Impulso a la innovación: auge de programas STEM en Colombia

Los programas STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas) se han vuelto cada vez más populares debido a la creciente demanda de profesionales en este campo. Según datos de LinkedIn Insights, Colombia cuenta con más de 7.486 profesionales STEM, destacándose áreas como desarrollo de software e infraestructura de producto y digital. Aunque la cifra es interesante, todavía hay campo para crecer, pues entidades como el BID prevén que solo para 2025 se necesitarán 1,2 millones de desarrolladores de software en América Latina.

“Colombia se destaca en la formación de profesionales STEM, con alrededor de 137.000 egresados cada año, ubicándose como el tercer país con más egresados en la región después de Brasil y México. Esto hace que el mercado colombiano sea altamente atractivo para la contratación de talento. A pesar de tener un PIB en el sector de TI cercano al 3 por ciento, Colombia supera a economías como las de Uruguay y Chile en el aporte de estudiantes a la región”, aseguró Daniel Camacho, director de IT, Digital & e-Commerce de Michael Page.

Por su parte, Diana Catalina Rodríguez, vicedecana de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Antioquia, aseguró que en su caso la ingeniería ha sido clave porque ha potenciado los programas en modalidad virtual y en las regiones, “contribuyendo al desarrollo del país en los municipios más alejados de Medellín”. La universidad también conformó un semillero virtual de ingeniería dirigido a estudiantes de bachillerato de todo el país de los grados 9.°, 10.° y 11.°, mediante el cual conocen a fondo sus programas académicos.

Además, estableció un comité de género para eliminar estereotipos y promover la participación femenina en las carreras STEM, “en colaboración con empresas como ISA para realizar talleres aplicados y dirigidos a mujeres en los colegios”, precisó Rodríguez

Ricardo Taborda, decano de la Escuela de Ciencias Aplicadas e Ingeniería de la Universidad Eafit, resaltó algunas inversiones para el desarrollo STEM; entre ellas, el recién inaugurado Bloque 20, un edificio de más de 10.000 metros cuadrados dedicado al aprendizaje y la experimentación en ciencias, que se suma a la infraestructura de 20.000 metros cuadrados de laboratorios y talleres STEM.

En cuanto a la oferta académica, la apertura del programa de Ingeniería Agronómica en 2019, junto a iniciativas para mejorar la enseñanza de matemáticas y física, y la creación de un centro de formación en tecnologías, amplían la oferta académica en STEM.

“Nuestra visión es seguir impulsando la educación en STEM, colaborando con colegios, aumentando la participación de mujeres y adaptando nuestros programas para enfrentar los desafíos actuales”, explicó.

Cultura STEM

En el Valle del Cauca y Atlántico se han liderado iniciativas para fortalecer los programas STEM por medio de colaboraciones con empresas locales y centros de investigación. La vicerrectora de Investigaciones de la Universidad del Valle, Mónica García, destacó la importancia de conceptos claves como la formación y la investigación en las facultades de Ciencias Naturales, Exactas e Ingeniería, y la integración interdisciplinaria de áreas STEM.

“Estas facultades contribuyen a preparar a los estudiantes para los desafíos tecnológicos del mundo actual mediante proyectos de investigación que promueven la colaboración entre diferentes actores y se fomentan los proyectos interdisciplinarios”, agregó.

García mencionó la participación de la universidad en iniciativas financiadas con recursos de MinCiencias y el Sistema General de Regalías para fomentar la cultura STEM en la población infantil, logrando impactar a 13.803 niños y jóvenes, y a 1.849 maestros de 42 municipios. También destacó la creación de la IT Academy con Huawei, dirigida por la Escuela de Sistemas y Computación.

En la Universidad del Norte también han priorizado áreas claves de la ingeniería como analítica de datos, energía, industria 4.0, materiales de construcción y medioambiente. Julián Arellana, decano de Ingenierías, dijo que han hecho inversiones para ampliar la capacidad de procesamiento de datos, y en laboratorios de energía como el de Biomasa y UniGrid, que simulan el comportamiento de microrredes eléctricas inteligentes.

“Es vital promover la educación STEM desde la educación primaria hasta la superior, con currículos flexibles y enfoque en competencias. Además, se debe fortalecer el talento y ofrecer apoyo financiero a estudiantes que lo necesitan”, concluyó Arellana.