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Cadena de droguerías quebró; anuncia cierre de tiendas y hay incertidumbre entre los empleados
La compañía comenzó a cerrar sus tiendas.
Rite Aid, una reconocida cadena de droguerías, anunció que quebró desde hace algunos meses y empezó a cerrar sus tiendas en Estados Unidos, una situación que ha puesto en alerta a los empleados que tienen incertidumbre por el futuro que les espera, ya que la compañía no les puede garantizar trabajo.
La cadena, que tienen su sede en Filadelfia, Pensilvania, decidió el pasado mes de octubre de 2023 acogerse a la ley de quiebras debido a las deudas impagables, por lo que el panorama era muy difícil. En aquella ocasión, la empresa señaló que lo más probable era que se cerraran sus tiendas y, con ello, siguiera el despido de los cerca de 45.000 trabajadores que tiene en Estados Unidos, de acuerdo con la cadena CBS.
A finales del año anterior, se había anunciado que más de 150 locales de la cadena de droguerías cerrarían en diferentes sitios del país norteamericano. Ahora, este 10 de abril esa decisión se empezó a volver una realidad y la compañía anunció el cierre de varios de sus locales.
En un principio, se prevé, según el mencionado medio de comunicación, que sean 36 tiendas las que dejen de funcionar en las próximas semanas. Los primeros dos cierres se llevaron a cabo en el estado de Ohio.
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“A medida que avanzamos en este proceso, Rite Aid sigue enfocada en brindar productos y servicios de atención médica a líderes que mejoren los resultados de salud de los casi un millón de clientes a los que atendemos diariamente”, indicó la empresa por medio de un comunicado en su sitio web.
Rite Aid explicó que llegó a un acuerdo con “algunas de nuestras partes interesadas financieras sobre los términos de un plan de reestructuración que nos permitirá acelerar la transformación comercial en curso”.
En el comunicado, la empresa añadió que este plan reducirá significativamente su deuda, aumentará la flexibilidad financiera y permitirá ejecutar ciertas iniciativas clave.
El panorama en Colombia
Las cifras de la Superintendencia de Sociedades dan cuenta de que, al cierre de 2023, los procesos de insolvencia empresarial, incluidos los de reorganización, acuerdos en ejecución y los de liquidación, superaban los 4.470 casos, una cifra no solo superior a la de los tres años anteriores, sino también a la de 2019, cuando aún no se había decretado la pandemia.
El año pasado, el 71,1 % de los casos eran de reorganización y la cifra restante de liquidación, según el Atlas de Insolvencia revelado por la entidad, al que tuvo acceso SEMANA.
“Quiere decir que la mayoría son empresas que se acogen a estos procesos para salvarse, hacer acuerdos con los acreedores e, incluso, para que aquellas en liquidación se puedan devolver a reorganización”, argumentó el superintendente de Sociedades, Billy Escobar Pérez.
La lista de caídos incluye de todo, pero hay casos dramáticos como el de la liquidación de la cadena de tiendas Justo & Bueno y la bancarrota de las aerolíneas Viva Air y Ultra Air, así como la reciente quiebra de Colchones Paraíso y Muebles & Accesorios.
