Cómo preparar el sector de la construcción para los retos del futuro

Al igual que cualquier sector de la economía, la industria de la construcción ha tenido que enfrentarse con los retos que demanda el futuro y la necesidad de llegar a las plataformas digitales para hacer más óptimos y productivos los procesos.

Pensando en ello, y en los objetivos planteados en la llamada Estrategia Nacional BIM, los constructores de hoy en día deben prepararse para los retos que está imponiendo la digitalización en su área, especialmente en lo que tiene que ver con la arquitectura, la ingeniería y la construcción.

De hecho, de acuerdo con las especialistas en ventas técnicas para América Latina de Autodesk, Sandra Jiménez y Amparo Hernández, entre 2018 y 2021 obtuvieron su título más de 900.000 personas en temas relacionados con este sector y se realizaron más de 15 millones de cursos complementarios, enfocados en lo digital.

El oficio de la construcción, explican las expertas, está migrando a una nueva cultura donde el registro manual y las representaciones básicas ya no son tan necesarios como sí lo son las digitales, especialmente si se busca asumir roles de liderazgo, porque permitirán garantizar la eficiencia en el ciclo de vida de un proyecto.

Por esta razón, en Colombia se requieren personas que tengan enfoques en analítica de datos, trabajo colaborativo, pensamiento estratégico, flexibilidad y destreza tecnológica, en aras de consolidarse en una industria que va en transformación.

“Estas habilidades son inherentes a su perfil, pues deberán alinearse a nuevas políticas y exigencias de buenas prácticas del escenario digital, con la responsabilidad de apoyar esta conversión, y así contribuir al crecimiento y evolución del sector y del país”, dicen las expertas.

Desde siempre, el sector de la construcción se ha caracterizado por ejecutar los proyectos desde su primera etapa, pero con la digitalización, se hace necesario pensar bajo un marco colaborativo y participar de la preparación y evaluación de los proyectos a partir de requerimientos asociados a BIM.

Esto significa pensar en temas de costos, tiempos, rentabilidad, aumento de productividad, enfocados en estrategias digitales, y para ello es necesario fortalecer los conocimientos en dicha área.

“Los constructores colombianos deben prepararse para una sociedad que está adoptando el uso de software que automatizan tareas, y que permiten dar respuesta a la actual dinámica del sector, que demanda y exige el desarrollo de proyectos de forma ágil y competitiva, y que espera la generación de mayores ingresos, menores costos, y aportes tangibles a la sostenibilidad”, explican.

Pero, ¿cómo lograr conseguir dichas herramientas? La compañía Autodesk asegura que, además de crear software de diseño para el sector, cuenta con diferentes espacios gratuitos para aprender a utilizar las herramientas del mundo digitalizado.

Estos son:

• Revit: ideal para elaborar proyectos de manera precisa. Desde el diseño conceptual, la visualización y el análisis, hasta la fabricación y la construcción.
• AutoCAD: software de diseño asistido por computadora (CAD) en el cual se apoyan tanto arquitectos como ingenieros y profesionales de la construcción para crear dibujos precisos en 2D y 3D.
• Civil 3D: herramienta para analizar el desarrollo de los proyectos de manera tridimensional, permitiendo la gestión y diseño inteligente.
• Navisworks: que gracias a la información actualizada detecta errores y conflictos en los diseños para corregirlos a tiempo, antes de la implementación.
• Insight: permite a los arquitectos e ingenieros diseñar edificios más eficientes energéticamente, con motores de simulación avanzados y datos de análisis de rendimiento de edificios integrados en Revit.

Contar con estas herramientas permiten no solo que el empleado crezca a nivel profesional, sino que también lo haga su empresa.

“Aunque el compromiso en esta conversión a lo digital va de la mano de la formación y el crecimiento de sus trabajadores, las compañías deben, por un lado, generar espacios de evaluación de los procesos de implementación de herramientas digitales, donde se puedan encontrar nuevas líneas de trabajo y estructuración”, concluyen las expertas.