Los combustibles fósiles comprenden el 80 por ciento de la demanda actual de energía primaria en el mundo y el sistema energético es la fuente de aproximadamente dos tercios de las emisiones globales de CO2.
Los combustibles fósiles comprenden el 80 por ciento de la demanda actual de energía primaria en el mundo y el sistema energético es la fuente de aproximadamente dos tercios de las emisiones globales de CO2. | Foto: getty images

MUNDO

¿Deben pagar las grandes empresas de combustibles fósiles por los daños climáticos?

Tras otro año de inundaciones, calor, huracanes e incendios forestales relacionados con el cambio climático, arrecia el debate sobre quién debe pagar los daños.

Alianza DW
Redacción Semana
19 de noviembre de 2024

Dado que la quema de petróleo, gas y carbón genera casi el 90 % de las emisiones de carbono que provocan el calentamiento global, hay activistas que piden que los productores de combustibles fósiles paguen más en compensación por su responsabilidad en la crisis climática.

“Alrededor del 70 % de las emisiones mundiales se deben a unas 100 grandes empresas de combustibles fósiles”, afirma Marco Grasso, profesor de Geografía Política en la Universidad de Milán-Bicocca, que también escribe sobre justicia climática.

Cambio climático: el gran riesgo
"Las empresas de combustibles fósiles no ponen en discusión que saben desde hace más de 60 años que la quema de combustibles fósiles provoca el cambio climático, pero han trabajado durante décadas para socavar la comprensión pública y negar la ciencia subyacente” | Foto: Getty Images

Un informe de 2023, del que Grasso es coautor, calculaba que 21 empresas petroleras, de carbón y gas, entre ellas Saudi Aramco, ExxonMobil, Shell y BP, serían colectivamente responsables de pagar 209.000 millones de dólares al año entre 2025 y 2050, en concepto de reparaciones, debido a sus emisiones históricas.

Lo sabían

Las empresas de combustibles fósiles tienen la “responsabilidad moral” de pagar los daños climáticos, subraya Grasso, ya que hace tiempo “conocen la relación entre la quema de sus productos y los impactos en el sistema climático”.

Sin embargo, afirma que algunas empresas no han cambiado “en absoluto” su comportamiento. Al contrario, han “financiado y orquestado” campañas de negación y desinformación sobre el clima.

  Luego de la revisión de las cuentas, el Ministerio de Hacienda estima una menor producción de petróleo y tiene preocupación por la escalada del dólar.
El debate sobre los mecanismos legales que puedan obligar a las grandes empresas del petróleo, el gas y el carbón a ayudar a financiar a las comunidades que se enfrentan a impactos climáticos extremos es cada vez mayor. | Foto: Getty Images

Un informe del Congreso estadounidense, publicado en abril de 2024 y titulado Negación, desinformación y doble lenguaje: la evolución de los esfuerzos de las grandes petroleras para eludir su responsabilidad por el cambio climático, llega a una conclusión similar.

El texto asegura que “las empresas de combustibles fósiles no ponen en discusión que saben desde hace más de 60 años que la quema de combustibles fósiles provoca el cambio climático, pero han trabajado durante décadas para socavar la comprensión pública y negar la ciencia subyacente”.

Hacer pagar a los contaminadores

El debate sobre los mecanismos legales que puedan obligar a las grandes empresas del petróleo, el gas y el carbón a ayudar a financiar a las comunidades que se enfrentan a impactos climáticos extremos es cada vez mayor.

Una investigación reciente, dirigida por más de 100 activistas, investigadores y funcionarios gubernamentales, ha propuesto un impuesto por daños climáticos sobre la producción de petróleo o gas en las mayores economías del mundo.

El impuesto consistiría en un gravamen de 5 dólares por tonelada de CO₂ que las empresas de carbón, petróleo y gas tendrían que asumir al extraer combustibles fósiles.

El objetivo es generar 720.000 millones de dólares de aquí a 2030, con el objetivo de apoyar a las comunidades vulnerables al clima. Ese dinero se transferiría al fondo para pérdidas y daños creado en la conferencia de la ONU sobre el clima celebrada el año pasado en Dubái para ayudar a los países a recuperarse y reconstruirse tras los desastres climáticos.

El físico alertó que la Tierra puede convertirse en una bola de fuego.
Las emisiones derivadas de la quema de estos combustibles han contribuido a daños climáticos -como la pérdida de hogares e infraestructuras, pero también de biodiversidad- por valor de unos 20 billones de dólares. | Foto: Getty Images

Según Carl-Friedrich Schleussner, asesor científico del think tank berlinés Climate Analytics, hasta ahora las grandes petroleras están haciendo “una contribución muy pequeña” a los fondos climáticos existentes, que dependen de financiación pública o estatal.

Schleussner es coautor de un estudio de Climate Analytics de 2023, que calcula que 25 grandes petroleras y gasísticas obtuvieron unos beneficios de 30 billones de dólares entre 1985 y 2018.

El estudio afirma que las emisiones derivadas de la quema de estos combustibles han contribuido a daños climáticos –como la pérdida de hogares e infraestructuras, pero también de biodiversidad– por valor de unos 20 billones de dólares.

Los autores sostienen que las empresas de combustibles fósiles podrían permitirse pagar esta cantidad en concepto de indemnización y seguir registrando un beneficio de 10 billones de dólares.

“Tienen el dinero”, incide Schleussner, quien añade que los recientes beneficios récord obtenidos por los combustibles fósiles tras la invasión rusa de Ucrania en 2022 se están reinvirtiendo en proyectos de combustibles fósiles.

Silencio sobre las compensaciones climáticas

DW se puso en contacto con las grandes petroleras BP y Shell para que comentaran su intención de pagar indemnizaciones por los daños causados por el aumento de las temperaturas debido a la combustión de petróleo y gas.

“Estamos de acuerdo en que el mundo necesita medidas urgentes contra el cambio climático”, declaró Shell en un comunicado.

La empresa aseguró su intención de invertir entre 10.000 y 15.000 millones de dólares entre 2023 y finales de 2025 en “soluciones energéticas bajas en carbono”, aunque incluye el gas natural licuado como “combustible crítico” en la transición energética.

Solo alrededor del 1,5 % del gasto total de Shell en 2021 se invirtió en energías renovables como la eólica y la solar, según un informe de la organización ecologista Global Witness.

Sobre esta afirmación, Shell no ha respondido a la solicitud de comentarios en el momento de publicar este informe. Y BP, con sede en el Reino Unido, declinó hacer comentarios sobre su intención de pagar por daños climáticos.

*De la DW.