Empleo en Colombia sí hay, pero malo: lo que más aumentó fue el trabajo por cuenta propia, muy cercano a la informalidad

Ver la tasa de desempleo en Colombia en un 10 % en marzo causó entusiasmo, luego del 14,6 % registrado en un mes intensivo en demanda de trabajadores, como lo es habitualmente diciembre. Pero la cifra no da para hacer fiestas, puesto que si bien el dato representa una reducción frente a marzo de 2022, la mayor parte de las oportunidades laborales fueron por cuenta propia, un segmento en el que anidan el trabajo informal y los bajos salarios.

Así lo advirtió el centro de pensamiento Anif, en un análisis sobre mercado laboral, en el que sale a relucir la variedad de problemas que hay en el entorno del trabajo, y que deberían entrar a hacer parte de los debates de la reforma laboral que, luego de la aprobación del Plan de Desarrollo, entrará en la agenda legislativa.

Más mujeres ocupadas, pero...

Aunque la mujer está logrando cada vez más conseguir una oportunidad laboral, falta mucho. Según el informe, el número de mujeres ocupadas entre marzo de 2022 y marzo de 2023 incrementó en 659 mil personas y el de hombres en 455 mil. Con ello, ahora hay 13,4 millones de hombres ocupados, mientras que en contraste con 9,4 millones de mujeres.

Formalización, en negativo

El informe señala que uno de los puntos más negativos es el de la formalización de sus ocupados.

En nuevos puestos de trabajo hubo crecimiento visible, pero “con 401 mil personas ingresando al empleo particular (más cercanos a las dinámicas formales), mientras que los trabajadores por cuenta propia (más alejados de la formalidad todavía) crecieron en 551 mil”, advierte Anif.

Entre el empleo por cuenta propia puede caber desde el odontólogo que tiene un consultorio como el que vende dulces en el semáforo. En todo caso, se trata de una actividad que aumenta la vulnerabilidad de quien está en ella, pues, al no tener una relación directa con el empleador, debe asumir más costos: seguridad social, por ejemplo.

Desaceleración

El contexto en el cual el desempleo baja, pero el trabajador no engancha de manera formal, surge en un momento en el cual, la economía viene en un proceso de enfriamiento, con expectativas de crecimiento que no llegan ni a 1 %.

“2023 será un año complejo en materia económica para Colombia”, afirma Anif, y agrega: “A pesar del camino recorrido en la recuperación, se espera una desaceleración, tanto por el panorama global, como por un comportamiento normal de la economía”.

Ojo con la reforma

Por esa razón, el centro de pensamiento económico Anif manifestó su preocupación, puesto que en la reforma laboral “se podrían incluir rigideces adicionales en la normativa laboral que podrían jugar en contra de la formalidad e incluso de la generación de empleo”.

Desde la perspectiva de este centro de pensamiento, la expectativa de crecimiento para el año 2023 es del orden de 0,9 %, lo que, de por sí, ya implica que será mucho más baja la capacidad de la economía para generar puestos de trabajo, lo que podría demorarse, incluso, hasta el segundo semestre del año, según estima Anif.

¿Y qué viene?

Para Anif, en abril, que recién culminó, las proyecciones indican una tasa de desempleo entre el 10,2 % y el 10,7 %, lo que representaría una disminución entre 0.5 pp y 1 pp en comparación con abril de 2022 (11,2 %).