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¿Cómo es trabajar en una empresa con jornada laboral de cuatro días en Colombia?

Actualmente, en el país solo hay una compañía que implementa este sistema.

14 de septiembre de 2022
Mujer trabajando en un fábrica industrial.
Esta es la primera empresa en Colombia que maneja una jornada laboral diferente y da tres días de descanso a sus empleados. | Foto: Getty Images

Uno de los debates que frecuentemente se da en Colombia y otros países de América Latina tiene que ver con la jornada laboral y la posibilidad de reducirla a cuatro horas, como actualmente sucede en algunos territorios. Si bien esta fue una idea que nació a comienzos de los 2000 y se quedó perdida en el tiempo, con la llegada de la pandemia de covid-19 la posibilidad volvió a cobrar vigencia.

Con este tipo de alternativas, quienes las están ejecutando buscan estimular la creación de empleos, atraer talentos y mejorar la calidad de vida de los empleados, todo esto sin deteriorar la productividad ni aumentar los costos para el empleador. Grandes empresarios como Carlos Slim en México han llegado incluso a decir que podría ser de tan solo tres días, sin que esto reste capacidad de competir.

En Colombia, según la Ley 2101 de 15 de julio de 2021, la jornada laboral es de 42 horas semanales, distribuidas entre cinco o seis a la semana. Siempre debe existir un día de descanso y en caso de trabajar domingos o festivos, estos deben ser compensados con dinero o un día de descanso adicional.

No obstante, hay una compañía que desde el año 2020 viene implementando la jornada laboral 4/3, es decir que sus colaboradores trabajan únicamente cuatro días y descansan desde el viernes hasta el domingo. Se trata de Hada International, una industria dedicada a la fabricación de productos de aseo y el cuidado corporal, con sede en Manizales.

En entrevista con SEMANA, Roberto Gutiérrez, gerente de Hada, explicó que esta fue una idea que, si bien se puso en marcha hace unos dos años, se viene trabajando desde hace más tiempo, en el que se han dedicado a organizar cómo funcionaría y los requisitos que debía cumplir para no afectar la productividad.

Básicamente, lo que hicimos fue aprender a hacer en cuatro días lo que todo el mundo hace en cinco y, a partir de ahí, comenzar a pensar en el bienestar de la gente que trabaja para nosotros. Surge en respuesta a nuestra ideología en la que lo más importante son las personas, ellas son quienes nos dan el potencial que tenemos y solo les devolvemos un poco de todo lo que hacen por nosotros”, explicó.

Según este empresario, para lograr esta jornada laboral reducida fue necesario analizar con detalle el funcionamiento de la compañía, con el fin de detectar esos espacios en los que se estaba perdiendo tiempo y de esta manera poder optimizar los procesos. También desmintió que este tipo de prácticas le quiten capacidad de producción.

“Como ya habíamos dicho, nosotros simplemente aprendimos a hacer las cosas más rápido y puede que muchos empresarios digan que este tiempo se pudo haber usado para producir más o aumentar la capacidad, pero es ahí donde pensamos en nuestros empleados y creemos que como estamos vamos bien y si hay que crecer, pues miramos alternativas que no sacrifiquen el tiempo de las personas”, agregó.

Actualmente, en esta empresa, los más de 600 empleados que tienen directos trabajan únicamente de lunes a jueves y descansan de viernes a domingo. Esto, según el gerente Roberto Gutiérrez, “ha permitido que tengan más tiempo para sus familias o proyectos personales y de esta forma aumenten su cariño, sentido de pertenencia y productividad hacia la empresa”.

Esta es una medida que, como la vemos nosotros, nos retó y nos sigue retando a ser más ágiles, a traccionar más rápido, a tener mayor sinergia para poder hacer más rápido el trabajo que comúnmente hacemos en cinco días. Esto no resta competitividad, ser competitivo es el resultado de hacer foco en pocas cosas y concentrarse en las zonas de ventaja y tener buenas propuestas de valor”, dijo el gerente de Hada.

En su entrevista con SEMANA, este empresario barranquillero terminó enviando un mensaje a sus colegas, diciendo que si bien el modelo 4/3 no se aplica en todas las empresas, sí se puede partir por fomentar la idea de que el bienestar de los trabajadores se traduce en un aumento del sentido de pertenencia y, por tanto, en una mejor capacidad productiva que ayuda a ser más capaces de enfrentar los retos del día a día.