hacer la oferta laboral al candidato, mirar sus condiciones y también hacer unas validaciones, como ya lo dijo un comunicado, sobre temas de que no tenga incompatibilidades o inhabilidades para poder ser el presidente de ISA.
SEMANA: ¿Nos vamos a quedar sin gas?
R.R.: No, bajo ninguna circunstancia. Gas hay. Va a haber y va a seguir habiendo, como ha venido habiendo. Aquí hay un fantasma de importación. Y los invito a mirar los números del 2017, el país viene importando gas. El año pasado, en estos últimos meses, hemos importado cantidades importantísimas de gas para poder superar esa criticidad del sistema frente al fenómeno de El Niño.
Alcanzamos a importar 450 millones de pies cúbicos día de gas. Eso es casi el 40% de la demanda nacional en unos meses, en unos momentos. De modo que a la importación no hay que tenerle miedo. Yo creo que es mejor garantizar la disponibilidad del gas para la industria, para el comercio, para los hogares, para nuestras refinerías.
Ecopetrol consume el 24% de la demanda nacional de gas. Y esa es una de las principales preocupaciones. Por eso hemos venido estudiando ya algunas propuestas que vamos a anunciar muy rápido, con las cuales, empezando por nuestro rebalanceo del consumo propio de gas, que ya hemos identificado, hay posibilidades de ahorrar en nuestro propio consumo un 10% y poner esas moléculas a disposición del mercado. Esos son 24 Gigabtu día de los 121 que hemos identificado de faltante para el año entrante. Y en la conexión de unos campos pequeños que hemos encontrado, puede haber otros 10, 20 millones de pies cúbicos día. De modo que estamos rebalanceando para poder asegurar la oferta.
Si no, pues vamos a traer gas, seguramente un poco más costoso que lo que cuesta tenerlo aquí en nuestros campos y moverlo por los tubos nuestros. Eso lo hemos venido haciendo en los últimos siete años.
SEMANA: ¿Descartado el tema de Venezuela?
R.R.: Yo creo que hoy la prioridad para Venezuela no está en proveernos gas. Entonces, cuando vuelva a ser prioridad, creo que volveremos a colocar el tema. No lo podemos descartar. Hay un contrato que tiene vigencia del 2007 al 2027. Ese es nuestro mecanismo por el cual jurídicamente podemos aspirar a tener el gas. El gasoducto hay que repararlo, hay que rehabilitarlo para que esté técnicamente disponible.
Y hay que contar lógicamente con la seguridad de que no vamos a violar ninguna norma de la OFAC para hacer esta transacción.
SEMANA: ¿Cuál es el mensaje para los accionistas, que están preocupados?
R.R.: Las referencias a veces son buenas, pero el tema es que estos dos últimos años no han sido tan buenos con relación a 2022, que fue un año extraordinario. Un año con el precio del barril en 100 dólares y con una tasa representativa del mercado de 4.850 pesos.
Si volvemos a tener esas condiciones, con esta producción, con estos volúmenes transportados y con esta refinación, vamos a tener unos resultados mucho mejores.
Entonces, que sigan confiando en que la gran empresa colombiana de petróleos, que ahora es Empresa Colombiana de Petróleos y Energías de la Transición, va a seguir generando riqueza, va a seguir produciendo y va a seguir trabajando, entregándole al país y a todos sus accionistas y garantizándole al país el suministro de esos combustibles y esos energéticos que tanto requiere el país para desarrollar bien su economía.
SEMANA: ¿No se va a acabar Ecopetrol?
R.R.: Ni Ecopetrol, ni el gas. Ahora vamos a tener mucho más gas que antes y seguramente el crudo hasta donde podamos exprimir esos pozos de manera eficiente, competitiva y rentable, vamos a hacerlo.