Fedetranscarga se pronuncia sobre alza en diésel: “Es malo depender de hidrocarburos, pero es peor si son importados”

En el sector transporte es clara la aceptación generalizada de un alza en el precio del diésel, en 800 pesos, como se estableció en el acuerdo con los transportadores de la base (los que andan en las carreteras), luego del paro realizado en septiembre.

De hecho, ya se consumó el incremento, en 800 pesos, los cuales se aplicarían en dos momentos: en septiembre y en diciembre, como efectivamente se hizo ya, luego de la segunda alza de este año, que entró a regir desde el 1.° de diciembre.

Pero no por eso hay contento entre los integrantes de esa cadena que es clave para los demás sectores de la economía. Este lunes 2 de diciembre, el gremio Fedetranscarga salió a emitir su pronunciamiento y a advertir acerca de los riesgos que visualizan en el contexto del diésel, cuyo aumento tendría que avanzar hasta lograr paridad con el precio internacional (llegar a unos 16.000 pesos).

Lo acordado en la mesa de negociación que se llevó a cabo en medio del paro camionero, fue que los demás aumentos, hasta llegar a subir 6.000 pesos sobre los cerca de 10.000 que costaba cada galón, quedarían congelados mientras no se diera cumplimiento a los 15 puntos que contiene el acuerdo suscrito entre Gobierno y los voceros de los transportadores. Por el momento, en una ciudad como Bogotá, el galón va en 10.556 pesos y en 10.248 pesos en promedio en las trece principales ciudades de Colombia.

Los puntos que preocupan

Fedetranscarga no solo pidió que, en el futuro, los incrementos a aplicar hagan parte de concertaciones con participación de todos los actores del sector, esto, “en razón de la relevancia de las implicaciones económicas que dicha política tiene para los transportadores y para la economía nacional”.

Pero, además, pusieron sobre la mesa que, para volver a hablar de incrementos, el Gobierno tendría que aplicar soluciones estructurales, que incluyen temas gruesos, como infraestructura y costos operativos. Por esa razón, criticaron la forma en la que se está sustentando el cumplimiento de los puntos de acuerdo.

Pusieron como ejemplo el punto catorce, que se refiere a la fórmula de la fijación de las tarifas de los combustibles en el país. “El acuerdo no explica los ajustes que se harán o que puntos son susceptibles de cambio con el fin de dejar en firme una eventual modificación”.

Deben ser cumplidos todos

De fondo está el hecho que para volver a hablar de incrementos en el precio del Diesel deben ser cubiertos todos y cada uno de los puntos del acuerdo; nos inquieta el hecho que se esté pretendiendo dar cumplimiento al acuerdo por parte del Estado en algunos puntos sin el rigor técnico y jurídico requerido, incluso dejando de lado un estudio pormenorizado de la situación fáctica del sector y del país, afán determinado por el requisito previo al incremento del Diesel en el año 2025, el cumplimiento de dichos acuerdos.

Ojo con perder la autosuficiencia

Para Fedetranscarga, a la hora de pensar en nuevos incrementos, tendría que tenerse en cuenta que el país es productor y refinador. Por lo tanto, “somos autosuficientes y no podemos perder esta condición. Dice el Gobierno que es malo depender de hidrocarburos, pero es peor depender de hidrocarburos importados”, enfatizó el gremio.

Alerta con ley de financiamiento

De igual manera, Fedetranscarga manifestó que se mantienen en alerta con la ley de financiamiento que hace trámite en el Congreso de la República, radicada para cubrir el Presupuesto nacional de 2025, con 12 billones de pesos que le faltan. Dicho proyecto de ley, que ya entrará esta semana a la agenda del Congreso (comisiones económicas), incrementará el precio del galón de diésel en 425 pesos, lo que será adicional a las alzas que se tienen prevista para nivelar el hueco en el Fepc (Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles). De darse tal incremento sería “violar directamente lo pactado con las bases camioneras en septiembre”, para conjurar el paro.