Atención: le sale otro comprador a la aerolínea Viva Air y cada vez se dificulta más la integración con Avianca

Para alquilar balcón. Así se ha puesto la situación alrededor de la aerolínea de bajo costo colombiana Viva Air, que ha “despertado el apetito” de varios compradores, luego de haber iniciado un proceso de integración con Avianca, el cual está pendiente de la decisión de la Aeronáutica Civil.

Esta vez es Latam, que se suma a la solicitud presentada en días pasados por JetSmart, también interesada en quedarse con el pedazo de la torta que representa la aerolínea Viva en el mercado del transporte aéreo colombiano.

Con Latam serían tres los compradores de Viva, si se tiene en cuenta también a Avianca, que, si bien junto con la aerolínea de bajo costo solicitó ante la autoridad de transporte aéreo en el país una integración que ha sido sustentada más como una alianza, están en la misma ruta: tener en su sombrilla el segmento que representa Viva.

Latam Airlines Colombia, que es la aerolínea que manifestó su interés en comprar a Viva, es una multinacional que surgió de la unión de la chilena Lan, con la brasilera TAm.

Como empresa, es filian de Latam Airlines Group y, tras destapar su intención de ser el inversionista que requiere Viva Air para continuar con oxígeno, dijo estar en condiciones de iniciar las negociaciones necesarias para la adquisición.

Todos quieren con Viva

En días pasados, el presidente de la aerolínea Viva Air, Félix Antelo, había manifestado que no habría otro plan B para la compañía y sus 4.000 empleados, que la integración con Avianca, la cual, había sido solicitada ante la Aeronáutica Civil, entidad que les negó inicialmente la petición, para luego anular el proceso, con el argumento de que se estaba haciendo por el camino equivocado.

La sustentación de Antelo fue la inexistencia de un inversionista, lo que, de inmediato, tuvo eco, pues la aerolínea JetSmart inició el ramillete de interesados. Desde entonces, son varios los sucesos ocurridos alrededor de este capítulo en el transporte aéreo colombiano.

Por un lado, surgió intempestivamente la decisión de Viva, de acogerse a la insolvencia económica, a la luz del decreto emitido en 2020, el cual, está vigente hasta la mitad de este año y permite un trámite de reorganización de las finanzas de una empresa en un tiempo más corto que el que se tomarían si se acogieran por la vía de la Ley de insolvencia.

Esta decisión de Viva también sorprendió, puesto que la misma Aeronáutica Civil había emitido declaraciones, según las cuales, la aerolínea, pese a que se declaraba en dificultades económicos y para salir de ellas pedía que se agilizara la integración con Avianca, no tocó las puertas, según dijo en su momento el director de la autoridad aeronáutica, Sergio París.

Pero no fue todo. Unos días después de destaparse el interés de JetSmart en Viva, Castlesouth Limited, que es titular de los derechos de voto sobre Viva, dijo no estar enterado de la intención de la aerolínea. Posteriormente, se conoció un nuevo pronunciamiento de de Avianca, según el cual, el anuncio de adquisición de Viva sería inviable, y solo buscaba generar “una distracción a la solicitud de integración de Viva y Avianca”.