Medioambiente

¿Qué es la bioeconomía y cómo puede impulsar el desarrollo en Colombia?

Expertos advierten que el país tiene todo para convertirse en una potencia en este tema.

21 de julio de 2022
creativa
Apostarle al cuidado del medioambiente es una de las mejores inversiones de cara al futuro, según los expertos. | Foto: Getty Images

En estos tiempos donde temas como el calentamiento global, el deterioro de la capa de ozono, la calidad del aire y la necesidad de recuperar los ecosistemas; están dejando de ser un mito para la mayoría de personas en el mundo y empezaron a ponerse de primeras en la agenda empresarial, muchas empresas están buscando alternativas para poner su granito de arena en la lucha por cuidar el planeta.

Ya no solo se trata de producir mucho o tener la capacidad de hacerlo rápido, puesto que cada vez más clientes exigen que sus proveedores se comprometan con el desarrollo sostenible e incluso, según los expertos, están dispuestos a pagar un poco más para acceder a productos eco-friendly.

Así las cosas, la innovación está empezando a jugar un papel fundamental en esta nueva era que se avecina para el sector industrial, donde nacen expresiones como la bioeconomía, un término que se empieza a popularizar en el marco de la Agenda de Desarrollo 2030 para la sostenibilidad.

De acuerdo con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, este término se refiere a “una economía basada en el consumo y la producción de bienes y servicios derivados del uso directo y la transformación sostenible de recursos biológicos, aprovechando el conocimiento de los sistemas, principios y procesos y las tecnologías aplicables al conocimiento y la transformación de los recursos biológicos”.

Colombia es uno de los países más diversos en el mundo, se calcula que podrían existir entre 200.000 y 900.000 especies entre flora y fauna. Según el SiB, red nacional de datos abiertos sobre biodiversidad, aproximadamente, por cada diez especies que existen en el planeta, una habita en este territorio.

Para el docente Camilo Cárdenas, de la Facultad de Ciencias de la Universidad Antonio Nariño (UAN), esta variedad de especies que se encuentran en el país, representan una oportunidad y al mismo tiempo una responsabilidad como nación y como ciudadanos.

“Naturalmente, somos una potencia en Biodiversidad, pero qué hacemos con esa riqueza. Lamentablemente, no hemos podido sacar provecho de esto (...); contamos con una biodiversidad que no es solamente la fauna y la flora; si no sabemos lo que tenemos, no se valora y es por esto que lo más importante es seguir apoyando el conocimiento y la divulgación de lo que tenemos”, dijo este académico.

Actualmente, en el país se llevan a cabo varios proyectos que pretenden incentivar la economía basada en la riqueza biológica. Por ejemplo, desde el Instituto Humboldt, se promueven mercados comerciales que permitan fomentar el uso sostenible de plantas medicinales y hongos. Por otro lado, además de incentivar el uso comercial de diferentes productos, la investigación también hace parte importante de estas iniciativas para proteger la biodiversidad.

“La bioeconomía hoy en día se plantea como una solución a la conservación de la biodiversidad, ya que al sacar provecho económico, se produce una dinámica sostenible y sustentable que beneficia el sostenimiento y la inversión en investigación”, agregó el profesor Camilo Cárdenas de la UAN.

De acuerdo con la Universidad Antonio Nariño, un ejemplo de esto es la Plaza Distrital de Mercado Samper Mendoza, ubicada en Bogotá, donde se desarrolló un proyecto de innovación social. Junto a comerciantes de la plaza e investigadores, se identificaron 400 especies de plantas y se diseñó un prototipo para la venta de las plantas, además, un libro de saberes y preparaciones medicinales con las mismas.

“Iniciativas como la anterior ayudan a todos a sacar provecho de la biodiversidad y al mismo tiempo propiciar la conservación. A pesar de que los problemas ambientales parezcan muy difíciles de responder, individualmente todos podemos aportar, ejerciendo un control y participación ciudadana”, concluyó este docente.

En este sentido, este profesor de la UAN terminó diciendo que si bien no es una tarea fácil, puesto que aún no se define el camino a seguir, quienes se atrevan a innovar serán quienes disfruten de los primeros frutos que de esta industria, en la cual, reiteró, que Colombia aún no conoce todo su potencial.