DEMANDA
Dolce & Gabbana demandó por US$600 millones a blogueros de moda por supuesta difamación
La compañía de moda italiana denunció que los blogueros armaron un complot para que las personas asiáticas dejaran de comprar ropa de Dolce & Gabbana.
La casa de moda de Milán Dolce & Gabbana presentó una demanda por difamación en un tribunal italiano en busca de más de US$600 millones por reclamación de daños.
La demanda fue interpuesta en contra de dos blogueros de moda, quienes afirmaron que uno de los diseñadores de Dolce & Gabbana había realizado comentarios antiasiáticos, por lo que, según la firma, se armó un boicot por parte de los consumidores asiáticos.
La demanda se presentó en la corte civil de Milán en 2019, pero solo se hizo pública esta semana cuando los blogueros hablaron sobre ella en su cuenta de Instagram, Diet Prada. Su feed es ampliamente seguido en el mundo de la moda por sus comentarios cortantes sobre la falta de originalidad en los diseños y sobre cuestiones sociales.
“Todo este caso es una forma de tratar de silenciar a Diet Prada y de silenciar a Tony (Liu) y Lindsay (Schuyler) personalmente”, dijo Susan Scafidi, directora del Fashion Law Institute en Fordham Law School, que está coordinando defensa de los blogueros.
Tendencias
Los abogados de Dolce & Gabbana contactados por AP declinaron comentar sobre el caso.
El caso se remonta a noviembre de 2018, cuando Dolce & Gabbana se enfrentó a un boicot en Asia después de la indignación por lo que se consideraba videos culturalmente insensibles que promocionaban un importante desfile en Shanghai y publicaciones posteriores de comentarios insultantes en un chat privado de Instagram.
El espectáculo fue cancelado debido a la reacción violenta, que incluyó a minoristas que retiraron mercancía de Dolce & Gabbana y VIP asiáticos que rechazaron la marca.
Los diseñadores Domenico Dolce y Stefano Gabbana dijeron inicialmente que la cuenta de Gabbana había sido pirateada. Los dos aparecieron más tarde en un video disculpándose con el pueblo chino.
“Una disculpa pública y una demanda silenciosa realmente se anulan mutuamente en mi mente”, dijo Scafidi a The Associated Press el sábado.
Los abogados defensores italianos presentaron un escrito esta semana en el tribunal civil de Milán, argumentando que Italia no es el lugar correcto para el caso, dado que el blog se produce en Estados Unidos y los supuestos daños ocurrieron en Asia.
La casa de moda busca daños por un total de más de 500 millones de euros, dijo Scafidi.
Dijo que la casa de moda busca 450 millones de euros gastados para restaurar la imagen de marca desde 2018 y daños de 3 millones de euros para la empresa y 1 millón para Gabbana, a quien se atribuyeron los comentarios.
La demanda también busca más de 8,6 millones de euros por la cancelación del show de Shanghai, otros 8,6 millones de euros por gastos de personal y 89,6 millones de euros por ventas asiáticas pérdidas entre noviembre de 2018 y marzo de 2019.
Desde que salió a luz este caso, Diet Prada, que tiene más de 2,5 millones de seguidores en Instagram, ha recaudado más de US$38.000 para su defensa.
En un comunicado, Liu y Schuyler dijeron que no permitirían que su plataforma, que también ha hablado sobre el movimiento #MeToo, Black Lives Matter y los recientes ataques a asiáticos en Estados Unidos, sea silenciada por demandas.
“Diet Prada seguirá siendo una plataforma para elevar estos temas cruciales”, dijo Liu.
Schuyler pidió a “las figuras públicas y las marcas que respondan a la opinión pública y las críticas de los medios con acciones progresistas, no con demandas”.
Más problemas para la industria de la moda
Científicos de Oxford proponen que la industria de la moda ayude a revertir el declive del leopardo pagando ‘derechos’ por el uso masivo de estampados que imitan la piel de este amenazado felino.
En un nuevo artículo, los investigadores exploran el alcance del interés público en la moda del estampado de leopardo y si este interés podría aprovecharse en beneficio de los animales a través de una iniciativa de ‘derechos de especie’.
La tendencia del Animal print que emula, entre otros, los tonos y las formas del pelaje de este gran felino, apareció en la moda en 1920, cuando la actriz Gloria Swanson lució el particular patrón de manchas en un vestido. Este estampado se ha mantenido a través de las décadas, saliendo y entrando como protagonista en las prendas de las diferentes temporadas.
La doctora Caroline Good, de la Unidad de Investigación para la Conservación de la Vida Silvestre de la Universidad de Oxford (WildCRU), quien dirigió la investigación, dice: “El estampado de leopardo es una de las tendencias más perdurables de la moda. Pero, lamentablemente, los propios leopardos han desaparecido de más del 75 % de su rango histórico y se han extinguido en al menos una docena de países y regiones”.